De Utrecht a París, pasando por Bélgica y los cuatro puntos cardinales de la geografía francesa, siguiendo el sentido contrario a las agujas del reloj. Nueve finales en alto, dos contrarrelojes, siete etapas llanas y tres de media montaña son el menú de este 2015 en la ronda gala.
1. Sábado 4 de julio. Utrecht – Utrecht. 13,8 km. CRI
La 102ª edición del Tour de Francia arrancará en Holanda. La última vez que lo hizo fue en 2010, con un prólogo de 8,9 km., con victoria para Fabian Cancellara. Esta vez el 'prólogo' no lo es tal, ya que, según la actual normativa de la UCI, más allá de los ocho kilómetros de distancia se considera contrarreloj individual a todos los efectos, sin posibilidad de repesca ante hipotéticos fuera de control. En esta primera jornada se comenzarán a percibir los diferentes estados de forma de los favoritos.
2. Domingo 5 de julio. Utrecht - Zélande. 166 km. Llana
Etapa llana Tour al uso, pero con las peculiaridades que emanan de las verdes praderas holandesas. El viento, el alto ritmo del pelotón y el siempre presente riesgo de caídas obligará a trabajar a destajo a los gregarios para proteger a sus líderes. No habrá momento para la calma, sobre todo en los kilómetros finales. Previsible resolución al sprint.
3. Lunes 6 de julio. Amberes – Huy. 159,5 km. Llana (final en alto)
La comitiva bajará este día a Bélgica, a tierra de clásicas. Las Ardenas valonas albergarán una jornada nerviosa, donde clasicómanos y cazarrecompensas pasarán a primer plano y donde algún que otro jefe de filas podrá perder algunos segundos valiosos, si se plantea una subida dura al célebre muro de Huy, el final clásico de la Flecha Valona.
4. Martes 7 de julio. Seraing – Cambrai. 223,5 km. Llana (pavés)
La carrera se complica y de qué manera a partir del cuarto día. ASO, siendo consciente de la expectación y espectáculo que generó en la pasada edición la jornada sobre el pavés de París-Roubaix, ha decidido repetir experiencia llevando la carrera a unos sectores (siete en total) utilizados en la infernal clásica, pero menos explotados y duros que los típicos Carrefour de l'Arbre o Mons-en-Pévele.
El pavés, las cotas y el viento harán más llevadera para el espectador la primera semana
5. Miércoles 8 de julio. Arras – Amiens. 189,5 km. Llana
Nueva jornada llana atravesando el norte de Francia, en dirección hacia el sur. Segunda oportunidad para los grandes esprínters, aunque el trazado, jalonada de pequeños repechos, dará alas a rodadores y aventureros. Los corredores deberán hacer frente al viento y a la consiguiente formación de abanicos.
6. Jueves 9 de julio. Abbeville – Le Havre. 191,5 km. Llana
La incursión en Normandía trae consigo la aparición de cotas, que con el previsible mal tiempo y lluvia típicas de la región francesa proporcionará una jornada en teoría tranquila, pero plagada de trampas y nerviosismo. De complicarse la climatología este día, el riesgo de caídas se multiplica exponencialmente. Perfil propicio para la formación de cortes, aunque el sprint puede imponerse en la llegada, que pica hacia arriba.
7. Viernes 10 de julio. Livarot – Fougères. 190,5 km. Llana
Perfil más liviano que el anterior, camino de la bella ciudad medieval de Fougères, en plena Bretaña francesa. El viento y las inclemencias meteorológicas añadirán la salsa a una etapa previsiblemente anodina y con teórica resolución al sprint. Prolegómeno suave de una de las jornadas más atractivas de la primera semana.
