Quinta noche de playoff. Noche en la que se han jugado hasta tres partidos, en los que destacar la segunda derrota de Portland que tiene cuesta arriba la clasificación a semifinales. Idénticos resultados para Toronto ante Wizards y de Boston contra Bucks.
New Orleans Pelicans 111- 102 Portland Trail Blazers
Los Pelicans vuelven a casa con dos victorias en dos partidos. Holiday que ha jugado un gran partido ha sabido defender a la perfección a un Lillard que ha estado pletórico hasta el momento decisivo de la temporada. Holiday y Davis con su bloqueo y continuación que practicaron toda la noche destrozaron a los de Oregón. 33 puntos y nueve asistencias para el base y 22 puntos más 13 rebotes para Davis. Como ya pasaría en el primer partido de la eliminatoria, a Lillard le costó un mundo anotar. Acabó el encuentro con 17 puntos. Mirotic desbarató las opciones locales con el 100-99 con un triple que fue una bomba de oxígeno para los suyos.
Milwaukee Bucks 106- 120 Boston Celtics
A pesar del recital anotador del "indefendible", según palabras de Stevens, Giannis Antetokounmpo que acabó la noche con 30 puntos, nueve rebotes y ocho asistencias los Bucks consuman la segunda derrota en estos playoff. O lo que es lo mismo, segunda victoria de los de Boston. Partido que controló de principio a fin el equipo local. Jaylen Brown fue quien llevó la batuta anotadora de en unos Celtics que no cuentan con su máximo creador de juego y con una gran cantidad de efectivos en la enfermería. 30 puntos y cinco rebotes para él.
Washington Wizards 119- 130 Toronto Raptors
Partido que no solo significa el dos- cero para los Raptors, sino que sirve para batir dos récords el de puntos en una mitad, 76 en la primera parte, y su récord de puntos en un cuarto, 44 en el que dio inicio al duelo. De nuevo, y ya no es una sorpresa, el banquillo fue tan importante como el cinco inicial. Casey utilizó a los 13 jugadores disponibles. 37 unidades anotó DeMar DeRozan, que se sintió acompañado por su compañero Kyle Lowry y sus 13 puntos y 12 asistencias. Fueron capaces de sacar del partido a las dos grandes armas ofensivas de los capitalinos, Beal y Wall.