Los Warriors consiguieron la victoria en el cuarto partido, por lo que la eliminatoria queda igualada a dos y regresará a Oakland para un sexto encuentro. Los pupilos de Mark Jackson volvieron a sobreponerse a las dificultades y se hicieron grandes en la prórroga, cuando lo normal es que se hubieran visto superados por la experiencia de los Spurs en ese tipo de situaciones. 

Stephen Curry cuajó un gran partido con 22 puntos, seis rebotes y cuatro asistencias. Su lesión de tobillo le impidió desarrollar su juego habitual de bote y velocidad, pero no mantener el acierto de cara al aro. Sus compañeros Harrison Barnes y Jarret Jack se encargaron de llevar el tempo y terminaron con 26 y 24 tantos respectivamente. Además, el escolta novato atrapó diez rebotes y se convirtió durante muchos momentos en la principal opción de su equipo en ataque. Prueba de ello son los 26 tiros que intentó, de los cuales sólo metió nueve. 

Mención aparte merece Andrew Bogut. El pivot australiano apenas jugó cinco minutos en la primera parte por problemas de faltas, pero en al final del encuentro resultó clave por su defensa sobre Tim Duncan y sus 18 rebotes capturados.

Los Warriors aguantan el tirón en la primera parte

Tan sólo se había disputado la mitad del primer cuarto cuando se vio que no iba a ser un partido fácil para los de Oakland. En ese escaso tiempo, sus dos jugadores interiores, Carl Landry y el mencionado Bogut tuvieron que irse al banquillo, ambos con tres faltas personales. Esto hizo que Mark Jackson diera entrada al rookie Festus Ezeli como único hombre interior. Los Spurs aprovecharon esa ventaja y con Manu Ginobili en estado de gracia desde el triple (3/3 en ese cuarto) endosaron a los locales un parcial de 14-0 en casi siete minutos. 

Por entonces David Lee también saltó a pista, aunque su participación fue escasa ya que, siguiendo el ejemplo de sus compañeros, se cargó de faltas enseguida. El segundo cuarto empezó como acabó el primero, con un triple de 'Manudona' que ponía a su equipo con ventaja de diez puntos (19-29). Como estarían los pívots de Golden State que hasta Andris Biedrins disfrutó de un par de minutos. 

Tampoco duró mucho, pero en esta ocasión fue por la superioridad que su par demostraba en cada ataque. Tim Duncan sacó todo su repertorio y en 14 minutos jugados ya sumaba casi un doble doble de 13 puntos y ocho rebotes. Y aún con todo esto, Golden State conseguía mantener la ventaja rival entre los siete y los diez de diferencia. De hecho, de haber aprovechado algunas segundas opciones de los seis rebotes en ataque que atraparon los Warriors en ese cuarto es probable que incluso hubieran podido irse al descanso por delante en el marcador. 

No fue la mejor primera parte de la serie. Ambos equipos terminaron los primeros 24 minutos con menos de un 40% de acierto en sus tiros de campo (GSW un 30%). Pero el 45-37 final sabía a poco para los Spurs y daba esperanzas a los Warriors. 

'Míster tercer cuarto Curry'

Ya con Bogut y Landry de inicio, el tercer cuarto volvió a ser dominio de Stephen Curry. El base metió los ocho primeros puntos de su equipo, con dos triples, y volvió a levantar de sus asientos a todos los presentes, e incluso, a quienes veían el partido desde casa. Parece que 'Baby face killer' (como le apodan entre sus compañeros) le tiene pillada la medida al tercer periodo. Durante los playoffs promedia 10,4 puntos y un 61% en tiros en ese tiempo, lo que significa casi cuatro puntos más de media que en el resto de cuartos. 

Su momento cambió el signo del partido y metió definitivamente a los suyos en materia. Un 2+1 de Landry con seis por jugarse pondría con ventaja a los Warriors por primera vez desde el primer cuarto. El cambio fue tal que los locales llegaron a conseguir un parcial favorable de 18-6. Hasta que Parker despertó y con cinco puntos seguidos quitó la empanada a sus compañeros. 

Reinaba la igualdad y la locura a partes iguales. Y llegó el tiempo de las curiosidades: bronca monumental de Gregg Popovich al base francés tras una canasta imposible de Curry y, seguidamente, orden del propio míster de los Spurs de poner en marcha el 'hack a Bogut' de forma descarada. Al final, dos canastas seguidas de Parker y Ginobili devolvieron la ventaja en el marcador (60-62) al final del tercer periodo. 

El último cuarto empezó con otras tres seguidas para los Spurs, que alargaban el parcial hasta el 0-10. El punto flojo de los Warriors hasta el momento estaba resultando el cuidado del balón, pues ya ostentaban 18 pérdidas. Mediado el periodo, Harrison Barnes se echó el equipo a la espalda para mantenerlo a flote con seis puntos casi seguidos. El intercambio de canastas se hizo más continuo y Jack también pidió su momento para meter tres seguidas. 

Con una gran defensa de Bogut sobre Duncan, quien prácticamente no rascó bola ni vio aro en toda la segunda mitad, se llegó al último minuto con empate a 82. Con 39 segundos el base francés de los Spurs ponía dos arriba a su equipo, pero seis segundos después un inédito Klay Thompson se inventaba un canastón para volver a empatar. Ninguno de los dos equipos acertó con la siguiente posesión y el partido se fue a la prórroga. 

Sin noticias de los Spurs

Cuando llegas a una prórroga en un cuarto partido de unas semifinales de conferencia parece lógico pensar que el equipo con más experiencia tiene más papeletas para llevarse la victoria. Pero este partido resultó ser la excepción que confirma la regla, ya que fue Golden State, un equipo plagado de rookies y jóvenes, quien barrió a los Spurs de la pista. 

Los de Gregg Popovich hicieron gala de una poco habitual precipitación en ataque, por lo que no pararon de acumular errores. Todo lo contrario que los Warriors, quienes, crecidos ante los fallos rivales, anotaban casi todo lo que lanzaban. De hecho, la primera canasta Spur no llegó hasta pasados tres minutos y medio de la prórroga y fue un triple de Danny Green. 

Por aquel entonces ya era demasiado tarde. Jarret Jack, Harrison Barnes y un 2+1 de Stephen Curry habían puesto con más nueve a los locales (93-84), una ventaja ya insalvable. 

El quinto partido se disputará en San Antonio el próximo jueves a las 04.30 horas, horario peninsular. Será la ocasión de ver quien toma ventaja en la serie antes de que ésta vuelva a Oakland. El espectáculo está asegurado.

Fuente foto: ESPN

VAVEL Logo
Sobre el autor
Toni Gárez
Periodista. Amante de la radio en directo. Dadme un balón y escribiré una canasta.