Eva Lechner consiguió la pasada semana en Hoogerheide el primer triunfo italiano femenino de la Copa del Mundo y se postuló como una de las grandes favoritas a la victoria en el Mundial. Otras de las favoritas a la medalla de oro serían la holandesa Marianne Vos, la francesa Pauline Ferrand-Prévot, la belga Sanne Cant e incluso la checa Katerina Nash. Por España, las representantes eran Rocio Gamonal -campeona de España élite-, Aida Nuño, y Rocio del Alba García -campeona de España junior-.
Recorrido duro y exigente
Hasta 38 curvas a derechas y 33 a izquierdas tendrán que dar los ciclistas cada vuelta, en un circuito equilibrado y con zonas bastantes diferenciadas. Habitual cada año en la Copa del Mundo y acogerá por tercera vez en toda su historia el Campeonato del Mundo, situado en las parderas de las afueras de la ciudad checa, este circuito contiene curvas cerradas, curvas rápidas, largas rectas, obstáculos naturales, obstáculos artificiales, subidas, bajadas, escaleras y zonas de pateo.
Rápido y explosivo arranque
Como viene siendo habitual, la prueba femenina arrancaba de manera rápida y exigente. En las primeras curvas, la encargada de comandar el grupo cabecero era la británica Helen Wyman, mientras que por detrás la italiana Eva Lechner se veía involucrada en una caída, por la cual tenía que ir a pie hasta la zona de boxes perdiendo así toda opción de medalla.
Buscando romper la carrera desde el principio, la francesa Lucie Chainel-Lefevre tomaba el mando seguida de cerca por Helen Wyman, Marianne Vos, Sanne Cant y Pauline Ferrand-Prévot. La mala suerte se aliaría con la española Aida Nuño, que se iba al suelo aunque levántandose sin problema alguno.
Dos francesas en cabeza
En el primer paso por Lucie Chainel-Lefevre contaba con siete segundos de ventaja sobre sus perseguidoras, aunque en los primeros compases de la siguiente vuelta su compatriota Pauline Ferrand Prevot le daba alcance. Por detrás, las españolas Rocio Gamonal y Rocío del Alba García cruzaban en decimocuarta y decimoquinta posición la primera vuelta.
Poco tardaría en pasar a la primera posición Ferrand-Prévot, que dejaría de rueda a su compatriota para ver como escasos instantes después la que le hacía compañía en cabeza era Sanne Cant. La ventaja de la francesa y la belga se vería recortado al paso por la línea de meta, ya que con ellas contactaban Chainel-Lefevre, Helen Wyman, Cant, Vos y Harris.
Ferrand-Prévot y Cant se quedan solas
Nada más arrancar el tercer giro, Pauline Ferrand-Prévot intentaría probar suerte en solitario, algo que poco a poco le iría dejando un margen de un par de segundos sobre su perseguidores. En el quinteto de ciclistas que llegaban por detrás destacaba una, Sanne Cant, la belga sería la encargada de atacar e irse en busca de Ferrand-Prévot, aunque al paso por meta eran seis los segundos que tenía de ventaja la francesa.
La penúltima vuelta sería en la que más fallos se verían, ya que el cansancio comenzaba a pasar factura. Pauline Ferrand-Prévot dejaría escapar su ventaja tras una caída, de la cual se levantaba con algún que otro problema, algo que propiciaría la llegada por detrás de Sanne Cant, quien no se lo pensaría y escasos metros después de contactar con la francesa le atacaría. Al paso por meta serían dos segundos los que tendría Cant sobre su perseguidora y siete sobre Marianne Vos.
Último asalto a vida o muerte entre Cant y Ferrand-Prévot
Nada más arrancar la última vuelta, Ferrand-Prévot contactaría con Cant empezando desde ese momento a varias las posiciones entre ambas. Por detrás, la luchada por la medalla de bronce estaba entre Nash y Vos, aunque dos caídas consecutivas de la primera la dejarían fuera de juego.
De la última curva salía en primera posición Pauline Ferrand-Prévot, teniendo totalmente pegada a su rueda a Sanne Cant, aunque la francesa conseguía demostrar su gran punta de velocidad para terminar imponiéndose como nueva ganador del Campeonato del Mundo de Ciclocrós en Tábor, tan sólo cuatro meses después de hacer lo propio en el Mundial de Ponferrada, de ciclismo en carretera. La medalla de bronce sería para Marianne Vos.
En cuanto a las españolas, Rocío del Alba García cuajaría una excepcional actuación, ya que en su primer campeonato del mundo lograba finalizar en una meritoria 22ª posición, siendo así la primera española. Por su parte, Aida Nuño, finalizaba en la 33ª posición a 5:21 de Ferrand-Prévot. La campeona de España, Rocío Gamonal no podría finalizar la prueba al rompérsele el cambio.