Desde que el Coruxo dio el salto a la categoría de bronce tras pasar tres eliminatorias -todas ellas con factor campo en contra-, se sufrió para conseguir la permanencia en el segundo año en la categoría. De la mano de Josiño Abalde, no se confirmó hasta la última jornada. El ascenso en La Roda (algo sin parangón en la historia verde) puede acercarse a la comparación de la casi milagrosa salvación de la temporada pasada.
Se puede catalogar de milagro en cuanto a números se refiere, ya que en la primera vuelta se consiguieron 16 puntos. Tras un proyecto fallido a las primeras de cambio capitaneado por Antonio Gómez, se apostó por Rafa Sáez que, en un inicio, no cuajó del todo. La directiva hizo un esfuerzo por traer jugadores con trayectorias dilatadas en la categoría, como Mateo, Moscardó, etc. Cuando en un Coruxo 0-1 Tropezón las caras eran largas y la gente se aferraba al famoso dicho de que ''la esperanza es lo último que se pierde''. Entonces, se visitó Las Gaunas frente a un rival directo. Las cuentas de la lechera no saldrían si no se ganaba, y terminó de cortase de raíz cualquier tipo de ilusión con un 1-0 en contra.
El milagro de cosechar 10 de los últimos 12 puntos posibles
En ese momento ni los más optimistas del lugar creían lo que estaba a punto de ocurrir, el equipo cosechó 10 de 12 puntos posibles, ganando a tres de los equipos más fuertes del Grupo por aquel entonces: Oviedo, Ourense y Marino de Luanco. Estas fueron las víctimas de los vigueses en su milagro por la salvación.
Frente al Real Oviedo emergió en un segundo plano la figura del coruñés Rafa Mella, autor de uno de los tres goles endosados al Oviedo en O Vao. Casi sin hacer ruido, el destino le tenía preparado una sorpresa. Cuentan que el perder o quedarse en una categoría supone el encuadre de presupuestos, el aumento/disminución de la masa social, y quizás, a día de hoy, nadie sea consciente de lo ocurrido hace ya algo más de 5 meses.
Rafa Mella, héroe en el Reino de León
El penúltimo partido de esa temporada, el calendario hacía desplazar a los pupilos de Rafa Sáez al Reino de León a enfrentarse a la Cultural Leonesa, ya salvada. Los vigueses serían testigos en primera persona de la celebración leonesa ante la afición por haber mantenido la categoría, aunque a pesar de ello, el Coruxo no iba allí de comparsa. En ese encuentro, las cosas pintaban bien cuando a los 13 minutos Rafa Mella hacía el primero, poco después y lejos de ser una fiesta el veterano Diego Torres ponía de nuevo las tablas y si cabe aumentar el nerviosismo verde. No tardaron en reaccionar los de Sáez y de nuevo un Rafa Mella que no se prodigó en la faceta goleadora haría el doblete, seguramente, mas importante de su carrera. Esa victoria daría finalmente la salvación matemática a los vigueses.
Cinco meses después, el protagonista recuerda el partido con mucha alegría, lejos de ser egoísta, su gran satisfacción fue y es más por el bloque que por él. Nos cuenta como internamente ''se sufrió mucho y se creció ante las adversidades y lograr la permanencia fue una gran satisfación''.
Este fin de semana, Rafa Mella y el Coruxo volverán a visitar el Reino de León, estadio que seguro le vendrá a la cabeza con gratos recuerdos de aquel 04/05/2014. Las circunstancias no se parecen ni en un ápice a lo que eran. Los vigueses siendo la revelación y en puestos de playoffs y los leoneses cuajando una gran temporada e instalados en la zona alta.