Los Flames siguen edificando su plantilla para la temporada que viene y en las últimas horas han confirmado la continuidad de dos jugadores muy importantes en la última campaña, donde la franquicia canadiense fue la mejor de la división pacífica, aunque en playoffs cayeron en segunda ronda en la Batalla de Alberta contra los Edmonton Oilers.

Uno de los que selló su compromiso en Calgary fue Oliver Kylington, que firmó por dos años más a razón de 2,5 millones de dólares por temporada. El jugador sueco se había convertido en agente libre restringido y tenía prevista una audiencia salarial para el 10 de agosto, pero finalmente llegó a un entendimiento con los Flames.

A punto de arrancar su sexto curso en la franquicia, Kylington viene de hacer su mejor año. Disputó 73 partidos en los que se repartió 9 goles y 22 asistencias, a lo que hay que sumar tres puntos en la postemporada. En las cuatro campañas anteriores sumaba 16 puntos en total, por lo que prácticamente ha doblado sus números en solo un año.

Más madera al ataque

Por otro lado, Andrew Mangiapane también seguirá con los Flames después de haber acordado 5,8 millones de dólares en cada una de las tres temporadas que firmó. El canadiense estaba en la misma situación que su compañero, pero en este caso la audiencia salarial estaba agendada para el viernes, con menos margen.

Después de dos temporadas seguidas logrando 32 puntos, este curso fue un giro de 180 grados para Mangiapane, que se ganó su puesto en la segunda línea de ataque y con razón: 35 goles y 55 puntos en 82 partidos. Temporada completa, sin lesiones y presente en todos y cada uno de los choques.

La pregunta es, ¿podrá Mangiapane ser titular en este equipo? Con la marcha de Johnny Gaudreau y Matthew Tkachuk, solo quedó Elias Lindholm de quienes conformaban la primera línea. A ella hay que añadir a Huberdeau y otro jugador más. Cierto es que la posición natural de Andrew es el ala izquierda, pero a lo largo de la temporada ha protagonizado goles y ocasiones por el sector derecho, lo que invita a pensar que podría ocupar ese hueco libre.