Con la vitola de favorito partía el alemán Lennard Kämna, ya que con el dorsal dos a la espalda tomaba la salida en última posición al no estar presente el ganador de la pasada temporada en Florencia. Concluyendo con 36:13, Kamna arrasaba no encontrándose un rival que le pudiera poner nervioso a la hora de los kilómetros finales.
“Solo deseaba no caerme”
El alemán, aparecía en la sala de prensa con una amplia sonrisa mostrando su medalla de Oro a los allí presentes. “Estoy muy contento y espero poder asimilarlo según vayan pasando los días, mi aspiración era estar en el podio y no podía siquiera soñar con esta victoria. He entrenado largas horas desde el inicio de la temporada y tengo que dar las gracias a mi entrenador”, comentó.
Tras 29,5 kilómetros, las piernas pesaban en los últimos kilómetros. “Los últimos cinco kilómetros se me han hecho duros, más aún después de todo el esfuerzo anterior. Mi entrenador me dijo que marcaba el mejor tiempo en la última cima y es entonces cuando me he visto ganador y solo deseaba no caerme”, afirmó.
Kämna, tiene claro en quien fijarse. “Tony Martin es el mayor espejo para mí, pero está muy, muy lejos. Ojalá en el futuro pueda ser tan bueno como él y me gustaría poder comentar con él la carrera de hoy”, confirmó.