Uno de los equipos y entrenadores del momento. El Arsenal de Mikel Arteta camina como líder indiscutible de la Premier League desde que prácticamente empezase el torneo. 

Con el ecuador de la temporada ya alcanzado, es hora de hacer balance del estado de la competición y, en clave artillera, además de volver a ver al lado rojo de Londres liderar la tabla, testigos de un Arsenal que, a día de hoy, ya pasará a la historia.

  • El mejor inicio en 137 años

Ningún otro Arsenal desde que la entidad se fundase en 1886 había logrado una marcha de este calibre en los primeros 19 partidos de torneo: 50 puntos de 56 posibles repartidos en 16 victorias, 2 empates y 1 única derrota.

Para situarlo en un contexto se puede poner como ejemplo a otro de los grandes conjuntos históricos, sino el que más, en la comparativa: “Los Invencibles” de la 2003/04

Pese a que aquel mítico equipo de Wenger no cosechó derrota alguna, con el reconocimiento que ello conlleva, a nivel íntegramente de puntos, este equipo de leyenda se queda atrás respecto a lo logrado por Mikel

Pero sus logros no se quedan en un extracto local. Desde una perspectiva más global, Arteta ha firmado el 5º mejor inicio de la historia de la Premier League

Sólo cuatro equipos habían logrado alcanzar el medio centenar de puntos en apenas 19 jornadas, y tres de ellos acabaron saliendo campeones, por lo que parece un buen preludio.

  • Arteta para creer en el proceso 

Trust the process ha sido el lema que ha ido acompañando la carrera de Arteta en el Arsenal desde que cogiese los mandos del club en diciembre de 2019. Nada y poco tiene que ver el club que se encontró al llegar con el actual tras 4 años de proceso.

Desde la política de fichajes, pasando por la gestión del vestuario hasta la concepción que debía tener la directiva de la propia entidad, han ido cambiando según su idiosincrasia iba permeando en el club. Gracias al apoyo de Josh Kroenke, hijo del magnate Stan Kroenke, propietario del club, Mikel ha tenido poder y confianza para transmutar radicalmente la manera de funcionar de la entidad a nivel deportivo.

En cuanto a la directiva, Mikel sólo quería estar rodeado de personas comprometidas con la entidad, tanto dentro como fuera del campo. No debían repetirse los casos de Raúl Sanllehí, anterior director deportivo, que llegó a cobrar comisiones por algunas de las operaciones de fichajes del club, o Kia Joorabchian, super agente que tenía mano directa dentro de la directiva.

Arteta, la pieza en torno a la que gira la evolución / Foto: @Arsenal
Arteta, la pieza en torno a la que gira la evolución / Foto: @Arsenal

El siguiente paso fue cambiar la plantilla. Mikel tenía claro qué tipo de camino debía seguir si quería un grupo unido con el que poder trabajar en torno a una idea. Lo primero fue deshacerse de los jugadores que, a priori, parecían intocables. 

Jugadores con grandes sueldos y que estaban, según su criterio, erosionando la dinámica del vestuario. Casos como el de Özil, Aubameyang, Sokratis, Kolašinac, Mustafi o Guendouzi fueron muy sonados al comienzo de tu etapa. 

Lo cierto es que el vasco acabó teniendo razón. Su objetivo siempre fue traer jugadores que él consideraba aptos para la causa, tanto en lo personal como en lo futbolístico, mientras se deshacía de aquella vieja guardia que ya no tenía cabida en este "nuevo mundo". 

La política de fichajes como bandera: Ben White, Martin Ødegaard, Aaron Ramsdale, Takehiro Tomiyasu, Gabriel Magalhães... Todos futbolistas jóvenes. Chicos que gracias a Mikel han tenido una oportunidad nueva en sus carreras y que confían al unísono en el proceso del español. Todo enfocado a una sola meta: crecer, madurar y tras eso, ganar juntos. Este proceso es colectivo.

Martin Ødegaard, el abanderado y capitán de este nuevo Arsenal / Foto: @Arsenal
Martin Ødegaard, el abanderado y capitán de este nuevo Arsenal / Foto: @Arsenal

Sin entrar en guerras de precios, sin jugadores sobrepagados en plantilla, sin deberle favores a nadie... Es decir, una política muy marcada en lo deportivo y con criterios económicos muy ligados a la nueva idiosincrasia. La mezcla perfecta: "Todos sabemos a dónde vamos, por qué motivo y cómo queremos llegar".

  • Los frutos del trabajo 

Ahora, con el equipo puntero y con una entidad donde cada integrante rema en una misma dirección, es inevitable sacar una sonrisa de satisfacción viendo el duro camino que se ha vivido estos últimos cuatro años. 

Sin embargo, no deja de ser cierto que, pese al buen hacer del proyecto, esta temporada está siendo especialmente atípica, incluso para los que eran más optimistas. Y este hecho se evidencia más, si cabe, si se compara con los que son, en principio, sus grandes rivales.

Porque el Arsenal ha hecho lo que hace un año parecía impensable, dominar a los grandes.

Con triunfos ante United, Chelsea, Tottenham por partida doble y Liverpool, los gunners se han convertido en la pesadilla de sus competidores. Es el club que mejor estadísticas acumula en enfrentamientos directos entre equipos del Big Sixsumando por victorias todos los duelos, a excepción de la derrota en Old Trafford (la única de esta temporada).

A día de hoy, los dos partidos que restan contra el Manchester City, su principal perseguidor y gran rival a batir, se presentan claves en el destino del título.

  • Los favoritos al título 

Pese a que sea un calificativo que añade presión más que otra cosa, la realidad es innegable. Tras 20 años, el Arsenal está en la mejor posición posible para devolver el trofeo a Highbury y que esta, de forma simbólica, sea la campanada de inicio a una nueva era de prosperidad y gloria como las de antaño. Y sus medidas para intentar afianzar la segunda parte de la temporada no se han hecho esperar. 

Tras el fracaso del fichaje de Mudryk, los artilleros no han tardado en anunciar sus dos primeros fichajes invernales: Leandro Trossard y Jakub Kiwior. 

Leandro viene en contestación a la marcha del ucraniano al Chelsea. Tras saberse que el belga quería salir del Brighton tras un desencuentro con el entrenador de los Seagulls, Roberto De Zerbi, Mikel no dudó en convertirle en un objetivo que sumar a la causa.

Era bien sabido que la plantilla necesitaba refuerzos en ataque, el propio técnico admitió que era la zona del campo donde menos opciones tenían tras la importantísima baja de Gabriel Jesus y parece que Leandro completará, junto a Saka, Martinelli, el propio Gabriel, Nketiah y Emile Smith-Rowe el grueso ofensivo del equipo.

Su traspaso se acabó cerrando por £27m, así que, además de llegar como una gran oportunidad de mercado, da pie a que el Arsenal pueda seguir activo en lo que resta de enero. 

Y así ha sido. El mismo día que se anunciaba el aterrizaje del belga, los grandes informadores del mercado dieron por cerrada la llegada del central polaco Jakub Kiwior a Londres procedente del Spezia italiano. Este mismo lunes la cuenta oficial del Arsenal anunciaba el segundo fichaje en menos de una semana. Jakub ya es nuevo futbolista gunner por £22m.

Puede que lleguen nuevos refuerzos, o puede que decidan lanzarse así a una segunda temporada que se antoja histórica. Lo que es seguro es que Arteta tiene al frente el primer gran título de su carrera y la oportunidad de devolver al Emirates, ya no sólo el fútbol de Champions League, sino una gloria que al norte del río Támesis se tenía tiempo ha perdida