El Real Madrid doblegó al Atlético de Madrid en la 13ª jornada de la competición doméstica, en un encuentro dominado, de principio a fin, por el equipo local. Los pupilos de Zinedine Zidane demostraron sus cualidades, imponiendo su ley ante un conjunto de quilates que buscaba prorrogar su condición de invicto. En el minuto 15 del encuentro, Toni Kroos se adjudicó una nueva asistencia, precedida por un cabezazo potente y certero de Casemiro, que vuelve a ver puerta después de haber lo propio en la UEFA Champions League frente al Borussia Mönchengladbach. De esta forma, el centrocampista brasileño anotó su tanto número 26 en 255 partidos disputados, hasta la fecha, con la elástica blanca. 

Además, se trata de un registro goleador que mejora las prestaciones, en este apartado, de sus socios de lujo: Toni Kroos suma diecinueve goles en 294 partidos y Luka Modric veinticuatro en 361. Emulando al Real Madrid de las cuatro Champions en cinco años, el trío de centrocampistas vuelve a brillar con luz propia, sobreponiéndose a las críticas y contratiempos. Asimismo, el internacional por Brasil se mostró rocoso y sólido en el apartado defensivo, penalizando los errores de los atacantes de la escuadra colchonera y emergiendo como un arma letal en las jugadas ensayadas. 

De cara a compromisos venideros, se espera que Casemiro continúe asumiendo galones y responsabilidades, así como participando de manera más activa -y relevante- en la circulación de balón del Real Madrid. Sobremanera y ante la nula etapa de preparación de la que ha gozado el cuadro merengue, los jugadores todavía disponen de un margen de mejora y evolución considerable. Sin embargo, la alta carga de partidos no permite errores y sumar de tres en tres se convierte en el denominador común. Con el triunfo ante el Atlético de Madrid, el elenco blanco cierra una semana de ensueño, habiendo impuesto su ley frente a equipos como el Sevilla, el Borussia Mönchengladbach y la escuadra rojiblanca.