Se dice que el deporte depende de las rachas. Unas veces malas y otras buenas. Que se lo digan a Joaquím Rodríguez. El catalán ha pasado de estar más de un año sin ganar a lograr dos victorias consecutivas en la Itzulia. Ayer ganó en Zumarraga, donde ya había ganado en 2011. Hoy en Arrate, donde había sido tres veces segundo. Por eso, éste el éxito ha sido especial para el corredor catalán. Todo en una jornada en la que no se ha despejado ninguna incógnita de cara a la clasificación general, liderada por segundo día consecutivo por Sergio Luís Henao.
La cuarta etapa de la 55 edición de la Vuelta al País Vasco era la jornada reina. Con salida en Zumarraga y final en el santuario de Arrate, era el día propicio para intentar romper definitivamente la carrera de cara a la contrarreloj del sábado. Para ello los favoritos disponían de siete puertos distribuidos en 162 kilómetros.
Se formó una escapada de 14 corredores, pero no prospero Ante la dureza de la etapa y la dificultad para controlarla, el primer intento de fuga no tardó en llegar. Lo intentaron Amets Txurruka, Valerio Agnoli y Oliver Zaugg, pero su no prosperó. Después serían hasta catorce corredores los que tratarían de irse del grupo de favoritos. En ese corte, que llegó a tener una renta máxima de 52 segundos, entraron Rohan Dennis, Lieuwe Westra, Michal Golas, Pieter Weening, Phillippe Gilbert, Gorka Izaguirre, Bon Jungels, Maxime Monfort, Matteo Bono, Thomas Danielson, Romain Hardy, Chris Anker Sorensen, Fabio Felline y Yohan Baggot. Esta fuga numerosa, creada a punto de empezar la subida a Karabieta tampoco prosperó.
El tercer intento, la escapada buena
Lo que sí triunfó fue el tercer intento de escapada. En las rampas finales de Karabieta se marcharon por delante Tony Martin, Peio Bilbao, Thomas Danielson y Romain Hardy. Poco a poco fueron cogiendo ventaja hasta acabar formando la fuga buena del día, aunque su ventaja en ningún momento fue excesiva, rondando siempre el minuto y medio, gracias al trabajo de Movistar que había tomado la decisión de endurecer la etapa desde el principio de cara a trata de facilitar a Nairo Quintana lo que sería su segunda victoria en Arrate.
El primero en caer de la fuga fue el corredor del Cofidís. Romain Hardy no puedo aguantar el ritmo de sus compañeros y se quedó cortado en plena subida a Ixua. Tampoco aguantar Peio Bilbao, quién perdería contacto kilómetros después cuando atacó Tony Martin. Las rampas de Ixua dejaron la fuga de cuatro en una de dos. Por detrás el equipo de Nairo Quintana estaba provocando una auténtica escabechina, rompiendo el pelotón en numerosos grupos.
El dúo cabecero seguía rodando fuerte, mientras que en el grupo Sky había tomado el relevo de Movistar, propiciando que la cabeza de carrera tuviese una ventaja de más de dos minutos por primera vez en todo el día, diferencia que se fue estabilizando sobre los dos minutos cuando volvió a coger la responsabilidad el equipo telefónico.
Tom Danielson y Tony Martin, los fugados del día Pese al buen ritmo de los dos de cabeza, el pelotón estaba más fuerte. La diferencia se iba reduciendo. Tom Danielson coronó en cabeza el alto de Santa Eufemia, seguido en todo momento con Tony Martin. La ventaja se había reducido hasta 1:49 en ese punto, reduciéndose poco a poco según avanzaban los kilómetros y se acercaban los kílometros clave del día.
Entonces llegó el primer gran arreón de la jornada. Lampre puso un ritmo duro en cabeza de pelotón, lo que propició que corredores como Mikel Nieve o Frank Schleck quedasen rezagados en la subida a alto de San Migue y condenó a la fuga. También perdió contacto Joaquím Rodríguez, quien sufrió problemas mecánicos, si bien logró reincorporarse al grupo ayudado por Dani Moreno. Tras coronar el puerto, la ventaja de los Martin y Danielson se había reducido a veinte segundos. Visto eso el alemán de Ettix opto por moverse y abandonar a su compañero de escapada, aunque el americano acabó llegando de nuevo a su rueda.
Final al srprint
Con las primeras rampas de Arrate llegó el final de la aventura de los dos fugados. Los favoritos se iban a jugar la victoria de esta cuarta etapa entre ellos. El primero en poner un ritmo fuerte en la subida final fue OricaGreenEdge. Ya lo avisó Neil Stephens antes de salir el primer día, los australianos habían venido aquí a por la general, y así lo demostraron desde las primeras rampas. Pero rápidamente Movistar volvió a tomar el relevo.
'Purito' ganó al sprint Ya en plena subida a Arrate comenzaron las hostilidades. El primer corte lo formaron Luís León Sánchez, Ilnur Zakarin y Ion Izaguirre. El murciano se cortó primero, después lo hizo el de Movistar, quedándose el ruso, revelación de esta Itzulia, en cabeza de carrera. Pero por detrás los favoritos no estaban dispuestos a regalar la victoria. Salió Henao, líder que lo intentó antes que el resto de corredores que optaban a la victoria final. Por detrás el resto de favoritos, a excepción de Michal Kwiatkowski ya cortado, intentaban darle fuga. Lo lograron. El final sería al sprint. Doce corredores se la iban a jugar. Y allí, en línea de meta se volvió a imponer Joaquím Rodríguez. Venía a la Itzulia tras un año sin ganar. De momento a falta de dos etapas, el catalán ha logrado ya dos victorias, siendo la de su primera en Arrate.
Sin cambios en la general
Lo avisaba ayer Sergio Luís Henao, “Arrate no suele ser determinante para la clasificación”. Razón tenía el colombiano. Pese a la dureza con la que se rodó, hubo cambios en la general. Con Henao, líder, ‘Purito’ y Quintana con el mismo tiempo, mañana tendrá que ser el día para romper la carrera. En caso de no ser así, la crono decidirá el ganador de esta 55 edición de la Vuelta al País Vasco.