Tras un año de altibajos, la Real Sociedad finaliza el 2016 de manera casi inmejorable. Los txuri-urdin se encuentran situados quintos, igualados con el cuarto clasificado a puntos, pero sobre todo se encuentran en un estado de gracia en el que todo les sale bien, porque lo hacen bien.

Comenzó mal el 2016

La Real Sociedad arrancó el año tal como lo terminó: sin chispa, irregular y en tierra de nadie. Eusebio no parecía dar con la tecla y el equipo alternaba buenos partidos con otros en los que mostraba una pasividad y falta de ideas preocupante. La pobre primera vuelta realizada por el conjunto guipuzcoano, 15º con 16 puntos, desalentó a los aficionados, que veían cómo un año más el objetivo de luchar por posiciones europeas se desvanecía antes de tiempo. No, esta Real Sociedad estaba más preocupada con alejarse de los puestos de descenso. Además, los txuriurdin habían perdido en su último partido previo al parón navideño contra el Real Madrid a Sergio Canales,  rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, y a Imanol Agirretxe, no se imaginaban los problemas que acarrearía luego esa lesión, agravando aún más su situación.

Durante enero, la Real siguió por el mismo cauce. Disputó un total de cinco encuentros con un balance de dos victorias, dos empates y un derrota, finalizando el mes 13º con 24 puntos, cuatro puntos por encima de los puestos de descenso. Comenzó empatando en Vallecas contra un necesitado Rayo Vallecano, donde tuvo que remontar por partida doble con los goles de Aritz Elustondo y Bruma, y venció después en Anoeta contra un Valencia en horas bajas. La Real obtuvo una merecida victoria, más por insistencia que por juego, merced a un renacido Jonathas que anotó dos tantos. Una semana más tarde, volvió a empatar ante el Deportivo de la Coruña, encadenando tres partidos consecutivos sin perder. Xabi Prieto igualó de penalti el tanto inicial de Luis Alberto y Mikel Oyarzabal y Jonathas pudieron haber cerrado la remontada pocos minutos antes de finalizar el encuentro. No pudo ser, pero la Real daba muestras de mejoría.

Sin embargo, como hemos comentado anteriormente, esta Real Sociedad era, ante todo, irregular. Así, tras mostrar un atisbo de esperanza, los de Eusebio volvieron por sus fueros y salieron derrotados por un sonrojante 5-1 en el Molinón. El Sporting de Gijón desbordó a los donostiarras, que no supieron reaccionar. Tras semejante mazazo, la Real reaccionó con una victoria contra el Betis en Anoeta, finalizando enero con una victoria. Dos sendos cabezazos de Prieto e Iñigo Martínez adelantaron a los locales en una magnífica primera mitad. Pero, como no, los txuriurdin bajaron los brazos en la segunda y dieron esperanza a los andaluces, que bien pudieron haber empatado el encuentro de señalar el colegiado un clamoroso penalti sobre Joaquín.

Adiós a Chory Castro

El 5 de enero de 2016 la Real Sociedad anunció la rescisión del contrato de Chory Castro, que finalizaba el 30 de junio del mismo año. El mediocentro uruguayo había llegado al conjunto vasco en verano de 2012 y había disputado con la elástica txuriurdin más de 100 partidos, formando parte de la plantilla que se clasificó a la Liga de Campeones en la temporada 2012/13. Sin embargo, no era del agrado de Eusebio Sacristán y tan solo había jugado diez encuentros entre agosto y diciembre de 2015, ocho en Liga y dos en Copa del Rey.

Castro firmó con el Málaga pocos días después de rescindir su contrato con la Real Sociedad, donde continúa jugando actualmente. 

Alzando el vuelo

Tras los altibajos del pasado mes, el equipo cumplió dos meses bajo el mandato de Eusebio, el vallisoletano celebró con un triunfo por goleada en tierras catalanas. El partido en el RCDE Stadium concluyó con una cómoda victoria, fue una manita, festín para Jonathas con un doblete, un tanto de Oyarzabal, uno de Vela y otro de Diego Reyes.

