Cada día queda demostrado que no se entiendo a Los Angeles Galaxy sin Ibrahimovic. El delantero fue el protagonista de la victoria de a equipo con un gol y una asistencia, en un partido donde apenas apareció. Desde el inicio de la primera mitad, el equipo de los ‘Wizards’ fue el mejor plantado sobre el terreno de juego, teniendo el control de la pelota y las mejores ocasiones, pero no lograron convertir este dominio en goles. La segunda mitad inició con los locales llevando la iniciativa, pero en un despiste los angelinos lograron adelantarse en el marcador. Pero toca búsqueda del gol en la segunda mitad se quedó en nada cuando en los minutos finales, Ibrahimovic remató un contraataque que daba nuevamente la victoria a su equipo.
Muchas ocasiones sin goles
Primeros minutos de respeto entre ambos equipos, conocedores del potencial del otro en el ataque, que llevaron a ver pocas incursiones sobre las áreas hasta bien avanzada la primera mitad. Los compases iniciales fueron de tanteo en el centro del campo, aunque se consiguió ver algún acercamiento a balón parado por parte de los locales.
Esto fue un mero espejismo, ya que el peso de los minutos iniciales recayó en los centrocampista. Fueron estos los que entraron en mayor contacto con la pelota, sobre todo por parte del equipo local, tratando de mantener su juego de elaboración y continua circulación.
Conforme el partido fue entrando en su ecuador, Sporting Kansas City logró tener una mayor presencia en el ataque, llevándole a generar dos ocasiones claras de peligro con las que estuvo cerca de decantar el marcador en su favor. Dos disparos desde fuera del área que sorprendieron a la defensa californiana y que se marcharon fuera a pocos centímetros del palo.
Estos avisos terminaron por dar el balón a los locales que consiguieron encerrar a su rival en campo propio y dejarle sin apenas presencia en el ataque. Tanto fue así que la primera ocasión de los visitantes llegó mediada la primera mitad, en un saque de esquina que Melia tuvo que salvar con una parada llena de reflejos.
Desde ese momento, el partido se abrió por completo y ambos equipos tuvieron su cuota de protagonismo con el balón y generaron alguna que otra ocasión de peligro. A pesar de este nuevo planteamiento, los locales fueron los que mejores ocasiones tuvieron, pero no lograron tener el acierto de la pasada semana. Muchas fueron las llegadas, sobre todo gracias a la movilidad de Coizet, pero el francés no fue capaz de definir con éxito.
Sin embargo, el final de la primera mitad llegó y la igualdad vista sobre el terreno de juego quedó reflejada en el marcador con este empate provisional y con todo por decidirse en la segunda mitad.
Aparece el rey del gol
Con el inicio de la segunda mitad fue para el equipo local, que continuó haciendo valer su posición de equipo local y tuvo durante los primeros minutos el control del juego y alguna acción aislada de gol.
Pero fueron Los Angeles Galaxy los que en la primera llegada que tuvieron en la segunda mitad, dieron un golpe encima de la mesa al adelantarse en el marcador. Los californianos se aprovecharon de la línea tan adelantada de los ‘Wizards’ para colocar un balón en la cabeza de Ibrahimovic. El delantero sueco vio libre de marca a Favio Álvarez para asistirle y que este adelantase a su equipo en el marcador.
Este gol obligó a los locales a tener que adelantar sus líneas aún más y presionar a su rival en busca de un gol que les permitiese tener aún opciones de llevarse los tres puntos. Durante algunos minutos consiguió su objetivo, pero pronto su rival, encontró los espacios para salir a la contra y responder a este dominio.
El partido estaba en manos de Sporting Kansas City. El conjunto local era el claro dueño de la pelota y constantemente buscó generar peligro sobre la portería californiana. Ante este dominio y la poca peligrosidad en sus acciones, el entrenador local decidió introducir varios cambios en el equipo con los que darle un punto más en el ataque.
Pero una vez más y como ocurriese en los primeros minutos, con os locales volcados al ataque, su rival recuperó un balón y armó un contraataque con el que consiguió anotar un gol que dio el partido prácticamente por cerrado. Uriel Antuna recibió el balón en velocidad y tras llegar a las inmediaciones del área colocó un centro al área donde Ibrahimovic apareció para bajar el balón y anotar un nuevo gol tras su vuelta.
Este tanto terminó por declinar el resultado a favor de los visitantes y a pesar de intentarlo