Aficionados y empleados del club ya saben que el Málaga será equipo de Segunda muy pronto y llevan a la espera de que sea oficial prácticamente toda la temporada ya que en ningún momento han levantado cabeza.

En la jornada 32 el equipo blanquiazul se enfrentará al Real Madrid y que, salvo sorpresa malaguista, caerá frente al cuarto clasificado de La Liga lo que le dejaría a 14 puntos de no ser que el Levante ganara al Atlético de Madrid.

Si el conjunto valenciano venciera al Atlético sería prácticamente decisivo el descenso ya que el Málaga se colocaría a 17 puntos de los granotas a falta de 18 puntos por disputar y sería oficial la semana siguiente donde el Málaga se enfrentaría al propio Levante en el Ciutat de Valencia.

Casualmente hace dos temporadas, el conjunto dirigido por Paco López, certificó su descenso en la jornada 34 frente al Málaga en La Rosaleda. Esta temporada va a ser al revés; el club andaluz sentenciará su racha de 10 años en la Primera División en el Ciutat frente al club al que mandó a la categoría inferior.

El Málaga pone fin a la mejor época en la Primera División tras clasificarse para la Champions League y arrasar en la fase de grupos ante equipos como Milán o Zenit; tras superar en octavos de final a un gran Oporto con jugadores como James, Otamendi o Jackson Martínez; luego el malaguismo viviría una de las peores noches jamás recordadas, la eliminación injusta en Alemania frente al Borussia Dortmund.

Desde ya se está comenzando a planificar la próxima temporada sabiendo los jugadores que abandonarán el barco en verano y los que se quedarán para intentar ascender al club a donde se merece.

Al frente del club se manejan varios nombres en los que se encuentran por ejemplo, Pablo Guede o incluso Salva Ballesta que se ha ofrecido como entrenador.