Para continuar con las alegrías, los donostiarras le propinaron al Granada una goleada en el día de San Valentín, una etapa en la que Oyarzabal empezaba a florecer y Carlos Vela estaba retomando su mejor nivel. La Real logró aprovecharse de ese partido en Anoeta para aproximarse a la primera mitad de la tabla, los aires de esperanza ilusionaban al equipo que David Moyes había dejado a medias, sin sabor y ahora todo pintaba para un prometedor arranque de racha.

Prosiguiendo con el buen momento del equipo, llegó el día de derbi, tocaba la visita a San Mamés. Con un gol tempranero de Jonathas y la capacidad de mantener el resultado, favorecieron para que los txuri-urdin pudieran llevarse un triunfo importante, tres puntos obtenidos del campo del eterno rival. La Real llegaba al encuentro con la ambición de acercarse al Athletic, estando cinco unidades por detrás del último boleto para la Europa League, con ese resultado, durmieron dos puntos a la retaguardia del Athletic.

Para concluir el mes más corto del año, el Málaga visitó el feudo de Donostia y casi le daban un golpe bajo en su feudo, cayendo por la mínima hasta la recta final del partido cuando Agirretxe igualó el marcador regresando dos meses después de sufrir una lesión. La Real terminó el curso de febrero sin perder e iniciaría marzo con la ambición de llegar a posiciones europeas.

Foto: Ricardo Criado
Foto: Ricardo Criado

Un nuevo bajón cuando el equipo aspiraba a cotas altas

Tras tres triunfos y un empate en el mes de febrero, el equipo iniciaba el mes de marzo mirando de reojo a los puestos altos de la clasificación, tras varios meses de agonía, en los que el conjunto donostiarra asomó más cerca siempre del descenso que de los puestos europeos. Con 34 puntos tras 26 jornadas, el séptimo puesto que ocupaba el Athletic se encontraba a solo cuatro puntos.

Pero si por algo se caracterizó la temporada de la Real fue por la irregularidad, por los altibajos que asomaban en el conjunto donostiarra semana tras semana, capaz de mostrar su mejor versión y su peor en el margen de una semana.

Ante el Atlético de Madrid, los de Eusebio no ofrecieron una buena imagen, y cayeron por 3-0 en un partido en el que no estuvieron a la altura de las exigencias. Griezmann volvió a marcar, al igual que en la ida, y alargó su racha goleadora ante la Real.

Ante el Levante en casa, el equipo volvió a desaprovechar la oportunidad de resarcirse ante su afición, en la enésima oportunidad de meterse en la batalla por Europa al menos de forma virtual. Reyes marcó en un saque de esquina, pero Deyverson le devolvió la misma moneda a los realistas y estableció el empate a uno definitivo.

En Vigo, la buena segunda parte realizada por el equipo no fue suficiente para sumar en la visita al estadio de Balaídos, y cayó con un gol del delantero de Moaña, Iago Aspas. La derrota en Vigo fue un golpe casi definitivo a las posibilidades europeas de la Real. La derrota en casa ante el Las Palmas una semana más tarde estuvo acompañada por una sonora pitada por parte de una afición cansada tras el fatídico curso del equipo.  

Una de cal y otra de arena

Abril fue un mes de luces y sombras para la Real Sociedad. Los de Eusebio se encontraban en esos momentos asentados en la undécima posición con 35 puntos en su haber, un colchón importante sobre los puestos de descenso, pero lejos aún de aquellos que otorgaban la clasificación a Europa League.

La Real disputó un total de cinco encuentros en abril, con un balance de dos victorias, un empate y dos derrotas, finalizando en la misma posición en la que había comenzado el mes, más con 42 puntos cosechados. Después de dos derrotas consecutivas y cinco partidos seguidos sin ganar durante el mes de marzo, la Real arrancó de la mejor manera posible: Con dos victorias sobre dos equipos de primer nivel; Sevilla y Barcelona.

Primero, los donostiarras vencieron en tierras andaluzas por 1-2 gracias al tempranero gol de Markel Bergara y al tanto en propia puerta de Krychowiak. Una victoria de gran valor con la que la Real prácticamente amarraba la permanencia. Y una semana más tarde, el conjunto txuriurdin volvía a lograr la machada contra el Barcelona merced a un gol de Mikel Oyarzabal, totalmente asentado en el once, a los 5’ minutos de partido. La Real hizo un partido memorable en todos los aspectos y demostró, una vez más, ser la bestia negra del Barcelona, que veía peligrar su liderato.

