Ha pasado más de un año desde que David Patiño fuera nombrado como Técnico de los Pumas de la UNAM, después de la destitución de Juan Francisco Palencia y del interinato de Sergio Egea, el ex jugador auriazul era el elegido por la directiva para tomar las riendas del primer equipo pero, la duda que hasta el día de hoy invade al aficionado es si Patiño es realmente un entrenador para el equipo del Pedregal.

Durante sus cinco partidos de "prueba", el mexicano demostró la inexperiencia del cargo y solo consiguió 3 puntos de 15 posibles pero aún así no sería destituido, a pesar de que en aquel torneo Pumas quedo último de la tabla general con 13 unidades.

Durante el Clausura 2018 el entrenador calificó al equipo a la Liguilla de este torneo, consiguieron 24 puntos, en 18 fechas ganaron 6 juegos, empataron 6 y perdieron cinco veces; el rival para los Cuartos de Final serían las Águilas del América y frente al odiado rival los universitarios quedarían fuera tras un marcador global de 6 goles a dos.

El torneo pasado Pumas no se vio nada bien durante el arranque del torneo, aún así los dirigidos por Patiño mostraron una mejor cara en los juegos fuera del Olímpico Universitario y lograron acceder nuevamente a la liguilla, este equipo rompió rachas negativas del equipo y pudieron avanzar a semifinales tras eliminar a los Tigres para después caer ante el América por marcador global de 7 goles a 2.

Para este torneo la afición no esta muy contenta por la decisión de la directiva de mantener al técnico, las entradas en el Olímpico han sido las peores de la última década, la forma en la que el equipo juega no es del agrado del respetable, mismo que en más de una ocasión han exigido que tanto Patiño como Ares de Parga dejen sus puestos, pero el técnico ni se inmuta, reflejando que el hecho de que David continue en el banquillo auriazul sea uno de esos caprichos de la directiva por no gasta de más.