El Deportivo aterrizaba en Murcia con el objetivo de seguir sumando puntos y sacudirse los fantasmas del partido de la primera vuelta contra el conjunto pimentonero. Con la ya sabida baja de Juan Domínguez por la expulsión en el partido ante el Sabadell, Fernando Vázquez debía recomponer las piezas del puzzle para evitar que el equipo desentonara con la baja del de Pontedeume. Sin embargo, el conjunto dirigido por Julio Velázquez no iba a dejar que el flamante líder de la Liga Adelante se paseara en tierras murcianas. El conjunto grana saltó al terreno de juego enchufado y espoleado por enmendar una racha de seis partidos consecutivos sin conocer la victoria. Cuatro córneres casi consecutivos en los primeros diez minutos – uno de ellos a punto de entrar directamente a portería – pusieron en tela de juicio el papel de favorito del Deportivo.
'Casto' y seguro
Los minutos corrían y el acoso del Real Murcia se vio reducido por la pausa del Deportivo. Salomâo y Luisinho – los más destacados del partido ante el Sabadell – se enfundaron el mono de trabajo e inquietaban la zaga pimentonera. Tal es así, que de las botas del propio Salomâo vinieron las mejores ocasiones del conjunto blanquiazul en todo el encuentro. Dos disparos, duros y por alto, fueron detenidos, con severa dificultad, por el meta Casto, ex bético. El joven luso, Salomâo, no daba crédito al ver la actuación de su compañero de profesión. El guardameta del Murcia salvaba los muebles a un conjunto que varios minutos después iba a sacar petróleo de su especialidad, el balón parado. Una vez más – y ya se convierten en innumerables ocasiones – iba a ser el verdugo del Deportivo. Un córner botado por el Murcia, es rematado por Dorca, aprovechando una mala salida de Fabricio. Al filo del descanso, un gol de esos que los ilustres llaman ‘psicológicos’, y una vez más materializado por el mismo jugador, Dorca.
El 'Profe' no dio con la tecla
La segunda parte iba a trascurrir por unos derroteros que nadie se hubiera esperado. La ilusión de ver a un Deportivo aguerrido y combativo se vio esfumada con la inoperancia, lentitud y desaparición de jugadores referencia en la plantilla. Jugadores llamados a sellar el ascenso para el conjunto blanquiazul se esfumaron por completo en la segunda mitad. Todo ello sumado a la imposibilidad de alinear a Juan Domínguez hacía presagiar una nueva derrota y la pérdida del liderato de la división. Ni con la entrada de Toché, ni jugando con dos puntas, ni dando entrada a Lopo y Sissoko –sustituciones muy poco comprendidas por la masa deportivista – el Deportivo fue capaz de crear una ocasión de peligro. Un día más, la dupla portuguesa formada por Salomâo y Luisinho fue la más destacada de un partido que ninguno de los dos conjuntos debió ganar. El Murcia debido al poco juego mostrado, esperando al Deportivo en su cancha. Y el Deportivo por no mostrar la agresividad de un club que quiere volver a vivir grandes momentos en Primera División.
Caras tristes y mucho tiempo para reflexionar en la vuelta a Coruña, sabiendo que la próxima semana tocará bailar con la más ‘fea’. El Sporting de Gijón no pudo pasar del empate ante la Ponferradina en el estadio de El Molinón, y se encuentran terceros tras la victoria del Eibar, que le aúpa a la primera plaza. Sin duda, los de Sandoval vendrán con el cuchillo entre los diente a Riazor, donde se les espera con ansias de ‘Vendetta'.