8. Sábado 11 de julio. Rennes - Mûr-de-Bretagne. 181,5 km. Llana (final en alto)
Con sólo una visita en el año 2011, el Muro de Bretaña ha irrumpido con fuerza en el imaginario colectivo del actual Tour de Francia, convirtiéndose en un final ideal de la primera semana para ver un primer tanteo entre los favoritos. La rampa, de 2 km al 7% de media con picos del 10, es terreno para ciclistas explosivos, rápidos y con punch final. Antes del muro, sólo una cota de cuarta categoría intrascendente romperá la monotonía del llano.
Solo 28 km. de contrarreloj por equipos harán una primera criba antes del primer bloque montañoso en los Pirineos
9. Domingo 12 de julio. Vannes – Plumelec. 28 km. CRE
Segunda y última contrarreloj (por equipos) de este Tour 2015, antes de la batería montañosa de la segunda y tercera semana. Última oportunidad para que los corredores más rodadores, llámense Martin, Kwiatkowski, Dumoulin o los líderes Froome o Talansky aprovechen todo el potencial de sus equipos para obtener un colchón, por pequeño que sea, ante los grandes escaladores. El trazado posee varios repechos, uno de ellos antes de la meta.
LUNES 13 DE JULIO. DESCANSO
10. Martes 14 de julio. Tarbes – La Pierre-Saint-Martin. 167 km. Alta montaña
Día de la Fiesta Nacional francesa. Primera etapa pirenaica y primera llegada en alto seria de este Tour de Francia 2015. La Pierre-Saint-Martin se estrena como meta del Tour. Un atractivo puerto, continuación del Col de Soudet, de 15 km. Al 7,4% de pendiente media. Una subida seria, que servirá para el primer choque entre los candidatos al maillot amarillo. Sólo se echa en falta algún puerto de paso más duro. Comienza la verdadera batalla.
11. Miércoles 15 de julio. Pau – Cauterets. 188 km. Alta montaña
En la segunda jornada de Pirineos, el clásico encadenado Aspin-Tourmalet, este último con un papel más decisivo que en anteriores ediciones, marcará el devenir de la etapa. El final más suave en Cuaterets obliga prácticamente a atacar en las rampas del coloso de colosos. Difícil pronosticar un favorito. Territorio de grandes gestas ciclistas.
12. Jueves 16 de julio. Lannemezan – Plateau de Beille. 195 km. Alta montaña
Última jornada del tríptico pirenaico. Otro final en alto, esta vez en la estación invernal de Plateau de Beille, que alberga ganadores de todo tipo: desde Marco Pantani, que posee el récord de ascensión del Tour de 1998, a Jelle Vanendert (2011) pasando por Lance Armstrong (2002 y 2004) y Alberto Contador (2007). El Plateau viene precedido de puertos como Portet d'Aspet, Core y Lers.
13. Viernes 17 de julio. Muret – Rodez. 198,5 km. Llana
Etapa de transición ideal para la formación de fugas, que en este perfil quebrado, sobre todo en sus últimos 70 km., presenta cuatro cotas, tres puntuables. Será complicado que los bloques de esprínters tengan fuerzas para controlar las previsibles escaramuzas, tras pasar un duro tríptico pirenaico.
14. Sábado 18 de julio. Rodez – Mende. 178 km. Media montaña
El macizo central apenas se roza, y ya van unas cuantas ediciones, en este Tour de Francia. Sólo esta meta en Mende, precedida de las cotas de la Sauveterre (2ª), Chabrits (4ª) y la subida final a la Croix Neuve (2ª, 3 km. al 10%), generarán un final altamente atractivo, ideal para cortes y emboscadas, con una subida definitiva corta pero muy dura. Aquí en Mende ha logrado su única victoria en el Tour Joaquim Rodríguez, en la edición de 2010.
15. Domingo 19 de julio. Mende – Valence. 183 km. Media montaña
Nueva etapa de transición entre bloques, acercándose cada vez más a los Alpes. Tres cotas jalonadas en los primeros 80 km de carrera y la presencia del Col de L'Escrinet a 63 km. de la llegada son el acicate perfecto para que la fuga gane ventaja con respecto al grupo y se logre romper el sprint. Las fuerzas ya no están tan intactas tras 15 días de competición y el fondo comenzará a ser un factor decisivo.
