Viendo la trayectoria del Villarreal en la competición europea podemos separar dos etapas, ya que ha habido dos proyectos deportivos. La primera correspondería al partido que dirigió Fran Escribá contra el Astana. Donde consiguió una holgada victoria de 3-1, mostrando un juego apático a pesar del resultado abultado. Javi Calleja por su parte, dirigió al equipo en los cuatro partidos restantes, consiguiendo dos victorias y dos empates. En este conjunto de encuentros consiguieron seis goles a favor y cuatro en contra, y nos enseñaron un juego lúcido, con más ideas, y aunque defensivamente no llegaron al nivel elogiable de la Liga, consiguieron una buena tónica.

El equipo que más difícil se lo ha puesto al conjunto amarillo ha sido el Slavia de Praga. En el Estadio de la Cerámica el club checo consiguió ponerse con un 0-2 en la primera media hora, pero el Villarreal, por medio de Trigueros y Bacca, empató el encuentro antes de que acabara la primera parte. El equipo castellonense llevó la iniciativa del partido, y aunque no lo consiguió, fue el que buscó la victoria con más ahínco en la segunda mitad. Una actitud elogiable que el aficionado groguet echaba en falta con Escribá.

A favor del Maccabi de Tel Aviv hay que decir que es el único equipo que ha conseguido que el Villarreal, el conjunto más anotador del grupo, no le marque ni un gol. Pero por el contrario entre el Slavia de Praga y el Astana han perforado su red en ocho ocasiones, acabando con un golaverage de -8.

Sirve el resultado de la ida

El equipo groguet llega invicto a la última jornada, con tres victorias y dos empates. Ya clasificado, busca ante el equipo israelí quedar primero. Por otro lado, el conjunto de Tel Aviv se ha convertido en la Cenicienta del grupo, y buscará anotar su primer gol en la competición, después de conseguir en su partido de ida el único punto que tiene. En el Estadio de Netanya, como si de David contra Goliat se tratará, el conjunto israelí sacó su garra más defensiva, y protegió su portería para conseguir un empate a 0. Inclusive, el árbitro no vio un penalti a favor del equipo de Jordi Cruyff que le podría haber dado la victoria. En este partido debutó en el banquillo castellonense Javi Calleja. El entrenador, pese a empezar con un empate contra el equipo más débil, ha acabado consiguiendo la clasificación para la siguiente ronda con aparente facilidad. El técnico ha mejorado el juego y las sensaciones del equipo desde aquel encuentro en septiembre, pero parece que al Maccabi le motiva la idea de enfrentarse al equipo español, así que veremos cómo actúan en la vuelta.

Ha sido un grupo igualado, subrayando a los tres primeros clasificados. En los partidos se han marcado y encajado goles con bastante igualdad, y aún queda por saber quién acompañará al Villarreal en la siguiente ronda, Slavia de Praga o Astana. Es en estos momentos donde se ve con más claridad la importancia de no perder partidos en una fase de grupos, ya que es tan importante sumar puntos como que no los sumen los contrarios.