Bam, Bam, y con Adebayo a la final

El sexto encuentro entre estas dos franquicias significaba el pase a la final de la NBA de Miami o forzar la muerte súbita en un séptimo. Todo indicaba que sería igualado y que se decidiría en los últimos minutos.

Poco acierto, mucha igualdad

El choque comenzó con bastante ritmo, sin embargo, los puntos no subían al marcador debido al bajo porcentaje de acierto (2-15) en tiros de campo, nulo en el caso del triple, ya que se fallaron 10 seguidos en los primeros cuatro minutos.

Tras calentar las muñecas, Miami trabajó desde la distancia, y castigó con varios triples a Boston para lograr una ventaja de nueve puntos antes de acabar el primer cuarto. Los verdes reaccionaron con un Jaylen Brown, con 10 puntos durante este periodo, y Marcus Smart bastante activos, pero con Jayson Tatum algo apático, sin anotar. Jimmy Butler era el que llevaba el peso de los Heat, superando los dobles dígitos. Otro que se las sabe todas es Andre Iguaodala, que estuvo acertado en la captura del rebote y en los intentos desde lejos, lo que le confería una ventaja a su conjunto.

Tatum quiso aferrarse a las opciones de los Celtics, y despertó durante el segundo cuarto para poner por delante a Boston con varias transiciones rápidas. Sin embargo, Miami continuó como de costumbre, y pisó el acelerador para llegar el descanso con el marcador favorable 62-60. Esta primera parte tuvo tramos de igualdad, pero la sensación era que las dos franquicias pasaron por altibajos, y que el partido se lo llevaría quien lograra el parcial más extenso.

Pon un Adebayo en tu zona

La segunda parte comenzó con Bam Adebayo cargando la zona de Boston y anotando sin parar, con 22 puntos a la mitad del tercer cuarto, al igual que Iguodala, quien convirtió dos triples seguidos que daban alas a Miami. Aun así, los Heat no conseguían despegarse más de 10 puntos de unos Celtics que confiaban en los ‘Jays’ y en Kemba Walker, pese a las cuatro faltas que hizo. Los puntos en segunda oportunidad dieron vida a Boston, ya que les permitía fallar y volver a intentarlo, y recortar hasta empatar en un parcial 10-2 al final del tercer cuarto.

Los últimos doce minutos decidirían si habría un séptimo partido o si tendríamos al finalista del Este. Adebayo quiso lo segundo y dominó sobre la pintura para sumar un total de 32 puntos y 14 rebotes, haciendo inservibles los 50 puntos combinados de Brown y Tatum. El pívot de Miami se mostró intratable y llevó a su franquicia a la final por primera vez desde 2014. La nota negativa del choque fue el desacierto de Boston, sobre todo de Gordon Hayward, quien falló en muchas ocasiones en las que estaba liberado. El 56% de acierto de los de Florida era otra piedra más en el camino de los Celtics, hasta que se encontró con un parcial de 26-6 que los fulminó.

Iguodala rompe la igualada

Por su parte, Andre Iguodala se marcó un partidazo, superando su marca de anotación desde las finales de 2019, con 15 tantos. Sus compañeros no se quedaron atrás, y Jimmy Butler convirtió 22 puntos entre café y café, sumados a los 19 de Herro, los 13 de Dragić y los 15 de Robinson, construyeron poco a poco el ataúd de los de Brad Stevens. Este último intentó sacar un quinteto pequeño para probar el triple, pero no le dio resultado, y Erik Spoelstra le ganó la partida.

De esta forma Miami Heat accede a la gran final de la NBA, donde se encontrará con un viejo conocido, LeBron James. Será una eliminatoria muy competida, donde la clave puede darse en el mínimo detalle en cualquiera de las franquicias.