Análisis: ilusión inevitable

El Dépor consiguió frente al Espanyol su segunda victoria consecutiva, la primera en Riazor. Y vaya manera de hacerlo.

Análisis: ilusión inevitable
Imagen: LFP.
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Por Álex Varela

Riazor ni recordaba lo que era una tarde normal de fiesta, sin nervios, sin transistores. En definitiva, de fútbol y de alegría. El Dépor logró frente al Espanyol algo más que una victoria, consiguió que un estadio anteriormente abonado al sufrimiento y a los intentos de conseguir metas (con finales tristes) volviera a vivir algo tan simple como la comunión con el equipo, los cánticos retumbantes, la superioridad manifiesta de los once blanquiazules ante un equipo parejo en nivel... Incluso se volvió a hacer la ola, aunque bien es cierto que se notó la falta de práctica. El Dépor actualmente significa optimismo y positividad, algo hasta hace poco impensable.

En Europa provisional con 11 de 18 puntos

Sí, solo van seis jornadas de competición (por ello el "provisional"), pero los resultados y el buen hacer de este Dépor hacen ilusionar a la afición no con una fecha 38 en puestos UEFA, pero si al menos con la posibilidad de luchar por ello en caso de continuar estas grandes actuaciones y sensaciones. La diferencia entre la temporada 14/15 y la actual es abismal: equipo trabajado desde el minuto uno con un entrenador competente y conocedor de la casa, abandono de la política de cesiones múltiples, apuesta por la experiencia y por los fichajes de coste cero de jugadores curtidos en la categoría...

Si hace pocos meses a alguien se le hubiera ocurrido contar todo esto, seguramente se le habría tachado de loco. Es lo que tiene haber vivido cinco años con muchos más fracasos que éxitos, con más tristezas que alegrías. Es cierto que esta temporada seguramente llegarán rachas peores, pero después de haber aguantado todo aquello el deportivismo merece disfrutar e ilusionarse por una vez. Los seis partidos con tres victorias, dos empates (uno en Mestalla) y una sola derrota invitan claramente a ello.

Lucas & Luis S.A.

Parece que estos dos llevan jugando juntos durante años de lo bien que se asocian. El gaditano y el coruñés son ahora mismo los grandes generadores de peligro del Dépor, uno desde la segunda línea y otro en su nuevo puesto de delantero centro. Juntos llevan ya seis goles en seis partidos, una cifra nada desdeñable, por no decir que extraordinaria para un equipo de nivel medio en el que lograr efectividad de cara a gol significa algo muy poco menos importante que la vida.

Lucas Pérez, que volvió a completar un partido espectacular, se erige a cada jornada que pasa como el jugador más importante de la plantilla y justificando el desembolso económico que realizó el club para hacerle regresar a Coruña; mientras que Luis Alberto vive actualmente un momento dulce tras dos temporadas con poca participación en sus respectivos clubes. ¿Seguirá dando sus frutos esta recientemente creada sociedad?

Rotaciones con éxito

Lograr dos victorias en una semana con tres partidos y estando al frente de un equipo inicialmente pensado para la salvación es de mérito. Parte de ese éxito se ha basado en el buen hacer de Víctor con las rotaciones, movimientos imprescindibles para evitar sobrecargar a ciertos jugadores. El del Benito Villamarín y el del Espanyol en Riazor fueron los partidos elegidos por el madrileño para realizar estas apuestas, y no pudieron tener mejor resultado: 1-2 y 3-0.

Contra el Betis, la revolución fue notable: Lucas Pérez, Celso Borges y Luis Alberto, tres de las piezas angulares del equipo, no formaron parte de un once titular en el que se incluyó a jugadores como Fede Cartabia (autor de un golazo) o Juan Domínguez; y en el triunfo de hace pocos días en Riazor gozaron de minutos Oriol Riera, Laure Sanabria y Álex Bergantiños (que debutaba esta temporada), siendo estos dos los sustitutos de Pedro Mosquera y Fernando Navarro, que hasta el momento de las permutas habían jugado todo durante los tres choques de la semana. Con este dulce precedente, no sería de extrañar que Víctor apostara de nuevo por esto en futuros casos similares.