16. Lunes 20 de julio. Bourg-de-Péage – Gap. 201 km. Media montaña
La ciudad de Gap recibe de nuevo a los corredores a las puertas de la traca final en los Alpes. En la segunda y última jornada de este Tour de más de 200 km., el Col de Manse (9 km. al 5,6%), situado a 12 km. de la meta, es un escollo ideal para que alguno de los favoritos sorprenda a sus rivales antes de adentrarse en los designios de la alta montaña. El descenso anterior a la llegada obligará a hacer uso de una dosis extra de habilidad y técnica para lograr el triunfo.
MARTES 21 DE JULIO. DESCANSO
17. Miércoles 22 julio. Digne-les-Bains – Pra Loup. 161 km. Alta montaña
ASO rescata el mítico y olvidado final en la estación de esquí de Pra Loup, cuarenta años después de que Eddy Merckx sufriera en sus rampas para acabar enterrando sus opciones de ganar un sexto Tour. El encadenado Allos-Pra Loup, conectado mediante una bajada espectacular, rápida y altamente técnica, ya se incluyó en el pasado Dauphiné, con victoria del joven francés Romain Bardet. Pero aquí, en la Grande Boucle y tras dos semanas de carrera, el desenlace puede ser muy diferente.
La vuelta de Pra Loup como final de etapa, el final en La Toussuire y el encadenado Galibier-Alpe d'Huez se erigen como puntos clave del bloque alpino
18. Jueves 23 de julio. Gap – Saint-Jean-de-Maurienne. 186,5 km. Alta montaña
El pelotón se adentra en el corazón de los Alpes para jugarse definitivamente el triunfo. Difícil pronosticar lo que sucederá en este duro perfil, con siete puertos puntuables y dos últimas subidas de alto standing. La primera, el célebre Col du Glandon (21,7 km. al 5,1%) y la segunda, la inédita y visual Lacets de Montvernier (3,4 km al 8,2%). ¿Fuga o aspirantes al amarillo?
19. Viernes 24 de julio. Saint-Jean-de-Maurienne – La Toussuire. 138 km. Alta montaña ETAPA REINA
A pesar de su escaso kilometraje, esta 19ª etapa del Tour posee todos los condicionantes para ser proclamada jornada reina de esta edición. Los puertos, Chaussy (1ª), Croix de Fer (HC), Mollard (2ª) y final en La Toussuire (1ª), están encadenados de manera clara para que este perfil esté mercado en rojo en el calendario de los ciclistas. Quedan solo 48 horas para llegar a París y la carrera, si aún no está decidida, deben finiquitarse en las rampas de alguno de estos colosos.
20. Sábado 25 de julio. Modane Valfréjus – Alpe d'Huez. 110,5 km. Alta montaña
Fin de fiesta alpino en la subida posiblemente más mediática de la ronda francesa. Alpe d'Huez vuelve a ser el escenario escogido por ASO para la resolución definitiva de la carrera, prescindiendo de la contrarreloj, al igual que hiciera en el Tour de 2011. Ese año, un suicida Alberto Contador se inmoló a partir del Télégraphe, esta vez sustituido por Croix de Fer debido al peligro de derrumbamientos, buscando dar un vuelco definitivo a la clasificación general para ganar ese Tour. Finalmente, se le hizo largo Alpe d'Huez y sucumbió con honores, circunstancia que fue aprovechada por el francés Pierre Rolland para imponerse en una jornada inolvidable.
21. Domingo 26 de julio. Sèvres – Paris. 109 km. Llana
Y llega el paseo triunfal en los Campos Elíseos. La grandiosa avenida parisina recibirá al nuevo triunfador del Tour, agasajado entre vítores, premios y champán. El disputado sprint final de esta última jornada será aprovechado más que nunca por los velocistas, que en esta edición tan montañosa apenas han tenido oportunidad de sumar trofeo.