Las Chivas logran volver a ganar, ahora ante el campeón Tigres, luego de doblegarlos 2 goles 0. Con las anotaciones de Antonio Briseño y Alan Pulido. Un partido parejo, que a pesar de que la visita jugó casi 70 minutos con uno menos, al final hubo polémica y mucha calentura.
El partido comenzó con las Chivas más insistentes y con más presión al marco rival, incluso fue tanto el empuje, que antes del minuto 10, había conseguido la ventaja en el marcador por un cabezazo de Antonio Briseño, quién se adelantó en la marca y a primer poste remató un centro desde el tiro de esquina.
Con el marcador en contra, Tigres buscó tener posesión de balón, pero pasado el medio campo se cortaban sus avances y buscaban a través del pelotazo, claro sus jugadas no terminaban para bien. Mientras tanto, Chivas resistía y buscaba contragolpear con base a la velocidad de sus atacantes.
Al minuto 23 llegó la primera jugada con polémica, luego de un contrataque rojiblanco, tomaron mal parada a la zaga felina, y Carlos Salcedo golpeó a Michael Pérez. Situación que evocó al silbante a revisar el VAR, para posteriormente expulsar al central de Tigres.
Con el paso de los minutos, Tigres mantenía la posesión pero sin causar peligro en la meta rojiblanca, y Chivas era cauteloso a la espera de un error felino. Además de múltiples faltas y pérdidas de balón, el juego se volvió friccionado e interrumpido constantemente.
Chivas igualó a Tigres en cuanto a tenencia del esférico, pero tampoco se mostró profundo en sus avances después del mediocampo. Ya sin mucho que destacar, el juego siguió su marcha hasta el final de los primeros 45 minutos. Apenas al comienzo del segundo tiempo, Chivas volvió a la carga y con un tiro peligroso de Michael Pérez puso a Nahuel a que se estirara y evitar el segundo gol en contra.
De nueva cuenta, el partido se volvió tenso y partido en el mediocentro de la cancha, con muchas imprecisiones y pocas elaboraciones de juego. Sin embargo, Damm sorprendió con un desborde por banda izquierda para posteriormente mandar un buen centro a un solitario Ggnac, quien vio frustrado su gol tras el atajadón de Toño Rodríguez.
La calentura del juego se elevó a tal grado, que a los 20 minutos, Tomás Boy y André Gignac se hicieron de palabras, y el árbitro amonestó a ambos, pero los reclamos del técnico rojiblanco siguieron y se fue expulsado. Tigres adelantó líneas y casi consigue marcar en un tiro libre de Gignac, el cual fue atajado por Pepe Toño.
Pasados los 70 minutos de juego, la cancha se inclinó hacía un solo lado, Tigres era amplio dominador, con balón controlado, pero con poca generación de peligro. Chivas, encerrado en su cancha, con doble línea de cinco y dedicado a destruir cualquier avance rival.
Entre los minutos finales y la desesperación de Tigres, Chivas atacó en un par de oportunidades y provocó errores en la salida del rival. De lo cual se derivó una falta sobre Cervantes, que se marcó como penal. El encargado de cobrar, fue Alan Pulido. Quien engaño y anotó el segundo gol del Rebaño, para darle el triunfo en casa.