El ascenso meteórico que ha protagonizado Jaume Domènech es una recompensa a todo el trabajo hecho, la lucha, la entrega y el sacrificio. Ha pasado de jugar en el CD Palo de Tercera División en 2012 a ser a todos los efectos, jugador del primer equipo del Valencia CF y poder jugar con el filial.
Invicto en su paso por el CD Palo
Jaume llegó al CD Palo procedente del Villarreal CF "C" en 2012, tras varias convocatorias en la Liga Adelante con el primer filial amarillo. En el conjunto andaluz, el portero de Almenara jugó 13 partidos y acabó invicto en todos ellos. Sus buenas actuaciones en Tercera División sirvieron para que Huracán Valencia se fijara en el portero de Almenara como un buen refuerzo para su portería, y así, emigró de nuevo hacia la Comunidad Valenciana en enero de 2013 como refuerzo invernal de Huracán. Pero el veterano Paco no estaría por la labor de soltar su condición de portero titular y relegó a Jaume al banquillo sin que pudiera asentarse en la portería de Manises. El meta jugó en Huracán esa media temporada y acumuló un total de 2 partidos. Aún sin haberse asentado en la titularidad, había algo en él que llamaba la atención de su entrenador, Nico Estévez, que tras firmar por el Valencia para dirigir al Mestalla en la temporada 13/14, pidió a la directiva el fichaje de este joven portero que había tenido en Huracán.
La llegada al Valencia del Gato de Almenara
Rufete, que entonces era Mánager general de la Academia, firmó a Jaume para el filial junto con otro portero, Yeray Gómez, que llegaría en calidad de cedido procedente del RCD Mallorca "B". Jaume partía como teórico suplente ya que a Yeray se le había seguido durante toda la temporada como una opción real de futuro para la porteria del Valencia y era la apuesta de los hombres encargados de confeccionar la plantilla del filial -incluso realizó la pretemporada con el primer equipo que entrenaba Djukic-. Pero si en el futbol hay algo que no vale, son los posibles roles de los jugadores antes de verlos competir. Nico Estévez sorprendió a todos al alinear a Jaume en el primer partido de la temporada 13/14 ante L'Hospitalet y es que el de Almenara se entregaba en cada entrenamiento como si fuera el último. Se convirtió rápidamente en un líder del vestuario debido a su carácter y a su implicación. Contagiaba al equipo y eso se notaba. Pero no valen solo las ganas para jugar cada semana y Jaume se lucía partido tras partido pese a los irregulares resultados del equipo. Nico Estévez se había traído de Huracán un gran portero sin miedo a la salida en los balones aéreos, seguro bajo palos y con unos reflejos notables, faceta que rápidamente sería reconocida y que le permitió ser apodado el Gato de Almenara.
Compaginar convocatorias con el Valencia CF y momentos difíciles con el filial
Rápidamente empezó a entrenar con el primer equipo y se convirtió en un pilar fundamental del filial. La sorpresa le llegó en la jornada 6 de Liga en Primera División, cuando tuvo que ser convocado con el primer equipo para el partido frente al Granada tras caer Guaita lesionado. Él se convirtió en la alternativa en la portería a base de esfuerzo y dedicación. Jaume también fue convocado a la jornada siguiente frente al Rayo Vallecano, siendo la vez que más cerca ha estado de debutar en partido oficial con el primer equipo debido a una lesión de Diego Alves, pero el portero brasileño decidió no abandonar el campo aún estando prácticamente cojo. El Gato de Almenara fue convocado en 8 jornadas más de Liga y en 6 encuentros de Europa League, sin llegar a debutar. A tanto fue su progresión y sus buenas actuaciones, que Yeray Gómez pidió al club volver al Mallorca "B" en el mercado invernal, tras ver como no gozaba de oportunidades en Valencia.
Aún así, el portero nunca dejó de saber de dónde venía y que él pertenecía al filial valencianista, sus compañeros le necesitaban porque los resultados del Mestalla no acompañaban y el equipo se veía envuelto en rachas negativas que les hacía coquetear con los puestos de descenso. Finalmente Nico Estévez, su gran valedor, sería destituido y Curro Torres tomaría el mando de la nave valencianista. Jaume Domènech volvió a ganarse la confianza del entrenador, esta vez con otro compañero en la portería, Àlex Sánchez, procedente del Badalona. Al final de la temporada, y tras una eliminatoria del playout ante el Algeciras, el Mestalleta conseguía mantenerse en Segunda División B, con un esfuerzo titánico de todo el equipo y con Jaume como uno de los grandes artífices de la salvación -sin olvidar al killer Chumbi-, y siendo uno de los mejores jugadores del filial la temporada pasada (incluso se destapó como un gran parapenaltis).
El portero, a sus 23 años, se ganó la renovación por el Valencia hasta 2016 y formar parte de la primera plantilla valencianista a pleno derecho para la campaña 14/15, pudiendo jugar con el filial, demostrando su implicación con el club y con el proyecto. Mostrando sus ganas de seguir mejorando y aprendiendo, para llegar a conseguir aquello que a punto estuvo de hacer: debutar en partido oficial con el primer equipo del Valencia CF. Decidió rechazar propuestas para salir cedido en verano hacia Segunda División e incluso Primera, hizo toda la pretemporada con el primer equipo, ha jugado incluso por delante de Guaita mientras ha estado en pretemporada y se ha convertido en uno de los capitanes del Valencia Mestalla.
No diga ganas, ambición y talento. Diga Jaume Domènech.