El técnico argentino, Gustavo Siviero, hizo balance de sus hombres al acabar el partido. Un partido marcado más por los errores locales que los aciertos del rival, el Valencia Mestalla, que en palabras del técnico local es el filial “más adaptado y mejor de la categoría”.
El conjunto valencianista se adelantó pronto por mediación del joven Nando en el minuto diez de juego. A partir de ahí, el equipo balnquiazul fue a remolque. “Ante un equipo joven dinámico, enérgico tú tienes que intentar jugar mejor. Si te pones a luchar se te hace complicado”, afirmaba el míster del Atlético Baleares que señalaba que “lo más justo hubiese sido el empate”.
Con la derrota de este fin de semana ya son tres encuentros consecutivos perdiendo, y lo más preocupante para el preparador argentino es el no haber podido marcar en estos partidos. Concretamente desde el veintidós de febrero, los blanquiazules no han sobrepasado la línea de gol. “Después de este resultado uno lo ve todo negro. Sin duda tenemos muchas cosas para analizar pero hay un grupo comprometido”, aseguró.
Po otro lado, se le preguntó por la colocación de Malik en el centro del campo junto con el hombre de confianza de Gustavo Siviero, Francesc Fullana. Dijo que colocó al último fichaje de invierno para “tener más control del balón y que se pudiera asociar con Fullana”. No obstante, la dupla no resultó efectiva y acabó espetando que “esperaba más de ellos, quería defenderme con la pelota”.
Sin embargo, Gustavo Siviero indicó que esta competición “se resuelve en las últimas jornadas” y con encuentros “muy duros”. El próxima rival del Atlético Baleares será el Alcoyano, también lastrado por los pocos goles realizados, y el míster argentino lo tiene bien claro: “ir allí con la intención de ganar”.