Tras la última carrera en el Circuito Internacional Chang en Buriram, Tailandia, Gianni Ramello, propietario del Team GoEleven Kawasaki ha criticado duramente a Dorna y la FIM debido a la nueva normativa que ha entrado en vigor este año en el Mundial de Superbikes. Este nuevo reglamento incide de forma especial en el límite de revoluciones de los motores, por lo que Kawasaki es una de las más perjudicadas.

Después de que Román Ramos, piloto del Team GoEleven Kawasaki, no haya conseguido pasar de la undécima posición en las dos primeras carreras de la temporada y tras el decimotercer puesto obtenido en Tailandia, Ramello explotó en un post publicado en sus redes sociales. “Aquí está la gran igualdad deseada por Dorna en SBK, tal y como ya predije hace cuatro meses vamos a peor, después de dos carreras la primera Kawasaki privada está a 51 puntos del líder, [...] Es denigrante para los pilotos que arriesgan su vida, a los que no se ve durante toda la carrera, y que ven a los oficiales cada vez más lejos”, se ha quejado Gianni Ramello.

El italiano defiende que la situación ha ido a peor y que el reglamento es inútil, ya que ahora se están encontrando con mayores dificultades. “Cada carrera es un infierno, antes era mejor. Este es el resultado de una incapacidad general para gestionar la situación, intentando solventarlo con 340 páginas de reglamento inútil, absurdo, pensando que con el motor a su disposición y otros componentes se iba a cerrar la brecha”, ha manifestado. “Pero lo han empeorado, ahora estamos en más dificultades, dependemos de una electrónica a la que sólo tenemos acceso parcial y que por lo tanto no nos ayuda mucho”.

Ramello ha criticado a Dorna por no haber escuchado a los equipos privados que forman parte de la parrilla del WorldSBK a la hora de redactar el nuevo reglamento. “Nadie ha dado sentido a las demandas y protestas de los equipos privados. Ahora tenemos los sensores de presión en los neumáticos para esconder los defectos de los Pirelli, unos sensores que son inútiles pero que han sido impuestos por su presunción de omnipotencia y sin atender a nuestras protestas 'técnicamente inaceptables”, ha declarado.

Además, ha calificado la situación actual como vergonzosa y ha invitado a los aficionados a reflexionar sobre el campeonato. “Las carreras de SBK de este año son claramente falsas y están hechas en los despachos, construidas con reglamentos totalmente absurdos”, afirma. “La labor de los equipos privados es llenar la parrilla, nosotros con Kawasaki estamos destinados a lo peor, pilotos psicológicamente abatidos, el equipo en crisis total... ¡grandes perspectivas para un equipo privado!”, concluye.