Reinó la igualdad en el Viejo Nervión entre Sevilla Atlético Granada B, no solo en el juego sino finalmente también en el marcador, y ello a pesar de que el conjunto local estuvo casi todo el encuentro en ventaja gracias al tanto de Ivi a los cinco minutos. Pero no logró sentenciar y, en el descuento, llegaría el empate definitivo y que en buena medida fue el resultado más justo, ya que, sin ser un partido brillante por ninguna de las dos partes, estuvo muy nivelado en todas sus facetas.

No obstante, comenzó mucho mejor el filial hispalense, que sabía que el Cádiz había ganado en su partido del sábado y no estaba dispuesto a perder la segunda plaza del grupo. En el primer minuto ya avisaba Cotán con un disparo desde la frontal que tocaba en un defensor y salía desviado por poco. Pero no tendría ni tiempo para lamentarlo el filial porque apenas cuatro minutos llegaría el gol, en un libre directo en la parte izquierda del ataque sevillista que Ivi envió directamente a la red sin que nadie pudiese evitarlo, para poner en ventaja a los suyos.

Se le ponía muy de cara, por tanto, el partido al Sevilla Atlético, que tenía la oportunidad de hacer su futbol con la tranquilidad de ir ganando, pero nunca llegó a tener el partido totalmente bajo su dominio. Hombres como Cotán o Borja Lasso no aparecían para darle la pausa al juego que hubiese necesitado su equipo, y por ello la construcción del juego le resultaba complicada a los hombres de Diego Martínez. Además, el Granada B tampoco le pondría las cosas fáciles, siendo como es un conjunto tan físico y de tanta calidad individual, e inmediatamente reaccionó y tomó el mando del partido por unos momentos. La ocasión más clara llegó a los doce minutos, cuando una gran triangulación entre Uche Agbo, Sergi Guardiola y Wilson Cuero fue culminada con un remate de éste último desde dentro del área y que se estrelló contra la cruceta.

A partir de ahí decayó un poco la intensidad y el partido se igualó, queriendo ambos equipos controlar la posesión y el juego e intercalando llegadas que no llevaban demasiado peligro. Lo más interesante llegaba por la banda derecha del Granada B, donde el lateral derecho Corozo se hizo fuerte y sus continuas subidas al ataque generaba un tanto de incertidumbre en el área rival. El filial nazarí lo intentaba con sendos disparos desde lejos de Guardiola Clifford, mientras que el Sevilla Atlético avisaba con un remate de Diego en una falta botada por Curro. Terminaba la primera parte con dos aproximaciones más del filial nazarí, con un buen centro hacia Wilson Cuero que el colombiano no acertó a rematar con precisión al estar encimado por un defensa, y un centro-chut de Navarrete que atrapaba sin demasiados apuros el meta local José Antonio.

La segunda mitad arrancó con un conjunto visitante que salió en tromba buscando sorprender en los compases iniciales. En esas, el central Morante no logra enganchar un balón en el área cuando se quedó solo y en una posición idónea para marcar, y el lateral zurdo Brian metió algún que otro centro peligroso que la defensa sevillista se encargó de despejar.

Pero a los diez minutos del segundo tiempo, aproximadamente, el juego se enfriaba con muchas faltas en el centro del campo, parándose el juego casi continuamente, y el colegiado, el señor Pulido Santana, bien pudo haber expulsado al visitante Uche, al que mostró la primera amarilla cuando el equipo local reclamaba que ya debía haber visto la segunda. Por si fuera poco, una patada del mediocentro nigeriano sin balón a Tena quizá mereció la segunda definitivamente, pero el árbitro canario no castigó al futbolista, para desesperación de la grada, cuerpo técnico y jugadores locales, que comenzaron a cargarse de tarjetas poco a poco por sus protestas al colegiado. Uno de los amonestados fue Carlos Fernández, que deberá cumplir sanción la próxima jornada y que por tanto no podrá jugar en Algeciras. 

Como consecuencia de tanta interrupción, uniéndose el carrusel de cambios a las frecuentes infracciones, el juego volvió al guión con el que terminaba el primer acto: mucha igualdad y llegadas por ambas partes, pero pocas ocasiones de gol. El Granada quería pero no podía, y sus aproximaciones al área eran poco importantes y no encontraban premio. De hecho, estuvo cerca el segundo de los hispalenses en un intento de Borja que no dio resultado.

Y cuando todo apuntaba a que el luminoso no se movería hasta el final, un pisotón de Carrillo al capitán rival, Morante, dejaba con uno menos a los locales a falta de tres minutos más la prolongación. El Sevilla Atlético se recompondría atrás con la entrada de Bernardo, aunque antes de eso Navarrete casi lograba el empate, pero apareció José Antonio para evitarlo.

El Granada B se volcaba al ataque y ello generó espacios atrás que a punto estuvo el Sevilla Atlético de aprovechar. Ivi tuvo la ocasión de sentenciar pero ahora era Robador el que salvaba el gol. Y como quien perdona lo acaba pagando, llegaría el gol del Granada B. Así, Wilson Cuero logró superar al meta local, pero David Carmona, en la misma línea de gol, despejaba a córner cuando el esférico se disponía a entrar. Y en el saque de esquina, ahora sí, llegaría el empate, aprovechando Tomás, que había ingresado al terreno de juego apenas diez minutos antes, un magnífico servicio desde la esquina que el futbolista algecireño conectó a la perfección desde el punto de penalti y sin apenas oposición.

No habría tiempo para más y finalmente el partido quedó en tablas que supieron a victoria en el bando visitante, y que le permiten no desengancharse del playoff. Por su parte, el Sevilla Atlético desperdicia una gran oportunidad para recortar con el líder Real Murcia, que también empató, y pierde la segunda plaza del grupo en favor del UCAM Murcia, bajando ahora hasta la cuarta posición.