Las experiencias recientes de entrenadores en Tigre, con estadíos muy breves por malos resultados, ponía a Cristian Ledesma en una posición muy incómoda. Su equipo necesitaba ganar o ganar ante Gimnasia, y sin lucirse pero con efectividad para golpear en los momentos justos, el Matador se llevó un triunfo que se había postergado por seis fechas, y el Lobo tiene un poco de oxígeno para encarar la recta final de la Superliga.

Cuando Diego Abal dio el pitazo final, el DT dialogó con la prensa en los vestuarios y rescató el éxito en casa, que representó una reivindicación tras el mal partido contra Newell´s: "El triunfo ha sido lo más importante de hoy. Necesitábamos ganar en nuestra cancha, veníamos golpeados de Rosario, donde no jugamos bien. Hoy el equipo sin brillar, sin tener tanto juego bien, fue muy efectivo y pudimos llevarnos un triunfo que veníamos necesitando y mucho".

Por otro lado, resaltó el hecho de las chances perdidas con el partido 1-0, que pudo haberse lamentado: "Creamos bastantes situaciones de gol, pudimos ampliar la ventaja aún más. Nos faltó el último pase para terminar la jugada y poder hacer más goles".

Tigre consiguió su tercer triunfo en la Superliga, todos en el José Dellagiovanna, y Ledesma enfatizó lo siguiente al respecto, con la ilusión de que esta victoria ayude en lo anímico para terminar lo mejor posible este campeonato: "Nos tenemos que hacer fuerte de local. Necesitábamos ganar y lo pudimos hacer. El equipo hizo un buen partido en general. Son muestras que necesitamos de todos y que el equipo tiene que estar más fuerte que nunca. El compromiso de los jugadores fue lo que nos ayudó a ganar".

En 10 partidos dirigidos, Ledesma obtuvo dos victorias, cinco empates y tres derrotas, 11 puntos de 30 en juego. Aún restan cinco fechas, y sus dirigidos no se pueden relajar, porque si bien el objetivo de la permanencia está casi cumplido este año, el próximo será duro de afrontar y estos puntos cotizan en oro.

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