La calidad de Javi López decide en el Escartín

El CD Guadalajara consiguió mantenerse invicto en su estadio tras imponerse por un ajustado marcador al Sestao River, equipo que no conocía la derrota hasta esta jornada, en un partido donde los locales llevaron el peso del juego, gozaron de más y mejores ocasiones, pero en el que sufrieron para conseguir los tres puntos ante un conjunto vizcaíno que no se dio por vencido, ni siquiera tras quedar en inferioridad  y en desventaja en el tramo final del encuentro.

Salieron de inicio los que entrena Salvachúa con novedades en la parcela defensiva, donde Gonzalo Verdú reemplazaba al canterano Caballero, y en la zona ancha, en la que el hispano-marroquí Rida formaba junto a Chema Mato en detrimiento de Borja Yebra. Por su parte, Ángel Viadero, técnico visitante, recuperaba a David Medina en el doble pivote, pero optaba por mantener a Eneko Rubio, adelantándolo a la mediapunta en lugar del habitual titular hasta ahora Yacine.

Arroyo consigue batir a Raúl

Aunque el River se mostraba bien posicionado sobre el césped y disponía de la primera ocasión en un cabezazo desviado de Jaio al saque de una falta, pronto sería el equipo local el que tomaría el mando del partido, acumulando sucesivas ocasiones de peligro ante la meta bien defendida por el cancerbero visitante Raúl Domínguez. Primero sería con un disparo del delantero Marc Mas, que engatillaba tal como le venía un balón en el área, al que le seguirían sucesivos disparon de Rubén Arroyo o de Chema Mato que se iban fuera del marco sestaoarra.

Apenas un centrochut envenenado del lateral Sergio Rodríguez fue la respuesta del Sestao a las acometidas del equipo local, que, a pesar de la posición retrasada de Chema Mato, creaba mucho peligro a través de la línea de mediapuntas formada por Rubén Arroyo en el centro y Javi López y Abel Molinero en las alas. Raúl Domínguez conseguía evitar el primero de la mañana saliendo a tapar un disparo a bocajarro de Marc Mas, que desaprovechaba en inmejorable posición el servicio de su compañero Javi López, que en el consiguiente rechace tampoco podía superar al cancerbero del Sestao, Sin embargo, unos minutos después, una arrancada de Molinero avanzando sin oposición desde el mediocampo, terminaría en asistencia para Arroyo, que en improvisada maniobra de delantero centro controlaba un balón en el área para fusilar con un disparo inapelable al guardameta visitante.

Se cumplía la media hora de juego y el gol recompensaba el creciente dominio del equipo local, que gozaría de dos oportunidades más a balón parado: la primera con una fallida volea de Javi López en el segundo palo, y la segunda en un cabezazo de Rida. No obstante, la última jugada del primer tiempo provocó el susto en la grada del Escartín, cuando Lafuente, en buena posición, lanzaba un zurdazo por encima del larguero tras un balón peinado por la cabeza del combativo Jito.

La ocasión verdinegra pareció ser un aviso de intenciones del equipo visitante, que tras el descanso salió mejor que el cuadro local, adelantando líneas y presionando mejor la salida de balón de los centrocampistas morados. Y así se certificaría con el gol del empate, que llegaría tras un centro de Sergio Rodríguez desde la banda izquierda para Lafuente; el menudo jugador vizcaíno asistía a su compañero Riki que enganchaba de primeras con su pierna derecha un balón que tras rozar en un defensa local se colaba en las mallas de Toni Lechuga. Eran los mejores minutos del equipo de Ángel Viadero, que gozó de otra buena llegada por la banda del propio Riki que ponía un centro al que Jito no llegaba por poco.

Expulsión y golazo

Sin embargo, el Dépor supo sobreponerse al marcador, ya con el oxígeno de Yebra en la medular, y volvía a crear peligro, esta vez a balón parado. Primero con un testarazo de Chema Mato que se encontraba con el poste, y poco después con otro de Verdú, tras saque de esquina, y que se iba fuera por poco. Viadero intentaba dar réplica con la entrada de Khous en banda derecha para dar más velocidad a las contras visitantes, pero se encontraba con el infortunio de la expulsión por una rigurosa segunda amonestación a su central Egoitz Jaio, momentos antes de su programada susttución.

El Sestao pagaba los riesgos asumidos con su línea defensiva adelantada, y poco después recibía el mazazo definitivo tras otra amonestación a un zaguero, en este caso Resines. La falta, a unos 30 metros de la portería vasca, era ejecutada de forma magistral por el malagueño Javi López, con una balón fuerte y colocado a media altura, junto al palo derecho de un Raúl Domínguez que se estiraba en vano. 

Faltaban apenas 10 minutos más el descuento, y, a pesar de la inferioridad, Viadero se la jugaría con el tercer y último cambio, dando entrada a Yanis por el defensa Cacho para acabar el partido jugando con tres defensas, y acechar a su oponente a base de balones que siempre buscaban la referencia arriba del veterano Jito. Respetuoso con su adversario el equipo local dio un paso atrás, y apenas volvió a asomarse por los dominios de Domínguez más que en un disparo de Manzano.

El River en cambio gozó de su última oportunidad ya en el tiempo de descuento cuando, tras un derribo a Yanis al filo del área, Jito Silvestre ejecutaba un libre directo que se marchaba por poco al lado derecho de la meta de Lechuga.

Era la última ocasión de un partido que mantiene al equipo local como segundo clasificado del grupo, con 12 puntos, a uno del líder, al tiempo que hace retroceder al Sestao River al séptimo puesto, con 8 puntos,a dos de los puestos de playoffs. La próxima semana, otro equipo castellano-manchego, el Toledo, rendirá visita a Las Llanas, mientras que el Guadalajara afrontará viaje a San Sebastián para medirse a la Real Sociedad B, con el objetivo de recuperar el liderato que actualmente ostenta el Barakaldo

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