El Paraná Clube de Brasil se va a convertir en el nuevo refugio deportivo del mediocentro Caio Henrique (Santos, julio 1997) después de llegar a un acuerdo con el Atlético de Madrid para la cesión de sus derechos hasta el 31 de diciembre de 2018, fecha en la que tendrá que regresar a la capital española, pues su contrato con el cuadro rojiblanco no expira hasta el mes de junio del año 2022. 

Caio, que buscará los minutos que en el Atlético de Madrid B no ha tenido por actitud, compromiso y rendimiento, recala en el Paraná de rebote después de no fructificar la operación que tenía verbalmente cerrada con el Santos. El futbolista puso rumbo a su ciudad natal el pasado viernes 30 de marzo, horas después de estar en el banquillo del filial para su partido contra el Coruxo, para mantener una reunión final con la directiva santista, con la que no llegó a firmar el contrato dadas las altas exigencias económicas que el conjunto brasileño no estuvo dispuesto a satisfacer. Según informan desde Brasil, el sueldo solicitado por el jugador y la cantidad que había que abonar al Atlético por su cesión, unos tres millones de euros, echaron al traste la operación.

Como la cesión de Caio a Brasil tenía que cerrarse antes de que expirase el día 2 de abril, fecha límite del mercado, el Paraná Clube, que demostró interés en sus servicios pese a lo avanzado que tenía su préstamo a Santos, llegó a tiempo justo para satisfacer esas necesidades y llevar adelante una operación que pone, al menos hasta diciembre de 2018, punto y final a la estancia del brasileño en El Cerro del Espino de Majadahonda. El centrocampista de 20 años, que llegó a Madrid en febrero de 2016 para formar parte del Juvenil DH que conquistó Liga y Copa de la mano de Óscar Fernández, no ha logrado hacerse un hueco en el filial que milita en Segunda División B ni convencer a Diego Pablo Simeone para figurar en más convocatorias con el primer equipo, con el que hizo la pretemporada en 2016.

Su trayectoria a lo largo de esta temporada se resume en cinco participaciones con el Atlético de Madrid B, repartidas en un grueso de 181 minutos disputados. Solamente llegó a completar un encuentro, correspondiente a la decimotercera jornada del Grupo I de la Segunda B durante la victoria contra el Coruxo (1-2) en O Vao. La alta competencia en el centro del campo, con Keidi Bare, Roberto Olabe, Toni Moya o Cristian Rodríguez por delante, y su falta de compromiso y de actitud lo lastraron a la grada en multitud de ocasiones, llegando a ocupar la posición de lateral izquierdo en diferentes momentos para darle oportunidades. "Es un jugador de banda. Cuando llegó de Brasil era un jugador de banda, lo que pasa es que aquí han intentado colocarle en el centro, pero siempre ha sido banda derecha o banda izquierda. Nosotros con Caio tenemos salida", llegó a justificar Óscar a lo largo de la temporada para explicar el rol del brasileño.

No obstante, a lo largo de este curso se le ha visto más por la grada que por el césped. Óscar Fernández, su técnico, confesó que sus ausencias respondían exclusivamente a decisiones técnicas, alegando que bajo su criterio considera que existen compañeros que están rindiendo a un nivel óptimo y que no necesita introducir ninguna variante en una posición del campo que está bien reforzada con jugadores que han dado sobradamente la talla. Tampoco favoreció que a lo largo del año pasado, con el filial en Tercera, Caio dejara de estar disponible para Óscar en tramos de temporada debido a sus compromisos con la sub-20 para disputar amistosos y torneos locales.