Dicen que el fútbol es un deporte de dinámicas. Da igual los méritos que hagas, lo cerca que estés de lograr los objetivos, siempre estás expuesto a sumergirte en una mala racha y que todo cuanto hayas hecho pase a ponerse en duda. Pues el fútbol, por más que nos pese, son resultados, y lo que ayer era de alabar, hoy puede ser un problema. El Murcia atraviesa una mala racha, la peor de la temporada, y no le será fácil salir de ella. Ante el Cartagena volvió a competir a su nivel y tuvo ocasiones para cuajar mejor resultado, pero acabó perdiendo, alargando así una racha que tiene una única solución: ganar. Granada.

De tú a tú

El choque arrancó fiel a lo que cabía esperar. La tensión se apoderó de las piernas de los 22 hombres sobre el campo, y por extensión del partido. Ambos equipos saltaron firmes, tratando de guardar la ropa en un partido que se presumía largo, y con el único plan ofensivo de presionar la salida rival y robar para atacar rápido. Dentro de la igualdad anduvo más cómodo el Murcia, que supo cortocircuitar la creación albinegra desde atrás y llegar a posiciones de remate, pero sin dar con el último pase.

El Murcia concedió excesivos balones parados al Cartagena y acabó pagándolo 

Con el transcurrir de los minutos, el Cartagena fue encontrando el modo de desembarazarse de la pegajosa presión y empezar a percutir sobre la meta de Fernando. Casi siempre gracias a centros laterales, que permitieron a los albinegros gozar de numerosos saques de esquina. Finalmente, en el 25 y a la enésima intentona, Menudo puso el cuero al segundo palo, Fernando dudó en la salida y el ovetense Chus Hevia lo coló en el fondo de las mallas. Mazazo para el Real Murcia, empequeñecido durante esos instantes por la crecida cartaginesa.

Chavero igualó de penalti | Imagen: Vicente Vicéns y JM Rodríguez (La Verdad)
Chavero igualó de penalti | Imagen: Vicente Vicéns y JM Rodríguez (La Verdad)

Para alegría visitante, el golpe anímico dudaría poco. Menos de tres minutos. El tiempo que tardó Carlos Álvarez en meterse en el área y tropezar con Ayoze, provocando un riguroso penalti en favor de los granas. A Chavero no le tembló el pulso y transformó la pena con seguridad. Tras el éxtasis llegaría la calma. Los goles soltaron las piernas de los jugadores y abrieron el partido. Carlos Álvarez tuvo el empate y Javi López, en el enésimo robo grana en campo rival, marró una buena ocasión tras rematar precipitado y fácil para Limones. En el ala opuesta, Juanlu pondría la réplica, pero ya no habría tiempo para más.

Tres palos que cuestan un liderato

La segunda parte arrancó desordenada. Granas y albinegros saltaron algo desconectados y costó retomar el ritmo de la primera mitad. Tras varios minutos de tanteo, fue el Murcia quien tomó la iniciativa. Se inició entonces media hora  de claro color pimentonero, culminada con tres balones a los postes que bien podrían haber cambiado el desenlace del encuentro. Carlos Álvarez logró encontrar las cosquillas a los centrales y, tras recibir un buen balón en profundidad, estrelló la pelota en el larguero. En la jugada siguiente, un centro raso de Germán fue a parar nuevamente a las botas del guaje, que de nuevo se topó la madera.

Arturo, muy presente en tres cuartos, volvió a responder saliendo desde el banco

Fueron dos avisos de un Murcia que se lanzó a por el partido. Las oportunidades metieron al Cartagena en su campo y dieron toda la iniciativa a los pimentoneros. Aira incorporó entonces a Arturo y Rafa, en una intentona por asentar el dominio, mientras que Monteagudo reforzó el medio campo con Luque. Con Chavero fundido por el esfuerzo acumulado, y Rafa algo desaparecido, el abaranero volvió a asumir las riendas del juego. Situado en zona de tres cuartos, estuvo vivo, presente, pidiendo el balón y produciendo en la parcela creativa. Fruto de ello llegaría el tercer palo grana, esta vez por obra de un activo Pumar, que reventó el cuero contra el travesaño.

Pumar se estrelló con la madera | Imagen: Vicente Vicéns y JM Rodríguez (La Verdad)
Pumar se estrelló con la madera | Imagen: Vicente Vicéns y JM Rodríguez (La Verdad)

Otra ocasión se esfumaba para un Real Murcia que acabaría pagando un alto precio a su mala fortuna. Traspasado el 80, con el Murcia situado en terreno rival, Sergio García (ingresado en la segunda mitad) inició un contragolpe, se escoró en banda diestra y centró. Su envió fue cazado por Juanlu en la frontal que, sin pensarlo, remató abajo y potente contra el arco de Fernando, poniendo el 2-1 definitivo. El golpe fue mortal para un Murcia que ya no lograría reaccionar. Derrota final en un choque igualado en líneas generales, donde sólo la mala fortuna impide a los granas seguir al frente de una clasificación que ahora lidera el UCAM.