Muchas veces, cuando las cosas no salen como a uno le gustaría, viene bien hacer un pequeño parón, descansar, tomar aire, analizar el porqué de esos resultados y buscar junto a los compañeros algunas posibles soluciones a ese mal rendimiento. Tras un periodo de malos resultados, Sven Nys ha echado el "pie a tierra" y retomará su calendario competitivo en la ciudad belga de Diegem, tras una semana completa de parón.
"Esperar más tiempo para volver a competir hubiese sido una tontería", admitió el belga, que ve como solo falta un mes para los campeonatos del mundo de Tabor (República Checa) y varios días más sin competir le hubiesen perjudicado seriamente. "Si hubiese parado también en Diegem, habría corrido el riesgo de no encontrar más el ritmo esta temporada", comentó.
Nys no se mostraba ambicioso con un posible gran resultado, sino conformista: "Todo lo que quiero es colgar la bicicleta con el sentimiento del deber cumplido. Si no vuelvo este domingo será difícil demostrar algo más durante lo que aún falta de temporada". Los entrenamientos de Nys esta semana han sido cortos y de recuperación, con dos horas como máximo, e incluso días de descanso absoluto.
El campeón nacional belga no está afrontando su mejor temporada, y tras quedar fuera de la Copa del Mundo y del Bpost Bank Trofee (después de liderarlo durante la mitad de las pruebas), el Superprestige es la única de las tres grandes competiciones que aún puede ganar, pero donde se sitúa cuarto en la general por el momento, con 60 puntos y a solo tres de los dos líderes (Pauwels y Van der Haar) y a dos del tercer clasificado, Mathieu Van der Poel.