No obstante, cuando la Real muestra su mejor cara, le sigue la peor. Y así fue. A las dos victorias mencionadas le prosiguieron otras dos derrotas consecutivas contra Eibar y Getafe, dos conjuntos teóricamente inferiores. En Ipurúa, los armeros remontaron el gol inicial de David Zurutuza con dos cabezazos de Sergi Enrich y Escalante, dando de ese modo un paso de gigante hacia la permanencia. Una jornada después, la historia volvía a repetirse cuando, incomprensiblemente, el equipo se derrumbó tras el gol de Vela, dejándose remontar por un Getafe que había llegado a San Sebastián como colista. La afición despedía a sus jugadores con pitos.

Por último, la Real Sociedad finalizó el mes empatando a cero en el Madrigal contra el Villarreal. Un mes, de nuevo, de lo más irregular, donde se pudo ver tanto su mejor como su peor versión

Buen sabor de boca para una amarga temporada

En el quinto mes de la temporada pasada, la Real Sociedad cuajó un buen final de Liga que dejó un buen sabor de boca en la afición realista tras el gusto amargo que había dejado la campaña. Finalizando en novena posición, los donostiarras maquillaron una gris temporada en la irregularidad privó de optar a puestos europeos.

En todo caso, tras la debacle a la que se llegó con David Moyes, el conjunto de Eusebio mostró un poco más de ambición en este final, ya que, a pesar de no jugarse una posición en la tabla, terminaron ganando los dos últimos partidos de liga, ambos disputados en mayo. Tras este colofón de la competición nacional, los jugadores se marcharon a EEUU para disputar una minigira en la que dieron a conocer el equipo en el país americano.

Foto: Ricardo Criado

Seis puntos al final

La Real Sociedad dio una buena imagen al final de la temporada pasada con dos victorias importantes que, si bien no dieron opciones a competir en Europa, maquillaron el resultado de una temporada difícil. Así las cosas, los realistas terminaron novenos, algo que consiguieron sumando seis puntos ante el Rayo Vallecano en Anoeta y contra el Valencia en Mestalla. De no haber conseguido estas dos victorias, el resultado final habría sido en la decimoquinta posición, lo que habría dejado a la afición con otra imagen.

En Anoeta, los jugadores txuriurdines vencieron a un Rayo que se jugaba la permanencia. Dos canteranos realistas, Oyarzabal y Bautista, fueron los goleadores en la primera mitad de un partido al que se encargó de dar emoción Javi Guerra en la segunda parte. Pero los madrileños no pudieron rascar un resultado positivo de Donostia, lo que posteriormente les condenaría al descenso.

El siguiente y último partido de Liga fue en Mestalla, contra un Valencia en situación parecida a la de la Real. Con un equipo llamado a ocupar puestos europeos,  el equipo che terminó en una discreta duodécima posición. El gol de Oyarzabal en el descuento daba los tres puntos para los donostiarras que se merecieron la victoria tras una buena segunda parte.

Una minigira de vacaciones

Tras el final de la Liga, los jugadores txuriurdin viajaron a Estados Unidos con el objetivo de completar una minigira de dos partidos en la que darían a conocer al equipo donostiarra en el continente americano. Un ‘stage’ más de promoción que de fútbol, con la mirada más puesta en el ocio que en los resultados, terminó con una derrota ante los San José Earthquakes y un empate, que declinaría en victoria tras la tanda de penaltis, ante Houston Dynamo.

En definitiva, los realistas cuajaron en este mes de mayo un buen final para una temporada irregular que, contrariamente a lo que ha sido el comienzo de ésta, fue desilusionante desde el principio. Aun así, se notaron rasgos propios del equipo actual como la ambición, esa que llevó a anotar en el último minuto del último partido de Liga, a luchar por tres puntos que apenas cambiaban algo en la clasificación.

Unos que llegaron y otros que no se fueron

El pasado mes de Junio en el conjunto txuri-urdin estuvo marcado únicamente por las nuevas llegadas y rumores de jugadores que podrían recalar en el club. La primera llegada fue la de Juanmi, procedente del Southampton, el delantero andaluz firmaba hasta junio de 2021 por un precio de 4 millones de euros. El actual siete de la Real ya había jugado en la liga española varias temporadas en el Málaga antes de dar el salto a la Premier donde apenas tuvo oportunidades. En lo que va de temporada aún no ha podido afianzarse la titularidad en el equipo pero el andaluz sigue entrando en los planes de Eusebio.

