Argentina volvió a ponerse de manteles largos y fiesta pues después de un largo periodo de tiempo, la albiceleste se presentaba nuevamente en la gran alfombra verde del Estadio Monumental, sin embargo, en esta ocasión existía una pequeña gran diferencia; el escudo argentino ya no lucía dos estrellas, ahora una tercera de añadía al pecho de los jugadores albicelestes, reconociendo a los actuales campeones del mundo. 

Al ritmo del Tango y canticos, el balón comenzó a rodar en el Estadio Monumental con las gradas pintadas de colores azul con blanco, banderas ondeando para acompañar la gran vista de los presentes y en el campo a los 11 héroes que hace un par de meses le dieron una alegría más a la historia de Argentina. 

Bajo el liderazgo de Lio Messi, Argentina comenzó a bombardear el área de Panamá que se presentaba con la misión de sobrevivir a los ataques argentinos e intentar arruinar la fiesta que se vivía. No fue hasta el minuto 17 que el hijo prodigo, Lionel Messi, hizo vibrar al país entero al ejecutar un tiro libre con el objetivo de incrustar el balón en las redes, sin embargo, el esférico se estremeció en el travesaño y todo quedó en una llegada más de los locales. 

Foto: AFP
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Pasaron minutos para que nuevamente las gradas volvieran a emocionarse, corría el minuto 33 del compromiso cuando el juez central marcó un tiro libre para Argentina tras la acción de Murillo al cortar la salida de la ‘Albiceleste’ con una dura entrada sobre De Paul, sin embargo, el balón volvió a irse fuera y la portería panameña se mantenía en ceros ante los embates albicelestes. 

Antes de acabar la primera mitad, el guardameta de Panamá brilló con una gran atajada ante un remate de Enzo Fernández desde fuera del área que bloqueaba lo que era el 1-0 para la campeona del mundo. 

Ganar o Ganar

Ya para la segunda mitad, las emociones no pararon pues la 58 de tiempo corrido, el Estadio Monumental entró en erupción con el reclamo de los jugadores de Argentina que pedían a gritos un penal tras la caída de Almada en área rival, aunque, el árbitro se mantuvo firme en su posición y optó por seguir con las acciones. 

La polémica se volvió hacer presente al minuto 72 cuando los jugadores pidieron penal a favor de Argentina tras una caída de Dybala en área rival. Al igual que la jugada anterior, el árbitro no hizo caso al pedido de la ‘Albiceleste’ y cobró saque de meta.

Sin embargo, al minuto 77, tras una serie de rebotes por fin explotó en el tan ansiado grito de gol en el Estadio Monumental luego de que Almada aprovechará un rebote y conectará el 1-0 a favor de la Albiceleste.

No tardó mucho para que la alegría volviera a surgir en el Monumental pues en lo delirios del partido, al minuto 89, Lionel Messi apareció para poner el definitivo 2-0 y sellar la victoria de la selección Argentina.