Siempre existen peleas que se matizan con una sensación diferente por distintos factores, presión, estrés y por sobre todo polémica. La polémica en su mayoría suele estar situada en el espacio de aquellos personajes que viven para crearla con sus acciones o comentarios, tal como lo ha sabido ser el que era estratega del rival en turno para Chivas: Carlos Reinoso, lamentablemente la rivalidad no verá un nuevo capítulo por la incapacidad de salud que presentó, por lo que queda poco más que recordar aquella enemistad:

Luego de un pasado como jugador del odiado rival, América, tanto de jugador como entrenador en donde consiguió alzarse con campeonatos, el sentimiento de quedarse pegado a los colores de aquella institución de forma más cercana es algo que ha externado en varias ocasiones, con comentarios fuertes sobre los ‘Rojiblancos’, por calentar el Clásico Nacional o solamente porque le nació opinar respecto a la situación.

Comentarios como “Chivas no existe”, “Les vamos a llenar el estadio”, entre algunos otros, que hay quienes califican de poco profesional, son los que han dejado en claro su postura azulcrema frente a cualquier cosa, a la vez que le han merecido el odio de una parte de los aficionados tapatíos, dejando en el nombre ya una sola razón para que existan fricciones previas a un duelo, aun cuando ya no es timonel del barco mencionado.

La primera etapa que ‘El Maestro’ tuvo frente al equipo donde más brilló fue de 1981 a 1984, donde consiguió salir con el título ahora como entrenador. Pese a que no fue un amplio dominador frente al Rebaño Sagrado, pudo desquitarse de una eliminación sufrida a manos del archienemigo en la temporada 83-84, con un global de 5-3, que si se le suma la posterior victoria en la final es un impulso fuerte en el orgullo de esta rivalidad.

Sus estadísticas no obstante no fueron las óptimas con el tiempo; en el 98 no pudo derrotar al Deportivo Guadalajara y en su efímero paso por Coapa en 2011 fue goleado 3-0 por el equipo contra el que acababa de arremeter durante la semana.

A principios del presente año se encontraba en el banquillo de Veracruz, con una meta que se antoja complicada a la fecha, salvar la categoría, cuando pareciera estar en contra la situación, rumbo a la recta final y con otro proyecto interrumpido, ahora a la mala.

En su anterior lapso como ‘Escualo’ logró buenos números frente a ellos, con una victoria y 3 empates, nada despreciable considerando que se mantuvo sin perder frente a ellos, ahora la jornada 11 del Clausura 2017 le abre la abría la puerta de seguir con la magia, volver a sentir la sensación de pegarle al principal contrincante, ahora con una misión más clara en mente por el panorama que viven sus pupilos. Mientras que para Chivas hubiese sido un nuevo episodio en una rivalidad que ha trascendido instituciones.

Una afectación a la salud no es algo que se pueda tomar a la ligera ni que se le desea a alguien y dentro de cada uno este lapso en la historia no tuvo oportunidad de ser concretado, lo que le quita un tanto de esa mística que acompañaba al juego, aparte de dejar a la deriva al último del cociente, un duelo que no se pudo ver en 2017.