Tras la reciente victoria frente al Villarreal, el Málaga afronta una nueva jornada de Liga ante uno de sus rivales directos por la salvación como es el Deportivo. José González se mostraba deseoso de conseguir la segunda victoria consecutiva en la rueda de prensa previa al partido del viernes.

La victoria reconforta muchísimos aspectos y la derrota te castiga también. Es muy difícil levantar el ánimo cada semana para intentar presentarnos al siguiente partido con garantías morales para competir aunque ellos siempre lo han hecho así que esta semana es mucho más sencillo”, comentaba el entrenador sobre el ánimo de sus jugadores tras ganar la pasada semana tras varios meses sin hacerlo.

Quizás el Málaga es el equipo que mejor calendario tiene con respecto a sus rivales directos con la única piedra del Real Madrid que visitará La Rosaleda el 15 de abril y el entrenador se aferra a esa minúscula posibilidad: "Conformarme con dejar de ser colista no es la meta. No pienso en eso. Ganar nos puede dar otra ilusión, afrontar de otra manera el partido del Real Madrid, pero no vamos a soñar despiertos, hay que atenerse a la cruda realidad"

El rival del viernes, el Deportivo, lleva varias temporadas en la zona baja de la clasificación pese a conseguir la permanencia en las últimas jornadas. El entrenador gaditano ha analizado al rival y sus posibilidades: “Ellos son más imprevisibles que nosotros porque vienen de un cambio de sistema y jugadores. En el último partido dieron una imagen diferente y se puede parecer al partido pero nosotros lo hemos preparado con varias formaciones”.

"La última experiencia de domingo y miércoles fue en Leganés, y no estuvimos bien, y el problema fue el físico", añadía José que arremetió contra los horarios ya que han tenido menos descanso que ningún otro equipo y eso le ha pasado factura en varias ocasiones a los jugadores.

El domingo fue un día especial para la afición. Su equipo volvía a ganar en casa tras casi cuatro meses sin hacerlo (precisamente ante el Deportivo, siguiente rival del club) y el ambiente era otro: “Cuando le das algo a tu afición y esta es grande pues se vuelca con nosotros. El otro día nos cantaban hasta olés. Eso nadie se lo imagina estando en nuestra afición”, finalizó José.