Vértigo, ocasiones, y todo tipo de emociones. En un encuentro que llegó a completar 33 remates divididos entre los dos equipos, los aficionados, que ciertamente fueron pocos con relación a lo esperado, salieron más que conformes con el espectáculo dado. Y es que el partido nunca perdió ritmo, intensidad, y demostró el salto de calidad que viene dando la Major League Soccer.

Depresión estirada

Si se esperaba que el Toronto FC, con el rótulo de los últimos campeones de la Copa MLS, despertase en algún momento, era hoy el día. El rival llegaba en la previa de la temporada con el cartel de ser el posiblemente peor equipo de la Major League Soccer, y sin embargo el resultado fue totalmente otro.

Desde el liderazgo en la portería del veterano Tim Howard, la calidad del centrocampista británico Jack Price, quien de hecho abrió la cuenta y demostró ser una buen adquisición para el equipo de Denver, además del buen planteamiento táctico de Anthony Hudson, los locales consiguieron hacerse con unos importantes tres puntos.

Por su parte, los canadienses hicieron todos los esfuerzos por sacar un buen resultado. A pesar de las bajas, no hicieron un mal encuentro. Y las estadisticas dictan que tuvieron más tanto la posesión del balón como las ocasiones de gol, sin embargo no tuvieron éxito y sumaron su tercera derrota en cuatro partidos disputados por el torneo doméstico.

Golpes justos

Si algo duele de manera especial en el fútbol, es recibir goles tempraneros. Esta vez lo sufrió Toronto. Y es que cuando recién se asentaban los equipos en el campo, un rebote que encontró el inglés Price en las afueras del área terminó en un clínico remate pegado a un poste del arco de Irwin para abrir el marcador con el 1:0. "Vi un espacio y simplemente pensé 'voy a pegarle'", manifestó el volante, que había pasado la mayor parte de su carrera en las ligas de ascenso de su país antes de llegar a la Major League Soccer. Apenas habían pasado dos minutos de juego entonces.

El mismo Colorado Rapids tuvo la oportunidad de aumentar el marcador cuando Badji, tras un pase largo en profundidad de Blomberg le encontró de cara a portería, pero el senegalés envió su remate muy elevado. El mismo Badji tuvo una chance más tras una gran jugada individual que terminó en un disparo de zurda, pero Irwin le negó la posibilidad de que el segundo llegase.

Badji, siempre desequilibrante | @ColoradoRapids

Badji, siempre desequilibrante | @ColoradoRapids

No obstante, aún con las bajas de sus jugadores de más calidad, Toronto también se las apañó para llegar a la portería rival en más de una oportunidad, sin embargo Howard demostró toda su categoría marcándose hasta 4 atajadas para dejar su arco en cero.

Y si Badji, por el lado de los Rapids, había tenido mala suerte de cara a puerta a lo largo del partido, encontró una especie de revancha en las postrimerías del encuentro, cuando una arremetida suya terminó en un empujón de Fraser que el árbitro sancionó con un penalti. Gashi, que había ingresado en la segunda mitad, no fallaría, y marcaría el 2:0 a los 78 minutos del encuentro. 

Habrían un par de intentos más de parte del equipo canadiense por encontrar el descuento, pero nuevamente Howard demostró su jerarquía y el marcador no se movería más. Así finalizaría el encuentro.

Lo que les aguarda

Mientras que los Colorado Rapids ahora visitarán a un Real Salt Lake que viene de caer humillado ante el New York City por 4:0; los de Toronto recibirán a las Chivas de Guadalajara por la ConcaChampions, ya con todas sus figuras, esperando lavarse la cara después del mal momento que vienen atravesando.