La pretemporada es el laboratorio de pruebas para los equipos antes de iniciar el curso, por lo que es común dosificar minutos, probar e intentar asimilar nuevos sistemas de juego o ver en acción a los rookies procedentes del draft veraniego. Sin embargo, ayer vimos en el Toyota Center de Houston un auténtico partido de regular season, por lo menos durante una competida primera parte. Con las bases del juego asentadas en ambas franquicias, la oposición de un rival de entidad candidato a playoffs, supuso el escenario idóneo para mostrar a los aficionados qué les espera esta temporada.
Houston jugó rápido, con circulaciones frenéticas siempre que tuvo la más mínima oportunidad, aprovechando el dominio en la pintura de Howard, lo cual permitío imprimir una gran velocidad que imposibilitó las transiciones defensivas de los Maveriks. A menudo Houston pecaba de precipitación a la hora de atacar, lo cual se tradujo en numerosas pérdidas de balón. Otro de los recursos que aprovecharán los Rockets esta temporada será el pick and roll visto lo visto, pues dos especialistas en esta faceta como Howard y Lin intentarán sacar el máximo partido a su conexión, tal como sucedió anoche en el primer cuarto, cuando Howard machacaba el aro fácilmente tras previa penetración de Lin. No obstante, también vimos algunos de los problemas que afrontaran los Rockets esta temporada, como la irregularidad de Jeremy Lin, nefasto en la madrugada de ayer en el tiro, la ausencia de un “cuatro” abierto que obligaba a Howard a jugar ahí cuando coincidía con Asik, o la poca profundidad de banquillo, ya que apenas jugaron en todo el partido (sin contar los últimos minutos) Beverley, García y Casspi. El mejor del partido para Houston fue el de siempre, James Harden, cuya presencia se traducía en peligro cada vez que estaba en pista. Finalmente cerró su partido con 19 puntos en 24 minutos.
Dallas ayer demostró que debe ser considerado seriamente para entrar en los playoffs, sobre todo cuando los titulares estaban en pista. Calderón dirigió perfectamente a sus compañeros y fue el máximo anotador de los Mavs con 14 puntos. Ellis, quien jugó un partido horrible con ínfimos porcentajes en el tiro (3-13), tuvo mucho protagonismo ofensivo y fue el que más veces tiró de su equipo. Nowitzki hizo un buen encuentro, volviendo a aprovechar su indefendible tiro de 4-5 metros (11 puntos), aunque en defensa no estuvo muy acertado muy acertado, al capturar solo 4 rebotes. Los Mavericks se presentan como un equipo con un gran potencial ofensivo y menor capacidad defensiva, con especialistas en el tiro exterior que tirarán siempre que tengan oportunidad beneficiándose de la dirección de juego de Calderón. Entre ellos ayer destacó Ellington, con tres triples y 11 puntos. Además, se presupone que Nowitzki dividirá su responsabilidad anotadora con el recién fichado Ellis, mientras que la labor defensiva del equipo estará en manos de Dalembert y Marion.
Como hemos dicho, en la primera parte se jugó con un ritmo similar al de temporada regular. La igualdad en el marcador era la nota predominante, con intercambios en el marcador, hasta que al final del primer cuarto Carter y Ellington pusieron una pequeña ventaja en el marcador.
En el inicio del segundo cuarto Houston arrancó con problemas para anotar, siempre al ritmo marcado por los Mavericks, quienes conseguían mantener la ventaja adquirida al final del primer cuarto. La entrada del Harden y Parsons de nuevo en pista cambia la cara de los Rockets, sobre todo en intensidad y recursos ofensivos. Esto unido a la falta de dirección y a la precipitación en el tiro de Dallas con Ellis y Marion a la cabeza, permite a Houston remontar el partido a falta de un minuto y poner el parcial del cuarto en 18 a 30 para ellos, cerrando el primer tiempo con el marcador de 51-55 para los Rockets.
En el inicio de la segunda parte se invirtieron los papeles y fue Houston quien comete demasiadas imprecisiones, faltas absurdas en ataque y numerosas pérdidas, lo cual permite a Dallas liderar el marcador de nuevo. La nota predominante en este tercer cuarto fueron la precipitación y el juego individual de ambos equipos, que les llevó a reducir sus porcentajes de tiros de campo en más de un 3%. Este aburrido tercer periodo acabó con un parcial pobre de 19 a 20 para Houston. En este cuarto, Nowitzki fue expulsado del partido al cometer una falta fragrante II contra Casspi, en una penetración de éste, lo cual es un signo inequívoco de la dureza e intensidad del encuentro, algo atípico en una pretemporada.
El último cuarto no tuvo demasiada historia, pese a que el marcador final reflejó un empate a 25, ya que ambos quintetos titulares se quedaron en el banquillo. García y Casspi pusieron una ventaja de 9 puntos en el inicio de este último cuarto, distancia inalcanzable para Dallas, a pesar de los tímidos acercamientos del final, en parte debido al trabajo de Mekel y Ellington.
(Foto: mavsblog.dallasnews.com)