Nació en Málaga en 1989 y desde pequeño supo que el fútbol era su vida. En la barriada de El Palo comenzó a dar sus primeras patadas a un balón en la playa junto a su padre y su hermano Antonio que actualmente sigue vistiendo la elástica del conjunto paleño. Mientras el mayor daba sus primeros pasos como futbolista en la cantera del Sevilla, Jona comenzó a despuntar en el equipo de su tierra.
Aquel niño de madre española y padre hondureño maravillaba a entrenadores y aficionados que se acercaban a ver el fútbol base malagueño. El sueño de ser futbolista y parecerse a sus referencias en este deporte se hacía grande a la vez que su físico y su destreza. Para muchos una delicia verle jugar, para sus rivales una pesadilla insufrible cada vez que encaraba con el punto de mira en la portería.
Jugó en su barrio en todas las categorías de fútbol 7 y fútbol 11, hasta juveniles. Posteriormente decidió probar suerte en el Dos Hermanas San Andrés e incluso en el Málaga. Su hambre por crecer y aprender no tuvo límites, su capacidad goleadora tampoco. Más de 600 goles repartidos en todos sus años no profesionales lo situaron como una de las referencias y joyas del balompié en la Costa del Sol.
Por caprichos del destino no convenció a los entrenadores del Málaga CF en División de Honor y con la mayoría de edad recién cumplida cogió las maletas rumbo a un destino en el que seguir creciendo. No le costó mucho, los grandes hablan en el campo y Jona habló marcando y marcando goles con la camiseta del CD Ourense.
Tras su fichaje por el Granada CF tuvo una experiencia fugaz en Portugal y posteriormente llegó cedido a Jaén donde dio todo por la elástica jienense.Se dejó el alma en cada partido y tras su marcha, un trozo del corazón de Jona sigue presente en las gradas de La Victoria.También un buen puñado de goles que sirvieron para que el equipo de Herrero luchase hasta el último aliento por mantener la categoría.
Este año, tras ser cedido al Cádiz e incluso vestir la camiseta de Honduras,vuelve a encontrarse con su pasado. El Palo visita Carranza y para Jona será algo más que un partido. Será un reencuentro con sí mismo y con uno de sus espejos en la vida, su hermano Antonio que vestirá la camiseta rival si unas molestias físicas se lo permiten.
Lo que es seguro es que hay una filosofía que estará presente sobre el césped de Carranza. La de saber donde vas sin olvidar de donde vienes.