Había varios guiones establecidos para este etapa. Podía llegar una fuga, pero no se le dejó mucha libertad. Podía haber ataques en Monte Faro y que llegasen a meta, pero Lutsenko fue neutralizado a cinco para meta. Y la tercera vía era llegar al sprint, lo que parecía más probable. Pero Adam Hansen (Lotto) se encargó de romper todos los planes y crear su propia historia. Su ataque a falta de cinco de meta parecía ir a ningún lugar, pero el hueco cada vez se hacía más grande hasta que fue imposible cazarle. Hansen logró un triunfo vintage en Cangas de Morrazo.
La fuga del día fue pequeña y no tuvo nunca opciones reales de lograr el triunfo de etapa. La compusieron Pim Lightart (Lotto), Wout Poels (Omega Pharma) y Laurent Mangel (FDJ). EL pelotón nunca les dio demasiada cancha y su distancia con el gran grupo siempre fue escasa.
Orica Green-Edge y Giant-Shimano encabezaban el pelotón, pensando en que sus dos sprinters, Michael Matthews y John Degenkolb, pudieran superar Monte Faro, el último puerto de la jornada. Por ello comandaban la persecución. Poco a poco el terreno que tenía la cabeza de carrera se iba reduciendo de camino a esta ascensión. Entre medias, Bob Jungels (Trek) abandonaba la prueba.
Apenas quedaba un kilómetro para el inicio de Monte Faro cuando la fuga fue neutralizada con un último empujón del Tinkoff, que no quería sorpresas en pos de mantener el maillot rojo sobre los hombros de Alberto Contador. Una vez iniciada la subida, como es habitual, varios hombres bajaron el ritmo y se quedaron, pero el ritmo que se impuso en la subida, por medio de los Sky, no fue excesivamente duro.
El primero en probarlo en las rampas de Monte Faro fue Alexey Lutsenko (Astana). El kazajo no logró un gran hueco, pero Peter Kennaugh no imprimía un ritmo demasiado exigente en el pelotón, lo que provocó que Degenkolb y varios compañeros pudieran mantenerse en la cabeza del gran grupo, al igual que Matthews. La poca dureza que el Sky puso en el pelotón ocasionó que más gente probase suerte, como Guillaume Levarlet (Cofidis), pero sin demasiada fuerza. Lutsenko coronó en cabeza seguido muy cerca del pelotón para encaminarse a un descenso bastante técnico.
Con este panorama, el escenario parecía ideal para Samuel Sánchez, que se lanzó cuando la carretera picaba hacia abajo. El descenso era más peligroso de lo que parecía ya que, además de ser técnico, el asfalto era irregular. Esto, unido a la velocidad, provocó la caída de Dario Cataldo (Sky).
Samuel Sánchez fue neutralizado nada más finalizar la bajada y el pelotón comenzó la caza de Lutsenko, que tenía un margen de una veintena de segundos. Barguil (Giant) era el encargado de conducir al gran grupo, seguido de los Sky y los Tinkoff, trabajando para la quinta victoria de Degenkolb.
Lutsenko fue neutralizado a falta de 5 kilómetros, en un pequeño repecho. Aceleró Hansen (Lotto) y se formó un pequeño corte en el que estaban Contador, Valverde, Degenkolb o Pozzatto, pero no Froome ni Purito, aunque el hueco fue cerrado rápidamente. Hansen volvió a probarlo y poco después arrancó Dani Navarro (Cofidis), aunque el asturiano fue rápidamente cazado.
El australiano del Lotto siguió aumentando el ritmo y abrió un hueco bastante importante con el pelotón. Sin darse ni cuenta, el gran grupo había perdido de vista a Hansen y el aussie tenía el triunfo en la palma de la mano. Tras diez grandes vueltas consecutivas finalizadas, el australiano tenía que celebrarlo, y qué mejor manera que ganando en Cangas de Morrazo. Tuvo tiempo para saborear la victoria mientras por el retrovisor veía como el pelotón llegaba con Degenkolb en cabeza, que se lamentaba de haberle dejado marchar.
Etapa 20: Santo Estevo de Ribas de Sil-Ancares (185,7km)
La última gran batalla de esta Vuelta a España. Cuatro puertos, uno de cada categoría y final en un coloso, Ancares. Sin duda será una jornada clave para la clasificación general en la que los gallos del pelotón deberán batirse el cobre. Froome tiene su última bala para superar a Contador, Valverde buscará certificar otro podio más en la ronda española. Aru, Purito y otros tratarán de dar un susto en la lucha por el tercer puesto de la general. Es un día marcado en rojo para los amantes del ciclismo.