El Real Madrid llevó a cabo su último entrenamiento antes de visitar al Granada en un partido clave para sus aspiraciones ligueras. El conjunto blanco tan solo ha tenido dos días para poder preparar el partido en tierras andaluzas desde que el viernes jugara ante el Alavés en un victoria por 2-0. Tres puntos en el encuentro del lunes dejaría a los de Zidane con la posibilidad de celebrar el alirón en la jornada posterior con la visita del Villarreal a la Ciudad Deportiva.

La única novedad del entrenamiento fue la ausencia de un Mariano que se sumará a las bajas de Marcelo y Nacho Fernández para el partido ante el conjunto granadino. Este último sí que completó la sesión por segundo día consecutivo pero aún no se encuentra en las condiciones óptimas para disputar minutos. 

Esta baja del atacante dominicano deja a Karim Benzema, nuevamente, como el único delantero centro disponible en la convocatoria del técnico francés, ya que Luka Jovic continua sin poder salir de su domicilio por precaución al haber tenido contacto con un contagiado de coronavirus.

El entrenamiento comenzó con unos rondos para que, posteriormente, Zidane dividiera a la plantilla en dos grupos para realizar ejercicios con balón. Unas carreras continuas fue la antesala de una serie de trabajos técnicos para finalizar con disparos a puertas tras centros laterales. Una sesión suave para no cargar demasiado a unos jugadores que van a tener poco tiempo de descanso antes de afrontar el tramo final de la temporada. Tres partidos para hacerse con el campeonato y que, desde este lunes en Granada, van a ser auténticas finales.