Experimento fallido en el Rico Pérez

Llegaba el sábado dos de diciembre y con él mucha expectación, no solo por saber como jugará el Hércules o que alineación sacaría para el partido Barragán, la expectación era realmente por ver el ambiente que habría en el Rico Pérez un sábado de diciembre a las 20:45 de la noche. Así es, a la directiva se le ocurrió que iría mas gente al partido poniéndolo cuanto mas tarde mejor, así la gente podría terminar sus quehaceres con su familia e ir al partido tranquilo, pero al parecer el resultado no fue el esperado y resultó ser todo un experimento fallido.

Una vez empezado el partido las esperanzas de colocarse definitivamente en los puestos de ascenso y superar al Elche se fueron disipando, a priori no parecía un rival difícil, el Ontinyent traía una racha de victorias que al Hércules en casa no le debería suponer ningún espanto. En la primera parte fue más protagonista el insoportable frio que el futbol, la pelota no se movió prácticamente de medio campo, sin dominaciones claras, sin chutes a puerta. Sería hacia el final de primer tiempo cuando se pudieron ver tímidos chutes del Hércules que se iban muy altos por encima del larguero.

En la segunda parte Claudio se debió dar cuenta de que no hacían futbol y no se acercaban al área contraria, por tanto decidió meter a Salinas, mas refuerzos en la delantera para buscar el gol. Entre tanta igualdad el Ontinyent marcó el primer tanto en una jugada aislada de manos de Tito. Con todo el estadio, y puede que jugadores, venidos abajo los locales necesitaban si o si los goles, así que les tocó tirar de casta y poner las tablas en el marcador. La jugada de gol vino desde la sobrecargada banda derecha, el Hércules prácticamente solo sabía comenzar sus ataques desde esa banda, con Juanjo Nieto a la cabeza. Pero en una de tantas Salinas, el cambio realizado por Claudio en la segunda, cogió el balón al borde del área, se fue de dos y desde la frontal marcó un autentico golazo pegado a la escuadra izquierda que hizo que todo el campo volviera a creer. Pese a las prisas que tuvieron los jugadores por marcar desde el minuto 80 el resultado final fue el uno a uno.

El empate no gustó a nadie pero ahora toca pensar y prepararse para el siguiente rival para el Elche. Con el horario en orden todos los herculanos han de pensar en llevar en volandas al Hércules el próximo domingo. Por su parte, la plantilla y Barragán deben empezar a preparar el encuentro cuanto antes, la victoria dejaría a los alicantinos muy cerca de los play-offs de nuevo.