Después de siete partidos sin conocer la victoria y con tan sólo tres triunfos en lo que va de temporada, el Bilbao Athletic se verá las caras este domingo ante el Albacete en San Mamés. Los pupilos de Ziganda deben demostrar de una vez por todas que merecen estar en Segunda y para luchar por mantenerse un curso más en dicha categoría, deben comenzar a sumar de tres en tres y abandonar la última posición de la tabla clasificatoria. 

El conjunto rojiblanco, que la pasada jornada de nuevo cosecho una derrota, en aquella ocasión ante el Alavés por 3-0, cuenta con apenas 15 puntos de los 57 posibles hasta la fecha. Pese a que los cachorros ponen todo de su parte y dejan buenas sensaciones partido a partido, en los resultados no termina de reflejarse la calidad del equipo, por lo que deberán dar más de sí mismos, si no quieres regresar a Segunda B al término de la presente campaña. 

El Albacete, por su parte, tampoco llega sobrado en demasía. Ni mucho menos. El conjunto manchego ocupa el puesto número 19 de la tabla, con 20 puntos, apenas 5 más que el Bilbao Athletic, pese a que suma tres triunfos consecutivos. El cuadro que dirige Luís César Sampedro aterrizará en La Catedral con el mismo objetivo que el de los leones, abandonas la zona de descenso lo antes posible, aunque para los manchegos, dicha tarea es algo más sencilla. 

Método de juego definido

Pese a que los resultados no acompañan como debieran, el Albacete Balompié posee un estilo de juego con mucha personalidad propia, donde el equipo al completo se hace participe de todas las jugadas que transcurren sobre el terreno de juego, sea quien sea el rival. Para Sampedro, es importante inculcar a sus pupilos que eviten rifar balones y que se juegue más en corto, con más toque de balón, con el objetivo de agotar al rival y de esta manera, aprovechar los espacios para dar la sorpresa en la portería contraria. Pero pese a contar con este estilo tan propio, su efectividad no siempre es la deseada. Y prueba de ello, son los pobres resultados que está acumulando el equipo a lo largo de este curso. Desde que la competición liguera echara a rodar el pasado mes de agosto y pese a dar inicio a la Liga con buen pie, el cuadro manchego ha sumado 5 victorias, 4 empates y 8 derrotas, por lo que llega a San Mamés con la necesidad de puntuar y abandonar la zona roja de la clasificación.

La anterior campaña, a pesar del buen fútbol, los resultados tampoco acompañaban a un Albacete que lo intentaba de todas las maneras. Un año más tarde y con un equipo más experimentado en la categoría, la historia parece repetirse llegados a estas alturas de la competición. Es cierto que los jugadores se conocen mucho mejor, juegan de memoria y eso ayudó mucho en los primeros compases de la Liga, pero hoy por hoy, el Albacete parece andar un poco perdido. 

Se mantiene el bloque que logró la permanencia

Con el mismo grupo que logró la permanencia una campaña más en la Liga Adelante, el Albacete tan sólo sufrió algunas salidas de peso, que solventó de la mejor manera, con el fichaje de diversos futbolistas que mejoraron aún más el bloque, si cabe. Si examinamos al equipo por posiciones, podemos advertir algunas diferencias. Para empezar, en la portería no está siendo el mejor año de los manchegos. Varias lesiones de sus porteros titulares, Dorronsoro y Juán Carlos, obligaron a poco de dar inicio a la Liga, a que los porteros de categorías inferiores tuvieran que asumir la responsabilidad bajo palos. Por ello, el cuadro albaceteño incluyó en sus filas a Dani Mallo, cancerbero que se encontraba sin equipo y a quien decidieron incorporar, con éxito además, en vistas de las lesiones de sus dos porteros principales, no obstante, su contrato fue era sólo temporal y su fecha de conclusión se dispuso para finales del recién finalizado mes de diciembre.

En el centro del campo, Sampedro tiene claro quién nunca debe fallar. El rol tanto de Edu Ramos, como de Portu, es algo imprescindible para el conjunto blanco. Ambos jugadores éstán en buen estado de forma y en su caso, Cristián Portugués, conocido como Portu suele ser casi siempre garantía de gol. De hecho, el murciano suma una buena cifra de dianas en esta campaña. A ellos se suma uno de los recién llegados en el pasado mercado estival, Santi Jara prodecente del Sporting, que de todos los fichajes incorporados en verano, es el que más protagonismo y rendimiento está ofreciendo hasta la fecha, Por su parte, Jason del Levante y Adrià Carmona, procedente del Espanyol B, que también fueron incluidos en la plantilla para este curso, han adquirido un rol un tanto más inadvertido, debido también a que ambos cayeron lesionados y han necesitado readaptarse al equipo.

En zona de ataque, el Albacete mantiene a sus dos bazas por excelencia: Rubén Cruz y César Díaz, que ya destacaran la anterior temporada. A ellos, se añade para este curso la calidad del hispano-hondureño Jona, que ya dio grandes resultados en su paso tanto por el Jaén, como por el Cádiz. Era una de las grandes expectativas a principios de competición y poco a poco ha sabido amoldarse al estilo de juego del Albacete, para suponer una baza más a disposición de Sampedro

A tener en cuenta

Santi Jara: Destaca por su habilidad para desbordar por la banda derecha, tanto hacia afuera para sacar el cetro del campo, como realizar una diagonal hacía la portería contraria. A ellos se suma que es un gran llegador, con mucho olfato de gol, buena conducción de balón, recuperación, y llegada al área rival desde segunda línea. Estas son alguna de la cualidades que presenta el mediocampista de Almansa, recién incorporado al club en el pasado mercado estival. 

Cristián Portugués ‘Portu‘: El manchego destaca por poseer una gran habilidad a la hora de mover el esférico y de crear espacios con él en sus pies. Tiene fuerza, potencia, creatividad de juego y un buen nivel físico. 

César Díaz: El canterazo del Albacete destaca por su habilidad para desmarcarse por detrás de sus rivales, ganandoles la espalda valiendose de su fuerza. No es un jugador que destaque por su velocidad, pero si luchador y con buena técnica, que de igual manera, asiste y golea. 

Rubén Cruz: Pieza clave en el sufrido ascenso del equipo hace dos temporadas, el jugador de Utrera destaca por su velocidad, su habilidad para moverse más rápido que sus rivales, e incluso que sus propios compañeros, es un ‘killer’ en toda regla. Sinónimo de gol, el futbolista blanco es una pesadilla para cualquier oponente.

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