Una semana más, ya se conoce al árbitro que el Comité Técnico de la Real Federación Española de Fútbol ha designado para dirigir al Real Oviedo, en lo que supondrá el debut de Sergio Egea en el Carlos Tartiere, y que dará comienzo a su segunda etapa como entrenador de la disciplina carbayona.
Empieza fuerte el argentino, que tras medirse a un rival directo, como es el Almería, en su estadio, Los Juegos del Mediterráneo, recibe ahora a otro coloso de la categoría, el Granada. Este encuentro será dirigido por el colegiado vallisoletano Óliver de la Fuente Ramos, del colegio castellano-leonés.
Será la séptima vez que Real Oviedo y la joven promesa del arbitraje de Castilla y León, se vean las caras en un partido de fútbol. Como recordatorio sobre sus actuaciones están partidos que en la memoria de los carbayones todavía tienen una habitación. Es el caso de la derrota ante el Reus en el minuto 95, con el Oviedo de Hierro.
También es destacable la anécdota de que fue el encargado de arbitrar ambos partidos de liga ante el Albacete Balompié, esta temporada, y que acabaron por saldarse con victoria carbayona en casa y empate sin goles en el Carlos Belmonte, el primero de ellos no sin polémica tras el gol de Ramón Folch, que acabó por dar la victoria a los de Anquela y que podría haberse marcado en posición antirreglamentaria.
Además, el sector manchego se quejó también de una dura entrada que Juan Forlín cometió sobre Eugeni Valderrama, a quien se le pudo ver la herida provocada por los tacos del argentino, porque la jugada no se saldó con sanción alguna.
En el segundo de los partidos hizo lo que todo colegiado ha de hacer, no ser protagonista, algo que gusta mucho tanto a informadores como a aficionados y el partido acabó con empate a cero a pesar de las numerosas ocasiones para ambos bandos. Con dos goles –bien- anulados para el cuadro manchego y tres palos para el Real Oviedo.
En el punto de mira de este colegiado está seguir con la progresión ascendente de su carrera, la cual se ha visto algo mermada en estas dos o tres últimas temporadas, -algo, por otra parte, lógico-, para lograr suceder a José Luís González González como representante castellano-leonés en Primera División.