Se termina otro olvidable año para el Matador, que ya no tiene margen de error y está obligado a ganar estas dos últimas jornadas de 2018 que dará punto final a la primera etapa de la Superliga, que lo tiene como protagonista en la zona de descenso.
El equipo de Mariano Echeverría se medirá ante el siempre complicado Godoy Cruz, que fue revelación en el torneo pasado (subcampeón). El Coliseo de Victoria, donde Tigre viene de conseguir buenos resultados, será el escenario de este partido válido por la 14° fecha de la Superliga.
El historial en la máxima categoría favorece claramente al cuadro azul francia y rojo bermellón: ganó nueve de los 16 enfrentamientos en la máxima categoría (anotó 25 goles), contra los cinco triunfos de Godoy Cruz (21 tantos), y dos empates. La buena racha ante el Tomba era más marcada en los primeros años del retorno matador a la A, porque el Bodeguero se hizo con los tres puntos en los últimos dos encuentros entre ambos (los dos en el estadio Malvinas Argentinas). En la última fecha de la Superliga 2017/18, el cuadro de Mendoza se impuso por 2-0 ante el elenco que comandaba Cristian Ledesma.
El último éxito del Matador ante el Expreso fue en el Campeonato 2015. El por entonces equipo de Gustavo Alfaro se impuso por 2-1 en el estadio José Dellagiovanna: de penal, abría la cuenta el histórico Carlos Luna; empataba en el complemento Jaime Ayoví, y cerca del final, de cabeza, apareció el juvenil Santiago Izaguirre (actualmente en Cipolletti de Río Negro) para darle la victoria al dueño de casa. Aquella noche, Alfaro alineó con: Sebastián D´Angelo; Lucas Menossi, Leandro González Pírez, Juan Carlos Blengio, Ernesto Goñi; Facundo Sánchez, Joaquín Arzura, Horacio Orzán, Jorge Rodríguez; Federico González y Chino Luna.
Tigre necesita volver a confiar en su fortaleza como local y demostrar que su supremacía contra los mendocinos sigue vigente. Este lunes tendrá una nueva chance de estirar las estadísticas y, sobre todo, de engordar un promedio cada vez más flaco.