Se vistió de gala el Santiago Martín lagunero en una nueva demostración de efectividad del Iberostar Tenerife. El cuadro canarista volvió a citarse con la victoria, esa amiga que se ha hecho tan importante desde el primer encuentro en la primera jornada de esta campaña. El equipo de Txus Vidorreta está empeñado en prolongar su buen momento. Esta vez calló en el feudo aurinegro el Movistar Estudiantes de Salva Maldonado, que puso las cosas muy difíciles a los locales y que demostró que este año el conjunto madrileño tiene mucho que decir en el campeonato.
Acudió en masa la afición a ver a su equipo, que ya sabe ganar incluso cuando no florece el mejor baloncesto. Fue un día de efectividad, una jornada de empuje y en la que lo importante era ganar. Si aún no estando en tu mejor día vences, la categoría de equipo 'grande' no suena para nada descabellada.
El Iberostar formó de inicio con San Miguel, White, Doornekamp, Hanley y Vázquez. Salva Maldonado, técnico visitante, salió con Cook, Jackson, Grimau, Traoré y Suton. Inauguró el marcador Fran Vázquez con un posteo y gancho a la media vuelta. Jackson anotó un tiro tras bote para estrenar el luminoso estudiantil.
Hanley comenzó muy concentrado y aprovechando su titularidad
El conjunto lagunero comenzó a hacerse fuerte en defensa y a aprovechar sus ocasiones en ataque. Destacó en estos momentos un gran Will Hanley, que comienza a encadenar buenos partidos saliendo de inicio. White y Doornekamp continuaron la racha aurinegra. El Estudiantes concedió varios ataques y Jackson absorbió mucho balón jugándose muchos tiros. Tras un rebote en ataque y un buen bloqueo, Cook anotó un triple a falta de 2:39 para el final del primer acto que acercó a su equipo (14-11).
Con las rotaciones se equilibró un poco más el partido. El Estudiantes movió mejor el balón en ataque, se aprovechó de alguna segunda oportunidad concedida por el Iberostar en el rebote defensivo y anotó desde todas las distancias. Jamar Wilson convirtió un triple cuando restaba algo más de una posesión para el final del primer cuarto e igualó el encuentro a 16 puntos.
El Canarias, con Abromaitis y Niang en la pintura, aprovechó en el comienzo de segundo cuarto la capacidad atlética de ambos interiores. Con el pick and roll con el pívot senegalés y buscando puertas atrás tanto con él como con el estadounidense, la autopista hacia el aro se abrió y llegaron muchos puntos atractivos que hicieron disfrutar a la grada.
Con un buen Beirán, sacando faltas y anotando, y tras unos buenos minutos de dirección de Bassas, el Iberostar se puso 28-21. El parcial lo rompió Grimau con un buen triple que dio un respiro a su equipo.
De nuevo con los cambios el partido cogió más dinamismo y rapidez en el juego. El cuadro aurinegro supo aprovecharse y tras una canasta rápida de Beirán abrió un parcial importante donde su equipo se fue a los ocho de ventaja (36-28). Un Maldonado apercibido de técnica por sus protestas a los árbitros solicitó tiempo muerto.La reacción llegó con un triple de Brizuela tras un pequeño desajuste en la marca de White. Sin embargo, Will Hanley aprovechó su entrada en pista, como viene haciéndolo últimamente. El ala-pívot contrarrestó la acción anterior con otro triple. Sin encontrar el acierto en la última posesión, el Estudiantes no pudo reducir diferencias y se llegó al descanso con un 40-31 en el marcador.
Davin White se retiró en el tercer cuarto con dolor en la rodilla
Tras el paso por vestuarios los madrileños parecían tener las ideas mucho más claras. Con un Jackson inspirado en ataque y un Iberostar perezoso en defensa y anotando lo justo, la diferencia se vio reducida poco a poco. Davin White, en una jugada que finalizó con una canasta suya, terminó pidiendo el cambio ante un dolor aparente en su rodilla izquierda. No regresó a la cancha en todo el partido.
La canasta del escolta aurinegro dio un respiro a su equipo, que continuó anotando y dando un poco más de calma. Beirán y Vázquez fueron en este caso los encargados, sin embargo, un error defensivo en la subida de balón concedió a Vicedo una nueva oportunidad que no desaprovechó y convirtió en dos más uno. El Estudiantes estaba muy metido en el partido con el 52-50.
El partido se convirtió en un ida y vuelta y el intercambio de canastas se volvió una constante. Al principio pareció verse beneficiado el Iberostar, que pudo volver a irse hasta los seis tantos de diferencia. No obstante, en momentos como este la suerte puede caer de cualquier lado y con jugadores como Cook en las filas estudiantiles los visitantes se aprovecharon. El base anotó de tres y apretó el marcador (61-58) cuando apenas restaban 24 segundos para el final del tercer cuarto.
En una jugada poco elaborada pero que dejó a Beirán con el espacio suficiente como para armar su brazo, el triple llegó y el Iberostar afrontó el último periodo con seis tantos de renta (64-58), algo muy positivo para ellos teniendo encuentra lo que habían dado de sí los terceros diez minutos.
Con Ferran Bassas en pista, un base muy creativo con un talento enorme para el pase, el Iberostar creció en ataque. El catalán hizo esta vez de finalizador. Anotó cinco tanto seguidos y contrarrestó los intentos de Fernández. La diferencia volvió a situarse a favor de los tinerfeños en los nueve tantos (71-62) a falta de seis minutos para el final del encuentro. La sensación era que el partido podía caer de un momento a otro en la sentencia local pero la paciencia en ataque de los canaristas se antojaba excesiva, tanto es así que varios ataques terminaron en tiros apurados sobre la bocina de posesión que ni tocaban aro.
Doornekamp en el poste fue decisivo
Ambos equipos acumularon fallos en ataque. Se podría incluso decir que el que supiera beneficiarse en mayor medida de estos errores contrarios saldría mejor parado. Un factor también importante fue la aportación en ataque de Aaron Doornekamp para Iberostar. El alero canarista posee unas condiciones físicas superiores a las de los exteriores madrileños. Vidorreta aprovechó esta situación y pudo verse como el canadiense recibió varios balones en el poste y tras posteo, anotó varias veces, incluso sacando tiros adicionales.
Gracias a ello el Canarias cogió una ventaja que se consolidó con dos tiros libres de Vázquez que pusieron el 76-65 en el marcador con algo más de dos minutos para el final del partido. Una nueva acción finalizada en mate por el pívot gallego certificó su buena actuación (13 puntos, 9 rebotes y 20 de valoración). Poco le hizo falta al Canarias para administrar el tiempo que le quedaba. Se vio incluso beneficiado el equipo lagunero del carrusel de tiros libres y cerró el encuentro con 81-72 en el marcador.
La sexta victoria en siete partidos se quedó en la isla. Una isla que sueña con la mejor versión de su equipo en un arranque de temporada y que apunta a lo más alto.