Alexander Vinokourov ha decicido cortar por lo sano y decidió ayer tarde suspender, de manera definitiva, la actividad del filial continental de Astana, que servía de plataforma de promoción de los jóvenes valores del ciclismo kazajo. Los positivos confirmados de tres de sus integrantes, Davidenok, Okishev y el más recientes de Fedossoyev, todos por anabolizantes, han dejado tocada la imagen de la matriz World Tour y de la Federación Kazaja de Ciclismo. De esta manera, el excorredor ha decidido actuar con contundencia y pondrá en marcha una investigación para aclarar cómo se han desencadenado esta serie de escándalos, según informa EFE.
A pesar de desmarcarse por completo de la gestión del filial y separar completamente la estructura World Tour de lo sucedido en su satélite, lo cierto es que, en última instancia, ha sido la dirección del equipo principal la que ha decidido clausurar esta formación. Por otro lado, Dmitri Sedoun, su mánager hasta hoy, ejerció también de director deportivo del bloque de Vinokourov en 2014.
'Vino' insistió, como ya hiciera tras la revelación de los anteriores positivos, en su firmeza con respecto a la lucha contra el dopaje. "Los jóvenes están locos si piensan que seguimos queriendo doping en el ciclismo", afirmó ayer a la Gazzetta dello Sport. También lanzó un mensaje a la federación de su país, que ha renovado presidente en mitad de toda la polémica, con la entrada de Darkan Mangeldiev. "Se deben hacer más controles y más severos", indicó.
El equipo ha acogido, en sus tres años de vida, a promesas como Lutsenko o Ayazbayev
Astana Continental, activo desde 2012 como vivero de talento ciclista del país asiático, ha aglutinado en su seno a kazajos prometedores como Alexey Lutsenko, campeón del mundo Sub23 en aquel año, o Maxat Ayazbayev, con varias victorias en los circuitos continentales (Vuelta a Bulgaria, Trofeo Bastianelli) y que en 2015 dará el salto al primer equipo. En este último año, el ratio de triunfos repuntó con respecto a 2013, llegando a la docena. Cinco de ellos fueron logrados por los suspendidos Davidenok (4) y Okishev (1).
A pocos días del reparto definitivo de licencias profesionales para 2015, Astana ha visto peligrar su plaza World Tour por estos últimos positivos, en especial los encontrados dentro de su plantilla en Maxim y Valentin Iglinskiy el pasado mes de septiembre. A pesar de atentar gravemente contra sus propios criterios éticos y de limpieza, Vinokourov ha asegurado varias veces, en las últimas semanas, su convicción de que mantendrán la licencia WT, además de haber comparecido en la sede de la UCI para dar su versión sobre los escándalos. "Para la licencia no habrá ningún problema, ya hemos explicado todo lo que nos han pedido", reiteró.