Por otra parte, la segunda llegada al conjunto vasco en el mes de junio fue la de Toño Ramírez, portero que militaba en el AEK Larnaca de Chipre que firmaba contrato con la Real hasta Junio de 2018. El actualmente segundo guardameta ya sabía lo que era jugar en el conjunto txuri-urdin.

Otros aspectos a destacar durante este mes fueron los continuos rumores sobre la salida de Carlos Vela. Sonaron nombres como Munir o Piatti para suplir una posible marcha del mexicano a la MLS que finalmente, continuó en el conjunto vasco para seguir siendo uno de los pilares fundamentales en el equipo.

Buena imagen en los amistosos

El mes de julio comenzó repleto de especulaciones. Eusebio contaba en aquel momento con 26 jugadores, más de los que quería, por lo que muchos de ellos debían de salir. Además de las diversas salidas que se dieron, en julio se pudo ver a la Real Sociedad enfrentándose a equipos de toda Europa en su respectiva pretemporada.

El primer adversario fue el Tolosa CF. Cómodo fue el partido que la Real vivió el 16 de julio gracias a un contundente cero a cinco, en el que destacaron el doblete del brasileño Jonathas de Jesús y el estreno goleador del reciente fichaje, Juanmi Jiménez. A continuación los donostiarras visitaron la casa del Logroñes, donde ganaron por la mínima gracias a un gol del central Srdan Babic rematando un centro de Esteban Granero en un libre directo. En ese encuentro, el zaguero serbio pidió un sitio en la primera plantilla txuri-urdin,  y por qué no, en el once inicial.

Ya era hora de enfrentarse a un Primera, por lo que la cita frente al Villarreal CF se esperaba con ansia. El choque entre groguets y vascos concluyó con un 1-1 que dejaba el partido en tablas gracias a que el ariete Juanmi igualó el duelo tras recibir un gran pase del eibarrés Mikel Oyarzabal.

Por fin los de Eusebio sabían lo que era jugar contra un equipo de Champions, por lo que tocaba bajar un poco el nivel para dar oportunidades a los menos habituales y más jóvenes. Enfrentarse al Konyaspor supuso una idónea oportunidad para los mencionados previamente, a pesar de no poder pasar del 0-1, un resultado algo agridulce comparando la entidad de ambos conjuntos.

Llegó la hora de hacer el habitual viaje a los Países Bajos, para verse las caras ante dos clubes nacionales, como lo son el NEC Nimeja y Heerenveen. Frente al primero, el técnico vallisoletano alineó el once más novato o menos experimentado de toda la pretemporada, con jugadores como Babic, Hervías o el mismo David Concha. Jóvenes y talentosos, por lo que demostraron poder ser parte de la plantilla del primer equipo y varios de ellos, hoy por hoy, son componentes de la misma.

A parte de ser un encuentro para poner a prueba a este tipo de futbolistas, también sirvió para coger confianza y salir reforzados al vencerlos por un claro 2-0. Este no sería el único choque que los realistas disputarían en Holanda, por lo que para cerrar su gira por el país, se vieron las caras ante el Heerenveen, antiguo club del exariete blanquiazul, Alfred Finnbogason. Un partido que dejó el mismo resultado que el anterior, con el que se daba por cerrada la expedición holandesa.

En cuanto a enfrentamientos, el mes de julio quedaba completo, pero como las buenas cosas, el fichaje estrella se hizo de rogar, y es que en el último día de dicho mes, la Real Sociedad oficializó la contratación del delantero brasileño Willian José.

La apuesta a punto no resultó del todo factible

El conjunto realista comenzó la pretemporada en tierras inglesas, en los que continuó con su buen bagaje defensivo, sumando sendos empates ante el Burnley (1-1) y el Middlesbrough (0-0). 

Poco después, el equipo cerró la pretemporada con un nuevo empate ante la SD Eibar (1-1), en un encuentro en el que obtuvo un premio excesivo. El equipo dejó muchas dudas cuando se enfrentó a equipos de un nivel similar, tanto en circulación como en creatividad de juego, como en fortaleza defensiva. 

