El Real Oviedo inició este domingo la temporada con la vitola de gran favorito en el Grupo I y comenzaba su andadura frente a su gran rival: el Sporting B. Varios eran los años en los que el filial gijonés conseguía hincar el diente a los carbayones, pero esta vez no fue así. La victoria cayó de lado oventense y con este gol, el mejor de la jornada 1, pusieron tierra de por medio.
Miguel Linares firmaba el 2-0 tras una fenomenal asistencia de Héctor Font. El valenciano realizó un maravilloso control orientado de tacón con un balón bombeado que parecía difícil de domar. El mediapunta carbayón amansó a esa bestia disfrazada de balón y dejó una obra de arte de la que pudieron disfrutar los más de 10.000 espectadores que se dieron cita en el Carlos Tartiere.