Un Schalke 04 con varias rotaciones en su alineación fue capaz de imponerse por 2-0 ante un Eintracht que opuso resistencia hasta el último minuto del partido. Mätip y Fährmann volvieron a estar a un gran nivel y Leroy Sané anotó un auténtico golazo para sentenciar el partido ya en el tiempo de descuento.
Finalización nula
El Schalke 04 saltó al terreno de juego del Veltins Arena muy intenso y con ganas de mandar en el partido espoleado por su público. Desde el primer minuto contó con ocasiones para ponerse por delante. Joel Matip remataba fuera tras varios rebotes en un saque de esquina. El camerunés Choupo-Moting fue el siguiente en intentarlo, condujo hacia dentro pero su disparo fue directo a las manos del portero. Hradecky tuvo que emplearse a fondo para detener el lanzamiento de tiro libre de Geis y frena así el frenético inicio de partido del Schalke de André Breitenreiter.
Le costó pero a los diez minutos de partido el Eintracht entró en el partido y tuvo diez minutos en los que se impuso a los locales con cierta facilidad. Meier recortó a su par y puso un centro potente que no encontró rematador para fortuna de Ralf Fährmann. Tras diez minutos dubitativos el Schalke volvió a dominar y Höger y Choupo-Moting probaron suerte desde posiciones lejanas sin acierto. Goretzka tuvo la oportunidad de tirar dentro del área pero su disparo lo atrapó Hradecky sin muchos problemas.
El conjunto local recuperaba en campo rival y cerca del área contraria pero no lograba filtrar el último pase ni materializar sus ocasiones. El Eintracht salió rápido a la contra siempre que pudo pero ni Stendera primero ni Meier después lograron batir la meta defendida por Fährmann.
Mätip y Fährmann decisivos
A los cinco minutos de comenzar el segundo envite, Armin Veh tuvo que realizar su segundo cambio obligado tras las lesiones de Seferovic en el primer tiempo y de Zambrano en el arranque del segundo. Así pues, Aigner y Abraham sustituyeron a sus compañeros lesionados.
El segundo tiempo comenzó como el primero, con el conjunto minero queriendo controlar el partido. Sin embargo, el Eintracht en este segundo tiempo encontró muchos más espacios y facilidades para llegar a zonas peligrosas. Stendera filtró un pase interior para Oczipka que se hubiese quedado solo ante Fährmann de no ser por el cruce de Riether. El Schalke aumentó su dominio de la posesión y llegaba con facilidad hasta tres cuartos de campo, pero nunca fue capaz de romper la segunda línea de cuatro que tenía el Eintracht.
Si la posesión era de los mineros, las ocasiones eran para los visitantes. En el rechace de un córner a la hora de juego, Hasebe estuvo a punto de adelantar a su equipo con una volea cruzada desde fuera del área. Acto seguido, Ignjovski ganó línea de fondo cerca del área pequeña y sirvió un centro raso que no encontró rematador. Con intención de cambiar esto, André Breitenreiter dio entrada a Sané sustituyendo a .Marco Höger
Geis, que fue el encargado de ejecutar todos los tiros libres de su equipo a lo largo del partido, puso el balón en la cabeza de Matip pero el defensa remató a las manos de Hradecky. Los locales querían los tres puntos y para ello salió Di Santo en lugar de Choupo-Moting. Con más centímetros en el campo llegó el gol del Schalke, pero no fue el argentino sino Joel Matip a falta de un cuarto de hora. El camerunés, remató picado y cruzado el servicio de Geis y adelantó a los suyos para redondear así una gran actuación individual.
Con el Schalke más cerrado y defendiendo su ventaja llegaron más llegadas del Eintracht evidenciando los problemas defensivos del conjunto minero. Los de Armin Veh estaban ya volcados y el Schalke gozaba de contras peligrosas. Abraham tuvo que frenar con falta el dos contra uno que dirigía Di Santo.
Con Höwedes ya sobre el campo comenzó un nuevo recital de Ralf Fährmann. Aigner, Stendera y hasta el propio Meier intentaron en numerosas ocasiones batirle pero al igual que ante el Stuttgart, el portero del Schalke lo paró todo. Con los puños, con las manos hasta con la cara, lo único que le importó fue mantener su portería a cero y lo logró. Entonces apareció Sané para volver a hacer de las suyas. Goretzka peinaba un balón en campo rival y Sané superaba la salida de Hradecky, regateaba a Ignjovski después y volvía a sentar al guardameta para sentenciar el partido. 2-0 final y el Schalke 04 supera al Wolfsburgo para ponerse tercero.