Ante el Bayer Leverkusen, último ensayo antes de comenzar la temporada, el equipo ofreció una imagen muy floja, en un encuentro en el que lo mejor de todo fue el resultado (2-0), dado que el conjunto alemán pudo y mereció obtener una renta superior. 

El panorama no era el más indicado para enfrentarse al Real Madrid, que pocos días antes venció en la Supercopa de Europa al Sevilla en la prórroga. El conjunto de Zidane llegaba en todo lo alto, y superó al conjunto de San Sebastián gracias a una soberbia actuación del galés Gareth Bale, que marcó dos de los tres goles de su equipo. 

Las dudas del equipo se reflejaron ante el Real Madrid, el equipo continuaba mostrando sus carencias con y sin el balón, y el encuentro ante Osasuna fue una prueba de fuego para los de Eusebio. 

Una prueba de fuego que se solventó con eficacia y solidez defensiva. Juanmi primero y David García después, establecieron el cero a dos en el luminoso del Sadar, una victoria que supuso todo un desahogo a las dudas del conjunto realista. 

El avión aún seguía sin arrancar

Una vez de haber jugado un total de dos partidos en agosto, el conjunto donostiarra encaraba el mes de septiembre con un total de cuatro encuentros por disputar.

El primer partido de septiembre fue ante el Espanyol. Los de Eusebio Sacristán no pudieron obtener los tres puntos y se tuvieron que conformar con el empate. Una vez de que concluyera este partido, los donostiarras viajaron a El Madrigal con la intención de volver a la capital guipuzcoana con los tres puntos, o al menos, con un punto, lo ocurrido en la jornada anterior. La Real recibió un duro varapalo en la primera media hora del partido, donde el Villarreal, especialmente Sansone, obtuvo un doblete en los minutos 23 y 25. Yuri recortó distancias en el marcador pero su gol no valió para nada.

Como dice aquél refrán, "todo lo que va, vuelve". Ocurrió esto con la Real, que consiguieron una importantísima victoria ante la UD Las Palmas en Anoeta, derrotando al conjunto canario por 4-1. Pero pocos días más tarde, los de Eusebio recibieron un nuevo palo. La entidad donostiarra llegaba a Ipurúa siendo a priori el máximo favorito para llevarse el derbi ante el Eibar. Pero no por ello los de Mendilibar les iban a regalar los tres puntos, sino que los de Eusebio fueron quienes regalaron los tres puntos a los armeros cuajando un pésimo partido en todos los sentidos.

Jugadores de la Real celebrado uno de los cuatro goles marcado a Las Palmas en Anoeta | Imagen: Óscar Alonso - VAVEL
Jugadores de la Real celebrado uno de los cuatro goles marcado a Las Palmas en Anoeta | Imagen: Óscar Alonso - VAVEL

Pero de nuevo, la Real sintió la sensación de derrotar al rival. Gracias a un solitario gol de Carlos Vela, los donostiarras derrotaron al Betis en Anoeta y tras este partido cerraron el mes de septiembre con un balance de dos victorias, un empate y dos derrotas.

El derbi trajo el cambio

Tras un nuevo parón por las selecciones nacionales, el conjunto txuri-urdin comenzaba el décimo mes del año con una nueva derrota, esta vez ante el Athletic, que no ganaba a la Real desde marzo de 2012. Tras la derrota, la Real Sociedad dejó a un lado la mala imagen ofrecida en el derbi para poner inicio a una nueva dinámica de juego que vendría acompañada con unos resultados muy positivos en el equipo.

Los entrenados por Eusebio Sacristán comenzaban su buena racha ante un Alavés que visitaba Anoeta en un buen momento. El encuentro se saldó con una clara victoria local en la que los realistas se impusieron con tres tantos. Una semana después consiguieron volver a ganar, esta vez ante el Leganés, que tampoco tuvo opción ante el buen juego ofrecido por el equipo de Eusebio.

