El Signal Iduna Park siempre brilla de excitación cada vez que el Borussia Dortmund sale a la cancha. Y es el doble de emocionante cuando se trata de un partido de Champions League. Los 81,360 espectadores aurinegros no cesaban de cantar alentando a su equipo, el cual atraviesa una de las peores crisis de su historia. Imposible de creer, la suerte del campeón de la Champions League 1996-97 pendía de un hilo: un empate y ya decían adiós a la máxima competición continental, con esperanzas de entrar a la Europa League. Por otra parte, agazapados en un rincón, los del Tottenham soñaban con la clasificación de los “Spurs” a los octavos de final de la Champions League tras casi siete años. Todo prometía otra mágica noche europea, esas que quedan en la memoria de los aficionados del fútbol por mucho tiempo. Y así lo sería.
El retorno del Dortmund de antaño
Desde el arranque del partido el Tottenham decidió pisar fuerte en tierras germanas, apoderándose del balón y efectuando, de la mano del delantero Harry Kane, el primer ataque del partido. El Dortmund respondió por vía aérea, con un córner que generó peligro en el área visitante, antes de terminar en las manos del portero del conjunto inglés, Hugo Lloris. Los primeros minutos del encuentro fueron de emoción: ambos equipos buscaban golpear temprano al rival y poder ponerse por encima en el marcador. Sin embargo, ninguno de los dos pudo hacerlo.
Pasado el cuarto de hora, los locales se hicieron fuertes. El delantero ucraniano Andriy Yarmolenko remató de fuera del área, pero el balón no llegó a su objetivo. El Dortmund empezó a dominar el balón y el ritmo de juego. Dos ataques de Pierre-Emerick Aubameyang estuvieron cerca de acabar en el fondo de la red visitante: el primero, un centro desde la derecha de Yarmolenko, fue despejado por el central belga del Tottenham Jan Vertonghen y el segundo, la oportunidad más clara, fue un mano a mano entre el gabonés y Lloris, que se fue desviado por poco. Dos minutos más tarde, el capitán Marcel Schmelzer intentaría romper la igualdad tras un remate de cabeza que se fue desviado. A pesar de la respuesta del Tottenham, de la mano de Heung-Min Son, el Dortmund no cesó de atacar hasta que llego a su objetivo. La figura del equipo, Aubameyang, recibió un magnífico pase de tacón de Yarmolenko y definió ante Lloris con gran calidad, para deleite y alegría de los aficionados locales. El mismo Dortmund que venía de una mala racha en la Bundesliga le estaba ganando 1-0 al Tottenham y volvía a la pelea por seguir vivo en la Champions.
Los “Spurs” reaccionaron inmediatamente al cachetazo de Aubameyang: el danés Christian Eriksen puso a prueba los reflejos de Bürki en dos ocasiones claras para los londinenses. Sin embargo, no habría tiempo para más y el árbitro Clement Turpin enviaría a ambos equipos a los vestuarios para el descanso.
La resurrección del Tottenham
La segunda mitad del encuentro se volcó a la merced del conjunto visitante. A los cuatro minutos del complemento, Harry Kane recibió el balón en la puerta del área y remató a portería. Bürki no llegaría a desviar esa pelota y el Tottenham empataba el partido.
Animado por el gol, los londinenses redoblaron los esfuerzos de ataque frente a un golpeado Dortmund, que perdió la moral y la confianza. Primero Dele Alli y luego Kane, ambos remates se fueron cerca del arco local. A pesar de que Peter Bosz efectuó varios cambios de jugadores y en esquemas, los germanos le cedieron el control del partido al Totteham, que aprovechó los errores defensivos de los aurinegros. A los 75 minutos, la presión de los “Spurs” sería demasiado para la defensa del Dortmund: Son recibió un balón muy similar al de Kane minutos antes y sacó un disparo hacia la escuadra del arco. Bürki, visiblemente vencido, no pudo hacer nada. El Tottenham daba vuelta el partido y se aseguraba un puesto entre los mejores 16 equipos de Europa.
Eriksen tuvo una última chance para poner al Tottenham ya fuera del alcance del Dortmund, pero no logró concretarla. El Borussia, sin respuesta, disputó con poca intensidad los últimos minutos del partido.
Fue una buena victoria del Tottenham que acentúa la crisis del Dortmund de Bosz. Tocará pasar página, esperar al derbi ante el Schalke 04 del sábado y conseguir un buen resultado en la última jornada para entrar a la Europa League.