En el Salto del Caballo se volvió a disfrutar. Después de ver un baño a su equipo ante el Rápido de Bouzas, y una remontada bochornosa ante el Fuenlabrada, los aficionados presentes en el feudo verdiblanco, han podido decir con la boca bien abierta qué son del Toledo. 6 partidos después, alrededor de un mes después, el Toledo de Onésimo consigue reencontrarse con la victoria en un partido donde el resultado engaña más de lo que parece. Un encuentro que enfrentaba a dos conjuntos con ideas de juego muy similares pero en el que se ha instaurado una superioridad local debido exclusivamente a la presión alta que ejercía el equipo que hoy vestía de verde. Un potencial ofensivo digno de un líder de la categoría y que mordía en cada intento de salida de balón de sus rivales. Se trata de esos 4 futbolistas que conforman la parcela ofensuva del Toledo que, parcheando la zona defensiva del equipo, pueden dar muchas alegrías a los suyos.

Tal era la presión que ejercía el Club Deportivo Toledo que a los dos minutos de juego Figueroa aprovechaba un error en la salida de balón de Mikel Fernández para plantarse solo ante el guardameta Mackay, pero el colegiado optó por interrumpir el mano a mano por una supuesta falta del delantero canario sobre el defensor visitante. Esta acción solo sería el primer aviso del infierno que iba a vivir el Ferrrol en todos y cada uno de sus intentos por sacar el balón jugado. No mucho después, a los 6 minutos de juego, otra vez Figueroa robaba un balón que le regalaba a Canario para que dentro del área batiera a Mackay. El extremo del Toledo anotaba y demostraba su gran estado de forma, adelantando a los suyos con su cuarto gol en lo que va de temporada. 

El Racing de Ferrol intentaba salir jugando pero se le hacía cuesta arriba poder crearle ocasiones a su rival, también al que obligaba a jugar en largo en su salida de balón por la fuerte presión de jugadores como Joselu o Pablo Rey. Sin embargo, pese a no crear excesivo peligro, el cuadro gallego se llevó el premio del empate al cuarto de hora de partido. Una falta lateral botada por el capitán Pablo Rey a la cabeza de Joselu, acababa en una gran parada de Alcolea, pero lamentablemente para el guardameta su rechace lo recogía para mandarlo a la red Adrián Armental. Con ese empate en el marcador el Rancing de Ferrol optó por dar un paso hacia atrás y rendirse hacia el asedio ofensivo del Toledo. Ante esos minutos de transición con el empate, el Toledo introdujo una variante táctica que le hizo brillar más aun a la hora de generar ocasiones, siendo esta la de retroceder a Jorge Ortí a banda izquierda a cambio de la entrada por el medio de Sergio García. La velocidad de este último cerca del área propició la llegada de las ocasiones más claras del Toledo, que fueron en las botas de Jorge Ortí, primero con un disparo cruzado que no llegó a coger la rosca adecuada y segundo con un disparo en el punto de penalti que se desvió en la pierna de un defensor.

El dominio del Toledo en la primera mitad era tan claro que se hacía difícil de entender el resultado que reflejaba el electrónico. El joven mexicano Charly Rodríguez seguía sorprendiendo al Salto del Caballo con continuas acciones de robo de balón desde segunda línea de presión, y precisamente en uno de esas acciones llegó el segundo tanto cuando Sergio García pudo expresar sobre el terreno de juego la velocidad que le caracteriza llegando hasta la línea de fondo y regalándole con el pase de la muerte el gol a Héctor Figueroa. Remontada que hacía llevar buenas sensaciones en el cuadro local hacia el descanso, y dos dedicaciones exclusivas al jugador verde, Carlos Esteve, en ambos goles por el reciente fallecimiento de su padre.

La segunda mitad pareció comenzar con el mismo guión y ritmo de partido, pero poco a poco con el paso de los minutos se observaba un Toledo con mucha más cabeza y tranquilidad en su juego. Esto también alimentaba las aspiraciones del Ferrol que conseguía coger más y más posesiones largas de balón. Esto se vio favorecido con la entrada de Alain Eizmendi en el terreno de juego, el cual participó en todas y cada una de las acciones ofensivas de su equipo generando un problema para la zaga toledana. A pesar del dominio visitante en esta segunda mitad, los gallegos no lograban generar ocasiones de peligro hacia la portería de Alcolea. Y fue precisamente el arquero local, el que se encargó de dar esperanzas a sus rivales, cuando a falta de 10 minutos para el final, Alcolea intentaba un regate en el área ante la cercana presión de Joselu. Después de que el ariete visitante lograra robar el balón, por desgracia para él cayó al suelo tropezando y despejando la oportunidad de haber empatado el encuentro.

Los minutos finales a este partido lo marcaron el debut de un nuevo mexicano en el Toledo, el extremo Obed Esaú, que por primera vez en su historia reunía a cuatro aztecas sobre el césped y una última ocasión visitante ya en el descuento que a punto estuvo de aguar la fiesta en el escenario local. Eizmendi desequilibró muy bien por banda izquierda ante Expósito y Brais dentro del área no acertó a rematar a gol con su disparo cruzado. Finalmente, los tres puntos se quedaron en Toledo ganando y sufriendo para recuperar esa moral que tanto necesitaba. El Toledo visitará la siguiente jornada Valdebebas con ilusiones renovadas, mientras que el Ferrol y su racha negativa recibirán al líder en A Malata.

Puntuaciones VAVEL

Figueroa

3

Canario

2

Charly Rodríguez

1