La Real conseguía acabar el mes de octubre en la zona alta de la clasificación haciéndose hueco en los puestos europeos, todo ello, debido a que el equipo supo recobrar su identidad de juego. Por otra parte, también cabe destacar la nominación del técnico vallisoletano como mejor entrenador de La Liga en el mes octubre

Nuevas ambiciones

Eusebio le añadió un toque de belleza al juego de la Real, esto era compensado con resultados favorecedores y la ambición de colarse en puestos europeos. El equipo tomó forma y con los recursos con los que contaba el vallisoletano, estableció un once que no sufrió alteración, encontrando un cuarto de máquinas con Illarramendi, Zurutuza y Xabi Prieto. Carlos Vela demostrando estar en su mejor nivel tras varias temporadas, Oyarzabal consolidándose en el once inicial y Willian José supliendo a Agirretxe en el centro de la delantera.

La jornada 11 puso un verdadero reto para los txuri-urdin: el Atlético de Madrid, por fortuna, se encontraron con unos mermados colchoneros que concedieron dos penaltis convertidos por Vela y Willian José; desde este choque, la Real mantiene la competencia contra el Atlético para colarse en Champions League.

El siguiente encuentro consistió en visitar Asturias, el Sporting no fue competencia para la Real, una exhibición en el Molinón que valió para terminar la jornada encima del Atlético e igualando con Villarreal por el cuarto puesto de la Liga. Xabi Prieto, Zurutuza e Íñigo le dieron la victoria al equipo donostiarra.

No había forma más complicada y a la vez tan ilusionante para terminar el mes como lo era midiéndose con el Barcelona, partido en Anoeta, escenario que no ha sido fácil para el equipo catalán. El buen momento de Willian José se hizo presente con el gol que abrió la lata del duelo, Messi lo igualó seis minutos después. Las reacciones de los jugadores txuri-urdin fueron la demostración del descontento de los jugadores por un resultado que no reflejó lo vivido en la cancha, un equipo que tuvo al Barcelona sufriendo y pudieron llevarse los tres puntos de una manera más cómoda. Así la Real finalizó el mes invicto y con los dieciseisavos de Copa a la vuelta de la esquina. 

Un mes luz y de color en Donosti

El último mes del año ha sido una continuación del gran mes de la Real que fue noviembre. En diciembre, la Real ha logrado un balance seis puntos de nueve posibles en liga y la clasificación para octavos en copa. En total, tres victorias, un empate y una derrota con diez goles a favor y nueve en contra. La Real, a pesar del desliz de Riazor donde perdió por un escandaloso 5-1, ha logrado la regularidad necesaria para optar a algo más que mantenerse tranquilos. Todos los partidos fueron dominados de cabo a rabo por la Real Sociedad exceptuando el de A Coruña.

Eusebio decidió no rotar en copa, y el resultado fue agridulce. El equipo ganó 1-3 y sentenció la eliminatoria en Valladolid, pero llegó con cansancio acumulado y la baja de Zurutuza por sobrecarga a Riazor donde lo pagaron muy caro. Llegó la vuelta de copa y Eusebio volvió a apostar por un once muy parecido al habitual con las entradas de Granero, Mikel, Juanmi y Zaldua. El equipo dio la talla, pero no logró vencer a un Valladolid que ni se acercó a Rulli al emapatar 1-1 con un autogol de Mikel. Las victorias en Granada por 0-2 y en Anoeta ante el Valencia por 3-2 le han dado vidilla a este mes.

Las buenas noticias son, por un lado, el olfato goleador de los tres delanteros del equipo. Willian José está que se sale, pero cuando Juanmi ha jugado ha marcado, y por si fuera poco, Bautista también vio puerta en Granada. Por otro lado, el buen nivel mostrado por Esteban Granero en Granada y las reapariciones de Mikel, Zaldua, Pardo y Gaztañaga ante el Valladolid. Sin embargo, la mala noticia es la lesión de Carlos Martínez para el resto de temporada tras romperse el ligamento cruzado en Granada. El mes final del año deja ilusionada a la gente de cara al año venidero.

Participantes

Aitor Ulacia Egaña Alex López de Munain Giovanni Batista Rodríguez Iñaki Fernández
Iñigo Hernández Arrizabalaga Jon Viedma José Ángel Gandullo Fructos Joseba Ormazabal Fernández
Mikel Caballero Olatz Zubia Zeberio

Pablo Arrivillaga Galindo

Unai Valverde
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