Toronto FC vuelve a unas semifinales de conferencia tras superar a un DC United que estuvo a remolque durante todo el encuentro, pero que se encontró con un gol en los minutos finales con el que forzó la prórroga. Durante los primeros 45 minutos, fueron los locales los que mostraron una mayor superioridad en el control de la pelota y la dirección del juego, aunque sólo tuvo una ocasión de generar peligro, y esa acabó en gol. En la segunda mitad los visitantes incrementaron la intensidad de se juego, convirtiendo así el partido en un ir y venir de una portería a otra, con constantes ocasiones de gol, pero poco acierto hasta los minutos finales, cuando los visitantes lograron el empate. Sin embargo, esta esperanza apenas duró unos minutos, ya que, en la primera parte del tiempo de prolongación, los canadienses anotaron cuatro goles que les dio el pase definitivo.
Máxima efectividad canadiense
Desde que comenzó a rodar la pelota quedó claro que Toronto FC era el equipo que quería la eliminatoria y si podía cerrarla lo antes posible, mejor. Los primeros minutos fueron para el equipo canadiense, que puso sobre el terreno de juego un equipo focalizado en el control de la pelota y eso le concedió una mayor presencia en el ataque, aunque apenas generó ocasiones de gol.
Ante esta circunstancia, los visitantes comenzaron a tener un mayor protagonismo con la pelota, imprimiéndole velocidad en sus acciones y consiguiendo completar así varios acercamientos sobre la portería canadiense. Sin embargo, ya fuese por los nervios o por las prisas de querer adelantarse en el marcador, cometieron errores en el último pase o malas definiciones que finalizaron en disparos muy fáciles de detener para el portero.
Conforme fueron transcurriendo los minutos, el conjunto local le imprimió a su juego una mayor intensidad, tratando así de dar un golpe encima de la mesa y tomar ventaja, adelantándose en el marcador. Tuvieron que superar la media hora hasta que, con un poco de suerte, anotasen el gol que les ponía en ventaja. Pozuelo consiguió hacerse con un hueco en la frontal del área y disparó a puerta. El guardameta rechazó la pelota, pero el rechace llegó a Delgado que, adelantándose a su marcador, sólo tuvo que empujarlo al fondo de las mallas.
Este tanto obligó a DC United a dar un paso adelante, sino quería que su rival tuviese el su favor el resultado y el control de la pelota. Durante los siguientes minutos lograron su objetivo de jugar en campo rival, pero continuar sin poner en riesgo el resultado favorable de los locales.
En los últimos minutos, tratando de no llevarse la sorpresa de un gol en contra, los canadienses volvieron hacerse con el control de la misma y buscando el transcurso de los minutos y si fuese posible, un segundo tanto que les terminase por dar una ventaja definitiva.
Hasta el rabo, todo es toro
El inicio de la segunda mitad fue una locura de encuentro en el que pudo pasar de todo. Ambos equipos volcados al ataque, veloces transiciones, poco control de la pelota, llegadas constantes en ambas porterías, hicieron que se viesen unos primeros minutos vibrantes, aunque ninguno logró finalizar estas acciones en ocasiones de gol.
No fue hasta llegada la hora de partido cuando los canadienses fueron los primeros en avisar durante esta vorágine anotadora. Endoh, que estaba muy activo en el ataque, recibió un balón de espaldas a la portería y tras lograr darse la vuelta disparó a puerta, obligando al portero a estirarse para sacarlo de la línea de gol. Esta ocasión tuvo una respuesta en el conjunto visitante de la mano de Rooney que, en un mano a mano con el portero, este le sacó el disparo.
Esta ocasión terminó por dinamitar un partido en el que todo podía pasar. Las llegadas a portería eran constantes y la posibilidad de que ocurriese cualquier cosa, estaba en el ambiente. Ante este desarrollo, los entrenadores trataron de cambiar algunas piezas que les permitiese tener un mayor acierto de cara a portería, pero ninguno fue capaz de lograrlo. La ocasión más clara fue un mano a mano de Kamara en el que con todo de cara, disparó a los pies del portero, consiguiendo este salvar el resultado.
Con el paso de los minutos, DC United tenía cada vez más negra la posibilidad de clasificar para las semifinales de conferencia. Esto les obligó a dar un paso adelante, hacerse con el control de la pelota y buscar un gol que les diese oportunidades. Para ello, Rooney retrasó su posición unos metros para tener una mayor influencia en el juego y lograr un desequilibrio en el centro del campo. A pesar de ello no fueron capaces de poner en riesgo la meta defendida por Westberg, dándole alas a su rival y facilitándole el pase a la siguiente ronda.
Toronto FC llegó así al final del encuentro. La cercanía de la victoria hizo que no permitiesen a su rival tener control de la pelota y con constantes llegadas, buscar el gol de la tranquilidad. Sin embargo, este no llegó, pero sí la sorpresa en su contra. En la última acción del partido, Lucas Rodríguez recibió en el segundo palo un saque de esquina y mandando el balón al fondo de la red, llevó la eliminatoria a la prórroga.
15 minutos fueron suficientes
El conjunto local sólo necesitó de la primera parte de la prórroga para colocar un doloroso marcador para su rival que les daba el paso a las semifinales. En los primeros minutos, primero Laryea y después Osorio, se aprovecharon de dos faltas de concentración de la defensa canadiense y anotaron dos goles que colocaban un marcador muy en su favor. Una distancia que parecía insalvable para un conjunto visitante que se vio claramente superado. A pesar de ellos, durante los siguientes minutos trataron de superar el control de su rival y llegar a la portería de estos con acciones a la contra, pero no lograron superar la última línea de presión.
En los minutos finales, dos nuevos despistes terminaron por castigar a un DC United que dio por perdida la eliminatoria. Con la defensa prácticamente rendida, Pozuelo colocó un centro en la frontal del área donde apareció Osorio libre de marca para de volea, anotase el cuarto tanto. Y sin tiempo para respirar, en la siguiente jugada, fue el futbolista canadiense el que asistió a DeLeon para que anotase el quinto y definitivo gol.
La con el inicio de la segunda mitad de la prórroga, se dio una imagen histórica en la competición. Una estrella como Wayne Rooney se retiraba del campo sustituido, en su último partido en la MLS, sin una despedida acorde al buen nivel ofrecido en estos años.
En lo futbolísticamente hablando, el encuentro no tuvo mayor historia. Con los visitantes totalmente rendidos, las ocasiones de los canadienses fueron constantes y no acabaron en gol gracias a la buena actuación de Hamid que consiguió salvar la honra de su equipo y llegar al final, con una goleada que ya de por si fue exagerada. Con la victoria, Toronto FC lograba su clasificación a la semifinal de la MLS Cup PlayOff’s, en los que se enfrentará a NYCFC.