Cuando terminó el mercado de pases, ya con la Superliga empezada, propios y extraños se sorprendieron con la gran cantidad de refuerzos que firmaron contrato con Tigre: en total, arribaron 28 nuevos futbolistas, muchos de los cuales no sumaron ni un minuto en el torneo, que empezó muy mal para los dirigidos por Ricardo Caruso Lombardi, sumando 5 puntos de 24 en juego y sin victorias aún. Era previsible entonces que muchos jugadores, para no perder ritmo, terminasen en la División Reserva, que vive una realidad totalmente diferente al de Primera, ya que están punteros.

El equipo de Pablo Pérez disputó ayer por la tarde, en el estadio Julio Humberto Grondona, el encuentro ante Arsenal por la 8va fecha del certamen, y lo goleó categóricamente por 5-2, para seguir en lo más alto del campeonato. El entrenador dispuso de éste once: Maximiliano Díaz;  Pedro Gutiérrez, Andrés Zanini, Rodrigo Chao, Matías Orihuela; Javier Iritier, Lucas Modesto, Facundo López, Lucas Chacana; Ivo Hongn y Ramón Miérez. De ellos, tan solo Gutiérrez, Zanini, Modesto y Miérez salieron de la Cantera del Club, que dicho sea de paso, durante la temporada pasada, alimentó de gran manera al Plantel Profesional. Los goles fueron de Hongn (doblete), Orihuela, Iritier (de penal) y Santiago Izaguirre, quien ingresó en el segundo tiempo y quien regresó al Matador tras un año en Brown de Adrogué.

Los números son impresionantes: en ocho presentaciones, Tigre ganó siete y sólo perdió una vez (ante Belgrano), y entre las victorias se destacan los éxitos ante Chacarita, River, Racing (en el Cilindro) y Rosario Central. La Reserva suma 14 goles a favor y 8 en contra.

Ahora bien, en medio de éste gran presente, hay que considerar que son pocos los juveniles que están teniendo acción y juegan varios futbolistas ya experimentados, que sacan una diferencia ante cuadros con alineaciones menores. Sin duda, a Caruso Lombardi le sirve que se muestren y destaquen, para sumar ritmo y confianza, pero la realidad es que de los que jugaron en Sarandí, sólo tiene en cuenta a Monchi Miérez e Iritier (en menor medida, a Chacana y Hongn). Que el Matador siga sumando triunfos siempre es bienvenido. Sin embargo, no hay que omitir que la Reserva debe servir como espacio para que los chicos de las divisiones menores se estimulen y desarrollen antes de dar el salto a la Primera.