Juventus llamó a Sarri luego de su estancia en el fútbol inglés, provocando la indignación en Napoli y cierta perplejidad en Turín, puesto que el técnico criticó con dureza a menudo a la ‘Vecchia Signora’.

Por una neumonía desde hace semanas, Sarri no pudo asistir al primer partido de su equipo el sábado pasado en Parma (victoria 1-0) y esta vez espera va poder sentarse en el banco, lo que todavía no está asegurado. 

En Nápoles, la moral estaba alta y Carlo Ancelotti recibió el refuerzo del mexicano Hirving 'Chucky' Lozano. Pero es en defensa donde tienen que trabajar, como demostraron los tres goles encajados en la primera jornada contra la Fiorentina (4-3).

Este era el panorama para el apasionante duelo entre el norte y sur de Italia.

Espectáculo en Turín. El conjunto bianconero dio un golpe sobre la mesa y logró la victoria por 4-3 frente al Nápoles en un duelo de candidatos al Scudetto. Y fue un partido de alto voltaje que no dejó indiferente a nadie.

El partido empezó por todo lo alto. Con constantes acciones de peligro por una y otra parte. Cristiano Ronaldo avisaría primero. El luso conectaría un balón filtrado y dispararía con fuerza para que Meret despejara de puños. Empezaron con problemas los de Nápoles y apenas conseguían llegar con peligro a la portería de Szczensy, mientras que la Juve dominaba el partido. Sin embargo, Allan advertiría al portero del equipo de Turín para que al cabo de pocos minutos fuese la Juventus quien haría el primero del partido. Y sería el ex madridista Danilo. Gran salida en contraataque de Douglas Costa que acabaría con el lateral brasileño empujando el balón a placer. Tres minutos después, Gonzalo Higuaín, de nuevo un ex jugador blanco, ampliaría el marcador con el segundo tanto. Un bello gol, digno de un delantero con clase. Giro en una baldosa y definición con potencia.

Cristiano con ansias de ser el goleador en solitario de Serie A

No había forma de que el Nápoles entrara en el partido. Cristiano Ronaldo gustándose. Sami Khedira, con todo. Las viejas estrellas de aquel, no tan lejano, Real Madrid de Mourinho convirtiendo el Juventus Stadium en una pesadilla para el Nápoles.

Respuesta de campeón

Tras el descanso llegó el debut de Hirving Lozano. Y también un  planteamiento de Carlo Ancelotti muy atrevido y valiente. Y salió en tromba. Mertens tendría dos ocasiones para reducir la diferencia en el marcador pero Szczesny respondió a todo. Mejoró el Nápoles hasta que Ronaldo quisó. Otra gran acción individual de Costa dejó completamente solo al luso dentro del área que definió sin problemas al poste izquierdo. Era el 3-0 y goleada bianconeri

Con el parcial en el marcador, locura en Turín. En dos minutos el Napolés recortaría distancias y se colocaría a solo un gol de los de Sarri. Con goles de Manolas, con un remate de cabeza tras centro de Mario Rui, e Hirving Lozano batiendo al portero con un disparo raso. Tras el susto los nervios de la Juventus empezaron a hacerse visibles. Ya a diez minutos para el final, Giovanni Di Lorenzo haría el empate a tres en un tiro libre y remontarían así un encuentro que lo tenían perdido por tres goles de diferencia. Quedaban solo nueve minutos y el agregado para el final.

Mala suerte

Pero no acabaría así. Un libre directo y la mala suerte - o la suerte del campeón - dejaron a un Nápoles sin la recompensa de los dos puntos del empate. Miralem Pjanic pondría un balón perfecto al área para que Kalidou Koulibaly en propia meta hiciese el 4-3 final. 

Paulo Dybala, a falta de un cuarto de hora, reemplazó a un Pipita Higuaín que aplicó la ley del ex y se retiró del campo ovacionado por la hinchada de la Juventus.

La segunda jornada de la liga italiana dejó en lo más alto de la tabla a la Juventus, que se sacó un escollo difícil de encima y obtuvo un triunfo que puede ser vital a lo largo de la temporada. Nápoles, que venía de celebrar un 4-3 a domicilio ante la Fiorentina, esta vez cayó por el mismo tanteador.