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La pizarra de Pepe Calvo: a pesar de las bajas, un punto de esperanza

El Atlético Astorga salvó un punto en un partido marcado por las muchas bajas con las que afrontó el encuentro. David Uña, Ivi Vales, Adrián Rojo y Héctor Taranilla no pudieron entrar en la convocatoria por diversos motivos. Por ello, el técnico de los maragatos se vio obligado a llamar a un jugador del filial: Sergio.

La pizarra de Pepe Calvo: a pesar de las bajas, un punto de esperanza
La pizarra de Pepe Calvo: a pesar de las bajas un punto para la esperanza.
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Por Alexis Fernández Martínez

El Atlético Astorga suma un punto más en su lucha por eludir el descenso. Un punto que podría ser insuficiente, pero que tal y como se presentó el partido puede darse por bueno. Jaime Santos adelantaba a los suyos en el marcador en el último tramo de la primera mitad; marcada por el claro dominio rojiblanco. En la segunda parte cambiaría el decorado y Antonio León reestablecía las tablas en los compases iniciales de estos segundos cuarenta y cinco minutos.

Pero, sin duda, el choque estuvo marcado por las muchas bajas con las que contó Pepe Calvo. David Uña, por sanción; Ivi Vales, por problemas en el isquiotibial; Héctor Taranilla, por una infección en un ojo; además de Adrián Rojo, que fue sometido a una operación quirúrgica la pasada semana y podría perderse lo que resta de campaña. Con estas circunstancias, el preparador de Alija del Infantado se vio obligado a contar con el jugador del filial Sergio Pérez, para completar la convocatoria de dieciseis jugadores.

A priori, parecía claro que con la baja de Héctor Taranilla sería Marcos Blanco su sustituto, pero Pepe Calvo sorprendía a todos. David Bandera retrasaba su posición al doble pivote junto a Porfirio Puente, dejando a Roberto Puente -que retornaba a la titularidad después de siete meses- se colocó como segundo punta por detrás de Borjas Martín. Asier Arranz fue el elegido para sustituir al lesionado Ivi Vales; mientras que Víctor recuperó su puesto en la zaga por la sanción de David Uña.

Diferentes esquema en defensa o en ataque

En la primera mitad, el Atlético Astorga se dispuso de dos formas completamente diferentes dependiendo de si ataca o tenía que defenderse. La baja de Héctor Taranilla se dejó notar en los primeros minutos del encuentro y es que la ausencia del mediocentro leonés fue clave tanto en el trabajo defensivo como en la salida del balón. David Bandera se veía obligado a bajar a posiciones muy retrasadas para subir el balón, al mismo tiempo que tenía que aportar su trabajo en tareas defensivas; ambas cosas a las que no está demasiado acostumbrado.

El espacio dejado por ello estaba destinado a Roberto Puente, pero el ariete berciano también pagó caro la ausencia de Héctor Taranilla. En ataque, se colocaba claramente por detrás de Borjas Martín, llegando en segunda línea y teniendo varias oportunidades de disparar desde el borde del área, que no iba a aprovechar. En defensa, tenía que colocarse a la altura de David Bandera, justo por delante de su hermano, Porfirio Puente, que ante el Sporting de Gijón B se tuvo que multiplicar para parar a Tato y a Guitián.

El Atlético Astorga disponía menos del balón que en otras ocasiones en La Eragudina. El conjunto maragato trataba de crear peligro por los costados, pero se encontraba con Benito o Sergio Menéndez una y otra vez. Aunque las mejores ocasiones iban a llegar a balón parado, donde los maragatos superaban en centimetros a los pupilos de Tomás Hervás. Los saques de esquina, las faltas laterales o, incluso, los saques de esquina eran motivos suficientes para que Antonio León, Víctor y Porfirio Puente rondaran las inmediaciones de la meta de Dennis.

Pero el Sporting de Gijón B tuteó a los maragatos y en varios tramos del partido le ganaba la posesión del balón. Además de salir excepcionalmente al contraataque -conseguirían el tanto al borde del descanso gracias a una rápida transición-, los jugadores rojiblancos supieron pausar el encuentro cuando lo necesitaron; sobre todo gracias a Juan Mera, clave en la mediapunta asturiana y que no pudo ser parado por un Porfirio Puente superado por la escasa ayuda con la que contaba.

Cambio de dibujo y pronta reacción

Pepe Calvo sabía que en inferioridad debía buscar distintas fórmulas para cambiar el decorado y pronto iba a encontrar una. No sumar nada positivo podía condenarles al descenso, por lo que el preparador de Alija del Infantado colocaba a Roberto Puente junto a Borjas Martín, dejando por detrás de ellos una línea de tres jugadores formada por Diego Peláez, David Bandera y Asier Arranz. Por detrás, Porfirio Puente se quedaba como único centrocampista defensivo. El todo o la nada.

La presión se hizo notable en los primeros segundos de reanudación. Los maragatos llegaban con relativa facilidad a las inmediaciones de la meta de Dennis y dispuso de dos saques de esquina consecutivos. Precisamente, en el último de ellos iba a llegar el premio de la igualada. Asier Arranz ponía en juego el balón y en el corazón del área, y desde atrás, llegaba Antonio León para cabecear de forma inapelable el esférico al fondo de las mallas, sin que Dennis pudiera hacer nada.

El tanto iba a espolear a los maragatos mientras la 'gasolina' les duró'. Y es que en la grada corría el "run, run" pidiendo un cambio para alguno de los jugadores que empezaba a acusar el esfuerzo físico, como era el caso de Asier Arranz o Roberto Puente. Pero Llamazares, Diego Zamora y Marcos Blanco estuvieron durante toda la segunda mitad calentando en uno de los fondos junto a Jesús Rodicio; pero Pepe Calvo no decidió hacer finalmente ninguna permuta.

Esto provocó que los últimos minutos del partido fueran un absoluto correcalles. El filial del Sporting de Gijón dejaba descolgados a los cuatro jugadores ofensivos, con la intención de llevarse la victoria; mientras que el Atlético Astorga la buscó a base de balonazos al área. Pero el partido iba a 'morir' sin que ninguno de los dos equipos pudiera llevarse el triunfo; gracias en parte a los palos, que evitaron goles, tanto para los verdes, como para los rojiblancos.